Hogar de un gran aventurero
Aldea "Zona del río"; ubicada detrás de una gran cascada, es como un útil camuflaje para mantener al poblado escondido. Por ello, se tiene la estricta regla que solamente los más capaces tienen permitido salir para abastecerse de comida y materiales para el mantenimiento de las estructuras, pues si se comete el más mínimo error al ser vistos por una giganta, la seguridad del pueblo se verá mermada. Es complicado llevar este estilo de vida aunque la gente ya está acostumbrada. A pesar de todo, los habitantes en "Zona del Río" tienen días bastante pacíficos, más que nada, por su conveniente ubicación beneficiosa para su integridad; ya que nunca han tenido la desdicha de recibir una visita no deseada.
El lugar está construido de una manera bastante curiosa. Ya que el suelo es un enorme lago que abarca la mayor parte de la superficie, los encargados de construir se dieron a la tarea de aprovechar los gigantescos árboles -de unos 80 metros de altura- que se encuentran alrededor del espacio acuífero, para colocar las viviendas en las alturas e interconectar todo con un sistema de puentes hechos a base de ramas, lianas y madera. Muchos de los hogares fueron puestos dentro de los troncos y sobre las ramas, cada una con diseños distintos pero con estilos rústicos que van muy bien con el ambiente selvático. Los más ancianos cuentan que esta fue una labor titánica de ya hace muchos años y los más curiosos aún no descifran cómo fue posible lograr algo así con un grupo de diminutas personas, debido a lo peligroso que pudo haber sido, además de tomar en cuenta las escasas herramientas existentes para este tipo de trabajo.
Un aventurero rebelde
No todo puede ser perfecto y es que cada comunidad tiene su oveja negra, sin excepción. Zona del Río no se salva de la regla, debido a una peculiar familia, quienes viven al borde de la copa de un árbol; el padre llamado Restoro, la madre Peca, el hermano menor Kane y el mayor Jarco -de este último es de quien hablaremos-. Son conocidos por ser los más problemáticos del lugar, más concretamente, por culpa de Jarco; todo el mundo lo tiene bien identificado como el de ideas raras, el rebelde o el chico mala influencia. ¿Cómo no lo pensarían? Hace cosas que son inusuales para las costumbres llevadas a cabo e, inclusive, ha declarado argumentos en contra de las creencias que todos siguen; uno de ellas refiriéndose si entre todas las personas pequeñas existen malos y buenos, ¿Por qué no se aplicaría la misma regla para las gigantes?. Suena lógico pensar en ello, hasta darse cuenta que nunca se ha sabido de una de ellas comportándose pacíficamente con alguna criatura. Por ello, al final lo tachan de desquiciado. A Jarco no le importa lo que piensen, él busca todos los días la manera de demostrar que está en lo correcto, y ahí su segundo gran problema; rompe una de las reglas más importantes, aquella donde recalca no salir a menos que seas parte del equipo de exploración. Se autodenomina el mejor explorador debido a la diferencia de los exploradores tradicionales y él; se ha atrevido a adentrarse en zonas muy alejadas, de carácter desconcido. pues casi nadie se ha atrevido a poner un pie en ellas y los pocos valientes no han logrado abarcar la zona como Jarco. Sus viajes han llegado a durar meses, siendo su familia quienes sufren más de su ausencia. Todas sus aventuras se las cuenta a su hermanito Kane, quien debido a su corta edad de 10 años, se maravilla con cada cosa que le cuenta pues su imaginación le ayuda a visualizar cada planta desconocida, animales extravagantes, los hermosos ecosistemas de la vasta selva y los distintos peligros enfrentados por su hermano a quien considera un modelo a seguir. La historia que más le ha encantado, es aquella en donde obtuvo una extraña piedra blanca -parecida al cuarzo- proveniente de una oscura cueva ubicada en la zona "Anday" (la más peligrosa de todo el lugar). La peculiar características de ésta es el brillo que emana en ocasiones, es el accesorio favorito de los dos hermanos por las desconocidas sorpresas que puede ofrecer. Sorprende darse cuenta de todo lo vivido por Jarco, pese a su temprana edad de 26 años, todo un joven veterano en las hazañas aventureras. Seguramente ni siquiera él mismo se ha dado cuenta sobre sus logros, porque jamás se nota satisfecho con cada aventura; la siguiente siempre será más extrema y riesgosa a la anterior. Cabe decir que la relación entre él y Kane es estupenda, son el ejemplo perfecto de una hermandad sin precedentes. Poseen un lazo único y se tienen mucha confianza; esto se puede notar bastante por el apoyo desmesurado de Kane hacia su hermano en cualquier situación. Debido a aquello, Jarco se mete en problemas con sus padres muy seguido, pues son ellos quienes reciben las múltiples quejas que ocasiona con las reglas que rompe. Es cierto, lo aman mucho, el cariño es recíproco para los dos y, si surgen peleas, no es para molestarlo, sino dan su mejor esfuerzo para que sea un buen muchacho y un ejemplo a seguir para Kane. Aunque eso sí, no habrá fuerza sobrehumana en el mundo para detener las aventuras de este muchacho; aún si ésto implica desobedecerlos. De todos modos, aprecia mucho los buenos padres que tiene, no los cambiaría por nada en el mundo.
Entre muchos de sus viajes, un hombre de edad avanzada le contó una leyenda bastante interesante. Se trata sobre la giganta que vive en el tronco de un árbol, la única de buen corazón. Se mostró fascinado con aquel relato, pues al fin tenía la esperanza de conocer a una de ellas que no lo tratara de matar y por fin demostrarles a todos que estaba en lo cierto. No tardó mucho para correr e ir a contarle a su hermanito de lo que se iba a tratar su siguiente viaje: encontrar aquella mujer y tener la oportunidad de presentársela a todos para así demostrar que su teoría era correcta. De igual manera Kane se mostró muy entusiasmado, incluso le pidió a Jarco una promesa, muy importante o por lo menos lo es para la mente de un niño; si lo lograba, él sería el primero en conocerla. Una sonrisa esperanzadora se plasmó en el rostro de Jarco y respondió afirmativamente, dejando en claro que la cumplirá cueste lo que cueste. Sus padres escucharon todo, no cabe de más decir acerca de su sentimiento de preocupación, los inundó por completo. Trataron de hablar con él pero se mostraba escéptico. Tras una larga discusión entre gritos y lágrimas, Peca y Restoro entendieron que no importa cuánto se esfuercen, su hijo Jarco está decidido a hacerlo. No tuvieron más remedio que darle una muestra de su afecto paternal y dejarle en claro que tenga cuidado, pues ser precavido era su prioridad ya que no era buena idea acercarse a cualquier giganta pensando que se trata la que se describe en la leyenda. Sin más, un día, al salir el sol, Jarco partió en su nueva aventura. Kane lo observó desde la ventana de su habitación como desaparecía entre las hojas de los árboles, y en cuanto ya no lo podía ver, se escuchó un fuerte grito aventurero con fuerza. Sabía que lo lograría. Tiene tanta admiración por Jarco que "cuando sea grande" -dice Kane- "conoceré el mundo como tú".
Sin tener la certeza sobre la veracidad de aquella leyenda, estará decidido a comprobar la existencia de esta mujer con sus propios ojos, así deba apostar su propia vida. Va en camino hacia lo desconocido.
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Alas blancas sobre tinieblas
AventuraSeres extraordinariamente grandes y otros sumamente pequeños. Es una selva de constante luchas por sobrevivir, si bien, la mayoría de especies pueden coexistir sin ningún problema; hay una en particular quien se encarga de perturbar la paz de todos...