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YangMi estaba preocupada había oído que durante su descanso le habían dicho a Yoongi que necesitaba otra operación en sus ojos para que recobrara totalmente su vista.

Yoongi había entrado en pánico. Cuando sintió que le habían quitado la venda y no miraba nada,  todo era obscuro, tuvieron que darle un calmante ya que se había descontrolado, no era su intención hacerlo pero esa fue su reacción del momento.

Pero eso no quitaba que estuviera de mal de humor y triste, al parecer su miserable vida lo quería joder un poco más al parecer no era suficiente todas las desgracias que le sucedían.

La joven entró a la habitación y lo vio,  sentía su corazón encogerse verlo ahí viendo a la nada,  había decidido visitarlo igual lo tenía que hacer.

"Necesito tu ayuda,  que sólo estés a su lado"

Las palabras de su padre sonaban en su mente,  al final la Pusieron a cuidarlo y ver otros asuntos dentro del Hospital. No le molestaba en ir aunque éste la tratara de una forma pesada.

-Hey...  -dijo mientras se acercaba a él,  no recibió ninguna respuesta, no le sorprendía ya era el tercer día de intento de que entablaran una conversación pero aún no se rendía. -traje unos dulces -dijo ella mientras buscaba en su bolsillo- yo sé que te gustaran.

Yoongi sólo seguía quieto,  trató de poner su mirada hacia ella aunque tuviera las vendas y quedó en silencio,  no tenía ganas de nada pero se sentía feliz aunque no lo admitiera,  lo ponía feliz escucharla,  la voz de la joven se había vuelto como una dulce melodía, quería sacar conversación pero simplemente no le nacía,  escuchaba atentamente para calcular donde ella estaba y sintió que la cama se hundió un poco "Ah...  Está cerca" Pensó y estaba en lo correcto Yangmi se sentó cerca de él y tomó la mano de él sin dudarlo y le puso un dulce,  el movio los dedos tocando el pequeño papel.

-Es...  Un dulce de café- dijo ella- es algo amargo...  Estoy segura que te va a gustar- ella sonrió aunque éste no la viera- habías comentado que te gusta el café amargo...

Él se sintió conmovido ¿Por qué se sentía tan cálido?  Apenas la conocía y no sabía cómo era físicamente, quería verla,  que tontería era una tontería de él o eso quería creer,  tal vez porque siempre estaba solo y no había alguien que se preocupara por él,  simplemente había escapado de su hogar ya que tenían opiniones diferentes y querían obligarlo a tomar el cargo grande de la familia que era un pequeño negocio pero le iba a tocar hacer todo solo,  claro al escuchar eso le parecía injusto se habían hecho los sordos cuando el dijo que quería construir su propia empresa instrumentos claro todos le dieron la espalda y decidió que era mejor salirse de ese lugar.

-Sé qué no debería dartelo -dijo ella mientras lo sacaba de sus pensamientos- pero con uno no hace daño -decía mientras se rascaba su nuca y ella lo observó.
-Gracias...  -dijo Yoongi mientras se llevaba el dulce a su boca y en efecto era un dulce con sabor a café amargo,  quería sonreír,  le empezaba a gustar este tipo de trato de aquella joven,  se quedó sin decir nada más de ahí escuchó un sonido de una bolsa.

-¿Traes algo más?  -dijo frunciendo su ceja- sabes yo no soy mascota de nadie para que me traigan alimento.

YangMi lo vió y se rió un poco realmente no cambiaba su actitud.

-No eres mi mascota,  qué grosero -dijo mientras sacaba otro dulce y se lo ponía en su mano, sacó otro y se lo metió a la boca- igual no pensaba darte nada más.

Se levantó y empezó a caminar.

-vas a guardar un secreto... Mejor dicho nuestro secreto de que te doy dulces cuando no lo tengo permitido.

-No me interesa,  no me metas en tus asuntos.

-Lo tomaré como un no diré nada. -dijo mientras lo veía por última vez. -Te veo luego Yoongi.

<te veo luego Yoongi> que hermoso se había escuchado en aquella voz.

-Definitivamente eres una melodía para mis oídos...

Dulce Melodía [Suga] [Finalizada] [BTS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora