Se había vuelto una costumbre que Yangmi llegara mucho a visitar a Yoongi.
Habían pasado casi dos semanas y estos se volvían cada vez más cercanos, ella aún le traficaba solamente un dulce para que lo disfrutara ya que estaba aburrido de comer cosas desabridas en ese lugar, pues ¿Qué esperaba? Igual estaba a dieta, sus heridas ya habían desaparecido sólo tenía uno que otro moreton pero no era nada grave, cada vez que se ponían a conversar él se quedaba callado para oír bien la voz de aquella joven y que se le Siguiera grabando en su mente, ella le contaba cosas que hacía durante su día, claro omitiendo la parte de que trabajaba ahí, ella le llevaba el periódico ya que no sabía cómo entretenerlo, aunque para él era aburrido leer las noticias en ella no le molestaba en lo absoluto ya que se tomaba el tiempo de leerselo y le encantaba su voz.
-Y eso es todo lo que trae hoy-dijo ella mientras doblaba el periódico- realmente no entiendo las cosas de Deportes lo siento. -dijo mientras miraba al joven, ella se ponía feliz verlo más sano últimamente él era más comunicativo con ella y eso le alegraba, ella inconsciente empezaba amar cada parte de él, le encantaba la pequeña sonrisa que tenía y qué pocas veces había tenido la oportunidad de verlo de esa manera, mientras ella andaba perdida admirando al castaño, él sentía que ella estaba algo cerca, se levantó y se acercó a ella así sentado en la cama, sabía cual era el lugar exacto dónde ella se ponía.
-No te preocupes igual no me interesa mucho los deportes- dijo mientras quedaba en frente de ella.
YangMi sólamente lo observaba y éste levantó su mano para buscar el rostro de aquella joven, era algo que ni él se esperaba hacerlo, lentamente posó su mano en una mejilla de aquella joven, <que piel tan suave> pensaba.
En cambio ella se sorprendió por la osadía que tenía aquel joven pálido, su corazón empezaba latir con fuerza, quería verlo otra vez a los ojos, ella ya lo había visto sin las vendas mientras la enfermera se los cambiaba y había quedado cómo tonta, los ojos de Yoongi eran pequeños que le daban ternura, era totalmente hermoso ante sus ojos.
¿Cómo era eso posible? Apenas lo conocía pero eso no importa cuando se trata de amor ¿no? Ella lo observó y cerró sus ojos ante ese cálido toque, era como un gatito que buscaba cariño, se sentía avergonzada no entendía porque le gustaba ese toque, ella quería tocarlo también pero no se atrevía, volvió a tierra cuando escuchó unas palabras que la sorprendió.
-Debes ser muy hermosa...
Ella se quedó sin palabras, ella no se consideraba exageradamente bonita pero tenía más de algún encanto que hacía que varios pusieran los ojos en ella pues su personalidad era demasiado amigable que luego se echaba amigos en su bolsa.
-Gra... Gracias -dijo tartamudeando, ella se quedó viendo el rostro de aquel joven y también sin dudar le tocó la mejilla a Yoongi, éste se sorprendió y sonrió, ella también hizo lo mismo.
El ambiente era cálido, era un momento dónde ambos se sentían cómodos, disfrutando la compañia.
Ahí se dieron cuenta de sus sentimientos.
Para enamorarse no se necesita un tiempo específico, simplemente pasa sin avisar.
Ninguno habló de lo que pasó el día anterior, Yoongi había Estado de buen humor y por alguna razón se sentía muy motivado, quería volver a ver y así conocerla y al fin ver el rostro de aquella voz que le encanta escuchar.
En cambio la pobre Yangmi había regresado a su casa muy feliz, ¿acaso era lo que estaba pensando? Cualquiera diría que era una tontera, pero lo que hubo en ese día anterior la había puesto de buen humor.
Ella llegó de nuevo al cuarto de Yoongi, ya se había vuelto un hábito, ¿Qué haría después Cuando lo dieran de alta? Ni quería imaginarlo de tan sólo pensarlo la ponía algo triste. Vio al joven sentado esperando a que llegaran por él en cualquier momento, ella se acercó y el levanto la cabeza poniendo atención sus pasos.
-Hola Yoongi- dijo ella tranquilamente vió que se relajó al escuchar su voz.
-Hola... -dijo algo callado.
-Hoy es el gran día ¿no?
Yoongi se preguntaba si era bueno pensar tan positivamente en esa situación.
-Eso que importa sólo necesito largarme de aquí. -dijo con amargura.
Ella lo vió negando la cabeza, pobre le Entendía ya llevaba ratos en el hospital.
-Tienes razón -dijo ella mientras se sentaba a la par de él- pero sé que tu operación saldrá bien y yo seré la primera persona que vas a ver cuando te quiten las vendas, vas a recuperar tu vista.
Esa actitud la deseaba él tenerla aunque él por orgullo no admitía que tenía miedo de no lograran que él volviera a ver, él quiso decirle algo pero escuchó los ruidos.
<maldita Sea> pensó, sabía que ya venían por él, sintió que ella se acercó a su oído y le susurró.
<no te preocupes, todo saldrá bien, lo prometo y ahí estaré Contigo>
Ella salió del cuarto sin dejar qué él le respondiera.
Pero otra vez su voz lo había calmado.
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Dulce Melodía [Suga] [Finalizada] [BTS]
FanfictionQuién iba a decir que él se enamoraría solamente de esa voz que era tan melódica y que haría que fuera como su canción favorita sin saber cómo era físicamente y sin entender porqué ella era atenta hacia él. [Historia corta.] [Suga]