Capítulo 20 (Sin imaginación para el nombre :v)

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Hey!!!! Buenos días, tardes o noches!!! Aquí estamos de nuevo actualizando esta hermosa historia :3
Ahora que tenemos un poquito más de tiempo nos esforzaremos por mantener un buen ritmo de actualización...dije "nos esforzaremos"
Se vienen sorpresas y muchas cosas así que ¡Señoras y señores! ¡niños y niñas! ¡preparen sus pañuelos y sus palomitas porque...!

¡se nos viene la recta final de la historia!

Asi es, casi acabamos :3 pero no les voy a decir cuanto falta o Mali me mata :3

Sin más ni menos comenzaremos el capitulo :3

Auuuuuuu!!

Era una noche tranquila en la casa del Mikellino.Trolli dormía plácidamente con Mike a su lado, quien también dormía cómodamente cobijado, como les era costumbre. En la habitación reinaba el silencio, que solo era interrumpido por los ronquidos de la pareja en cuestión, mientras tanto el reloj en el buró marcaba las cuatro treinta de la madrugada, la hora más sabrosa del sueño.En ese momento la puerta de la alcoba se empezó a abrir lentamente y, de repente y sin ninguna misericordia, dos figuras se lanzaron contra la pareja, cayéndoles encima tomándolos desprevenidos.

-¡Papá papá, es hoa!- gritaba una pequeña Soleil, mientras saltaba en la cama de sus padres con gran euforia Mikellino, quienes los había despertado bruscamente.

-Mikelli, Soleil, son las cuatro y media de la madrugaadaaaaa- le dijo Mike con un gran bostezó.

-Cariño, faltan un par de horas para que salga el sol, porque no van a dormir otro rato, hoy será un gran día y necesitaras mucha energía- le dijo Trolli.

-Haaa, eta bie- dijo Mikellino, regresando a paso lento a su habitación junto a su hermana.

-Me alegra saber que por lo menos un día al año despierta temprano, nunca les gusta eso- le dijo Mike a Trolli, cuando no recibió respuesta de este, se giró solo para ver que este ya estaba dormido de nuevo, por lo que agito su cabeza de forma negativa, después se aseguró de que estuviera bien, para después seguirlo a los brazos de morfeo.

La causa de tanto alboroto era que ese día era el cumpleaños de Mikellino y Soleil, y no cualquier cumpleaños, el primero que pasarían con su padre y más amigos de su madre.

Cuando amaneció, Mikellino y Soleil disfrutaron de su desayuno; tortitas de nata con helado de vainilla. Trolli ese día escondió los regalos para sus hijos y fue a traer a los chicos.Estos estaban más emocionados que los mismos padres. Raptor abrazó a la cabra y Mónica se relacionó con los gemelos rápidamente y, para el final de la fiesta, los tres ya eran compañeros para hacer juegos y bromas.Durante esta, Sparta estuvo casi toda la fiesta sentado con la cabra. Esta fue dejada en un pequeño corral, donde parecía estar más que a gusto. Flex estuvo muy alejado de los niños, aunque también les trajo un regalo.El primer regalo que les dió Trolli fue el pastel. Este era de tres pisos. El primero de chocolate con el nombre de los niños. El segundo era de chocolate blanco con un dibujo de Bakugan, un anime que muy a pesar de Mike, tanto Trolli como sus hijos lo adoraban y el último era de chocolate amargo. Era más que obvio que ese era solo para los adultos.Las mañanitas fueron cantadas casi de corrido por todos, pues al ver el pastel nadie quiso esperar.

Rápidamente agarraron los niños y comieron. La primer ronda de regalos se acercaba. Los niños recibieron ropa y cosas de uso diario, lo que al contrario de lo que pensaban, les había encantado la ropa. Trolli tenía sus regalos con el, estaba nervioso.La segunda ronda estaba siendo un éxito, ningún regalo parecía tener que ser devuelto. Los niños se emocionaban con cosas simples, un cuaderno de dibujos con colores, unos dvd's de Disney, peluches, para Mikellino figuras de acción, par Soleil muñecas, para los dos (con pesar de Mike) posters y juguetes de Bakugan, todo iba bien.

Víctor y Mayo estaban más que juntos, pegados. Parecían una sombra del otro. Era el último día que se verian realmente juntos.Trolli por fin se acercó con sus regalos. Estaba demasiado nervioso. Les dió dos cajas grandes a cada uno.— Te veo más nervioso que las idas a dirección Trollinel - le dijo Mayo, aun pegado a Victor.

— Es que no se si les guste el regalo o no — dijo Trolli.

Los niños abrieron el regalo más rápido que los otros, y dentro encontraron tres cosas. La primera (muy para pesar de Mike que de verdad no le gustaba que sus hijos vieran ese anime), un kit con todos los bakugan hasta la fecha. Había dos peluches de lobo para cada uno, y al apretarlos, emitían un aullido. Los niños los abrazaban y los apretaban todo lo que podían. Les encantó. Trolli se relajó un poco.El último regalo era un auto electrico para cada uno. Los niños al probarlos les fascinó. Trolli pensaba dejarselos y Mike ya tenía pensado recogerlos en el primer momento.

Amor fuerte... ¿¡Qué estás qué!? (Spartor) [Wattys2019]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora