Bruscos y sonoros gemidos ademas de jadeos sonaban en una casa en medio del viñedo, donde mafiosos con dudosa sexualidad debido a sus extravagantes ropas y sus comportamientos poco varolines.

—Ahh~ Mi-Mista... Mas!... Mas!.- Pedia la hija del jefe, quien sentia todo el placer y el extasis en su cuerpo.

—Y-Ya... Ya te dare mas... Mucho mas...- Respondia el morenito a la vez que le daba duras estocadas a la pelirosa.

A la vez abajo, el mayor por ahora servia pasta para el resto de passione, que no podian evitar oir aquellos ruidos cochinos y no por que querian, sino por que no podian ir a otro lado.

—Ya llegue.- Bruno, quien traia el pan, lo dejaba enmedio de la mesa a la vez que se sentaba en una punta —¿Como estan?.- Parecia sarcastico, pero de verdad le gustaba saber como estaban sus compañeros.

—Contando con el echo de que Mista y Trish no han dejado de cojer desde que llegamos, esta bien, digo no me molesta para nada saber a que posicion van a cambiar cada 40 minutos.- El queso rayado caia en la pasta que iba a comer Fugo, quien hablaba sarcastico —Pero claro, Giorno hizo ravioles, al menos eso mejora la cosa.-.

—Mmm ¿no han dejado de tener relaciones? Hace dos dias llegamos, es extraño.- Quien se sento en la punta fue Bruno, el cual analizaba un poco la situacion.

—¿Cuanto... Falta para el... Cambio?.- La chica no dejaba de moverme debido a los impactos implicados.

—Y-Ya... Falta poco... Tranquila... Las haremos todas.- La determinacion lo apañaba ademas de que una sonrisa fanfarrona posaba en su rostro.

—Si, o ambos son ninfomanos en potencia o mista tiene unas bolas bien cargadas.- La ironia de Abbaccio era notable, pero no para todos.

—¿No creen que sea un ataque de algun Stand?.- El inocente Narancia pregunto, eso hizo que el gotico arqueara una ceja.

—Narancia, no seas tan inocente, el efecto de un ataque no seria algo tan bobo como el hacer que tengan sexo todo el dia.- Apuntaba al nombrado con un raviol pinchado en el tenedor, del cual salsa caia.

—¿Tengan sexo? ¿No que estaban entrnando sus stands?.- Ahora miraba a todos, ya lo entendian, Narancia su era muy inocente.

—¿De donde sacaste tal estupidez?.- A Leone eso si le parecia mas sorprendente que los conejos que eran su compañero y la carga/hija del jefe.

—Mph!.- Pannacotta tosio leve llamando la atengion del grupo.

—¿Sabes? Lo... He pensado y... ¿No crees que... Molestamos... A los demas... Con nuestra... Calentura?.- De vez en cuando el belludo apretaba sus dientes debido a la fuerza que aplicaba en ella.

—¿Piensas... En los demas... Cuando... Podrias darme mas.. Duro?.- La mija del jefazo le daba una mala mirada debido a lo que pensaba y preguntaba el.

—Ci-Cierto... Pero mu-mueve el pie... Un poco n-no soy de esos que... Tiene gustos... Extraños.- Siguiendo la orden del mayor, ya estaban comodos por la posicion.

—Oh, si bueno, es casi lo mismo... Pero... Olvida lo que dije.- Uno de los mayores decidio dejar de hablar y seguir comiendo —Por cierto Giorno, Son un asco tus ravioles.- Eso hizo que el rubio frunciera el seño —Y Narancia, ¿que crees que estan haciendo?.- Ya sea por diversion o por informarse, queria saber que falacias le contaba su amigo para que se mantenga tranquilo.

—Segun lo que me dijo Fugo... Ellos estan... Practicando con sus Stands.- Veia de vez en cuando a uno de los mayores, debido a que se concentraba en no fallar los pinchazos.

Jojo's Bizarre StoriesWhere stories live. Discover now