𝘽𝙇𝙊𝙊𝘿 𝙈𝙊𝙊𝙉 #3 [𝘚𝘵𝘪𝘭𝘦𝘴 𝘚𝘵𝘪𝘭𝘪𝘯𝘴𝘬𝘪] 𝘛𝘌𝘌𝘕 𝘞𝘖𝘓𝘍

•Capítulo 2•

Stiles

Scott se ha ido, pero la clase continúa en total silencio.

Miro a mi al rededor, aburrido, pero entonces noto algo extraño en el tobillo de Lydia, tiene una venda. Frunzo el ceño.

-Oye, Lydia- Ella gira la cabeza y me mira, señalo su tobillo- ¿Qué es eso, es del accidente?

-No, Prada me mordió.

-¿Tu perro?

-No, mi bolso de diseño- La miro confundido- Sí, mi perro.

Lydia rueda los ojos y sigue escribiendo.

-¿Y te había mordido alguna vez antes?- Vuelvo a preguntar. Ella hace un sonido negativo- Vale, ¿Y si es por lo mismo que lo del ciervo? Como cuando los animales comienzan a actuar raro antes de un terremoto.

-¿Qué quieres decir? ¿Va a haber un terremoto?- A mi lado, Maya se mezcla en la conversación.

-O algo así, tal vez... Solo digo que quizás se avecina algo. Algo malo.

-Ha sido un ciervo y un perro- Vuelve a decir Maya- Recuerda lo que dices siempre, uno es un accidente, dos una coincidencia...

Maya no termina la frase porque en ese momento algo choca contra la ventana de la clase, dejando un rastro de sangre y plumas.

Todos miramos hacia la ventana para verificar lo que ha pasado. Miro con curiosidad mientras la profesora se acerca a la ventana.

A lo lejos se escuchan ruidos de pájaros. Cuando miro, una enorme bandada de cuervos se acercan hacia nosotros.

Otro pájaro se estrella conta la ventana, el siguiente consigue romper el cristal.

Una oleada más de pájaros se chocan o rompen el cristal, inundando la clase de plumas y alas neras.

-¡Al suelo, todo el mundo!- Grita la profesora.

Los cuervos vuelan por la clase, arañandonos y dejándonos rasguños por la cara.

Enseguida me acerco como puedo hasta la mesa de al lado, me agacho junto a Maya y la rodeo con mis brazos, tapándola de cualquier pájaro.

Un minuto después, parece que el ambiente se ha calmado. Ya no se oyen a los pájaros graznar ni ninguno está revoloteando por el aula.

Me levanto con Maya a mi lado, todo a nuestro al rededor está tirado por el suelo y lleno de plumas negras.

-¿Estás bien?- Me pregunta.

-Sí, ¿y tú?

-Sí.

Le acaricio el brazo y a continuación le quito un par de plumas del pelo.

Después de eso la policía no tarda mucho en llegar.

Estoy apoyado en una mesa revisando mi móvil, levanto la vista y veo a la profesora, que tiene la mirada perdida y un par de arañazos en la cara.

-Señorita Blake, ¿Está bien?- ella no contesta. Tiene una pluma en la cabeza, y yo tengo el impulso de quitársela. Alargo mi brazo y se la quito.

Vuelvo a apoyarme en mi mesa, enfrente mía veo al Señor Argent, con Allison. Mi padre se acerca a ellos.

-Señor Argent, no sabrá nada sobre esto, ¿verdad?

-¿Yo?- Pregunta extrañado.

-Sí. Todo este comportamiento animal tan extraño... usted habrá visto algo como esto antes ¿no?