Capítulo 11: "Retomando una amistad: Un nuevo viaje"

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Un jovencito de cabello alborotado miraba tiernamente a su bella amiga mientras le colocaba una bolsa de hielo en su tobillo, al tiempo que decía: Pronto te sentirás mejor, por suerte la señora Uranai tenía pastillitas para el dolor e inflamación, con ello curarás más rápido Milk.

¡Gracias¡ dijo Milk.

No agradezcas, somos ¿amigos no?, dijo Gokú con una ligera sonrisa en su rostro.

Así es somos amigos, los mejores amigos, respondió Milk con dulzura.

Milk, creo que, aunque la inflación haya cedido un poco, sería bueno que te tomes un par de días de descanso, dijo Gokú.

No puedo Gokú, si hago eso el señor Bills se molestará y capaz hasta me vuelve a poner de telonera, respondió Milk con cierta nostalgia en su voz.

No, no lo creo, yo hablare con él, además le pediré a la señora Uranai que me acompañe, ella me dijo que lo mejor es que descanses unos días para que te cures por completo, decía Gokú.

Ojalá y el señor Bills, no se enfade, acoto Milk.

No lo hará, eres una de sus mejores artistas, él debe querer que estés en óptimas condiciones para que des un buen espectáculo, añadió Gokú.

La pelinegra no respondió nada, solo guardo silencio mientras su apuesto amigo seguía hablando.

Voy a vendarte y te ayudare a llegar a tú habitación para que descanses, luego voy con el señor Bills, dijo Gokú.

Bien, gracias, respondió Milk.

En tanto:

Una rubia de cabello corto se encontraba con una rubia de cabello ondulado cerca de la habitación rodante del joven de cabello alborotado.

¿Y no encontraste a algún chico que nos ayude con Milk?, dijo con ironía Dieciocho, mirando a la rubia de cabello ondulado.

No, no encontré a nadie, yo iba ir a decírtelo, pero justo el señor Bills me llamo para que lo apoyara en algo, y ya sabes cómo es él si te niegas a apoyarlo, ¿creerás que hasta ahora me desocupo?, pero imagino que tú te las ingeniaste para ayudar a Milk, ¿no?, respondió Lunch con cierto sarcasmo en su voz.

Por suerte apareció alguien para ayudarnos, pero dime, ¿qué haces por aquí?, que yo sepa por aquí no está tú habitación rodante, dijo Dieciocho con ironía.

No, claro que no, vine a ver a Gokusito, respondió Lunch, al tiempo que la puerta de la habitación rodante del mencionado se abría y por está salía el joven de cabello alborotado con la pelinegra en sus brazos.

La rubia de cabello ondulado al ver la escena sintió arder su sangre, pero contuvo su rabia, mientras se acercaba a los pelinegros.

¡Gracias por ayudarla Gokusito¡ dijo Lunch mirando al joven de cabello alborotado, haciendo una pausa para decir, posando ahora su mirada en la pelinegra: ¿Cómo te sientes linda?.

Mejor, dijo Milk con calma.

La llevare a su habitación para descanse, dijo Gokú.

No podrá presentar su número mañana, ¿verdad?, acoto Lunch.

No, lo mejor es que se tome un descanso, al menos dos días de descanso, así dijo la señora Uranai, ya ven que ella tiene experiencia en curar nuestras lesiones, dijo Gokú con calma.

Cierto, es una pena, Milk había preparado un lindo espectáculo, pero ni modo linda, primero tú salud, dijo Lunch con una sonrisa fingida.

Sí, eso es cierto, primero tú salud pequeña, acoto Dieciocho.

"AMOR BAJO  LA CARPA"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora