Paraphilias (PJM & TN) [+18]

Amomaxia

LEMON

Desperté envuelta en mis sábanas, sintiendo mi piel desnuda siendo reconfortada por esta misma. Mire a mis alrededores sin encontrar rastro alguno de Park, me levanté de la cama, aún cubierta con dicha tela de seda. Mire mi mesita de noche que estaba aún lado de mi cama, y en este había un trozo de papel con algo escrito.

"Señorita Jang, le agradezco la confianza que tuvo para entregarse a mí y contar de su vida privada; lamento no haberme podido quedar, no la desperté por qué se veía hermosa dormida.

-Park Jimin."

Me preguntaba cual sería la siguiente parafilia por cumplir, estaba nerviosa y extrañamente ansiosa. Había olvidado este sentimiento llamado deseo. Deje caer la sábana, ahora mi cuerpo estaba siendo cubierto por el aire frío de aquella mañana. Sin perder tiempo, me aliste para ir a mi consultorio, dónde se encontraba una Rose ansiosa por saber cada detalle de mi tarde con Park.

Park Jimin.

Eran las seis de la mañana cuando sonó la alarma programada en mi móvil, por suerte la señorita Jang no se despertó. Estaba recostada sobre mi pecho, podía aspirar su aroma a frutos rojos, me encantaba. Me levanté de la cama con cuidado, no quería interrumpir su sueño. Me vestí rápidamente, sin embargo me quedé un par de minutos observando como dormía, su respiración pausada, tranquila y desnuda, ella entraba en lo que cabía en la palabra "perfección". Sacudí mi cabeza, esto que estábamos haciendo es sin sentimientos, trate de alejar aquel pensamiento, pues no había nada más allá que una simple terapia.

Cogí un trozo de papel, dónde le dejé un pequeño mensaje. Antes de salir de su habitación, contemple su belleza que jamás será mía, acaricie su rostro y salí de ahí.

Me dirigí en el departamento donde me estaba alojando, dispuesto a bañarme y alistarme para ir a ver a mi amigo que se encontraba en prisión. Al llegar dicho lugar, me encontré con mi mejor amigo.

-Jimin-saludó a través de aquellos teléfonos para comunicarnos mientras me miraba a los ojos.

-Hyung ¿Cómo has estado?- respondí.

-sigue siendo una mierda aquí adentro, mejor háblame de ti ¿Cómo vas con tus terapias? ¿Has conseguido acostarte con tu psicóloga?-pregunto levantando las cejas. Logrando hacerme reír.

-ha pasado, la noche anterior-respondí como si hablar de sexo fuera de lo más normal en la cárcel, que así era.

-ese es el Park Jimin que conozco, sin busca de relaciones románticas, solo sexo, no puedo creer que querías pedirle matrimonio a Wendy-bufo, me lleve el amargo recuerdo de como había terminado conmigo, capte la atención de mi amigo-lo siento...

-no importa-sonreí.

-a decir verdad, se lo que se siente, la mujer que amo me metió aquí, pero a diferencia de ti, es que tú puedes recuperar a Wendy después de la "terapia", y yo no...

-tal vez si puedas recuperar a tu prometida, si ambos también van a terapia, es obvio que ella está loca, invento todo eso del maltrato y violencia. Pero tal vez podemos hacer que ella cambié, haré lo que pueda para quitar la orden de restricción, así tú podrás estar cerca de ella.