Familia PERAYA

Trabajo Final 2

Krist sentía calorcito rico, estaba envuelto en brazos de su guapo novio, y aparentemente esta en la cama de su novio.

Como es que su novio se veía tan sexy dormido. Krist estaba pasando por ese momento incomodo donde la naturaleza le recordaba que no era normal, el período de su novio recién había terminado y ahora seguramente estaría exitado la mayor parte del tiempo. ¿Qué pasaría si por una vez, solo una vez? Pasó su mano por la cintura de Singto dirigiéndose a su cadera.

Un par de veces había intentado seducirlo, cansado de hacer uso de pornografía, pero su novio era perfecto y amablemente lo había lanzado a la piscina, a la ducha fría o simplemente lo había dejado solo.

La famosa charla sobre sexo seguro le daba ideas perversas a Krist pero Singto parecía no estar convencido. O eso creía el.

-Krist si continuas no voy a contenerme - Singto estaba despierto y su pequeño amiguito también, sujeto la mano de Krist y la llevó a su boca, beso cada uno de sus dedos, siguió con su camino besando su brazo hasta tocar su cuello.

-no quiero que te contwngas- tener al novio más sexy del mundo y no poder tocarlo era mucho peor que tener que hacer el trabajo final.

-hicimos una promesa Krist- estaba listo para dejarlo solo en la habitación.

-y no la vamos a romper... Confía en mi - el menor sonrió ampliamente mientras se acomodaba sobre su novio llenando le de besos el cuello, bajando por su pecho, la camisa de Singto perdió algunos botones en el proceso.

-¿que vas a hacer? - Krist se deshizo también de los pantalones del mayor apoderándose inmediatamente del miembro erecto de su novio, el menor trabajo el cuerpo ajeno con su mano como si fuera el suyo, Singto observó como su novio lo masturbaba con dedicación, coloco su mano sobre la de Krist indicándole la fuerza y velocidad que necesitaba, movió también su cadera imaginaba que en lugar de la mano de Krist era su delicioso cuerpo lo que follaba.

En aquella posición podía sentir la prominente ereccion de Krist, respirando profundo se incorporó, quedando sentado frente a Krist, devoró sus labios con desesperación mientras se deshacía de la ropa de este.

-la ropa, quitatela - pidió suplicante mientras el mismo de quitaba por completo los pantalones

-Singto, no... - aun quedaba algo de cordura en su cabeza

-confía en mi, amor- le beso dulcemente, bajando por su pecho y jugando con su ombligo hasta que ninguno poseía prenda alguna.

Se recoataron uno junto al otro besandose con deseo y necesidad. El mayor tomo la mano de Krist llevándola hasta su pene erecto para que continuará con lo que había empezado, posó su propia mano en el cuerpo ajeno imitando sus movimientos. Así podían satisfacer sus necesidades sin peligro alguno.

Krist echo la cabeza hacia atrás sobre la almohada, disfrutando el tacto de su novio, Singto aprovecho el momento para besar y morder su cuello dejando marcas en la piel blanca, ambos aceleraron el ritmo de sus manos, amos poseían sentir la humedad emanar de sus cuerpos y una fuerte sensación inundar les de placer.

Singto mordió los pezones rosados del menor llevándolo a un torbellino de placer, su mano se lleno de líquido blanco y espeso y poco después el mismo estalló de placer ensuciacndo la mano de su novio.