04.05.19

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-¿A donde se supone que me llevas?- Digo con los ojos vendados.

Si, tenía los ojos vendados. Mi amiga me había sacado de mi casa porque tenía una sorpresa para mi. No sé qué sorpresa sería, ya que fue un camino un poco largo.

-¡Tranquila! Ya casi estamos llegando, eres muy impaciente- Dijo ella.

Pasaron 5 minutos, hasta que ella por fin habla.

-¡Ya puedes abrirlos!- Me grita.

Me quito la venda, y mientras se aclara mi vista, noto que estamos en el ¿Aeropuerto?.

-¡TAAAARAAAAN!- Dijo ella con sus brazos abiertos.

-¿Qué hacemos aquí?- Digo un poco sonriente.

-Mira detrás de ti- Dice ella.

Me doy la vuelta y ¡Oh por Dios!. No puedo creer que sea él.

-Eres tú...- Digo mientras lo miro con ojos cristalizados.

-Soy yo- Dijo sonriente.

No aguanté más y me le lancé arriba para abrazarlo.

-Te extrañé demasiado- Digo llorando. No sé si de tristeza o alegría.

-Yo más- Dijo obvio.

Junto sus labios con los míos. Había extrañado tanto sus besos.

Al cabo de unos minutos me bajo de él, y tomó su mano. Sus manos. Siempre encajando con la mía.

-Bien. Será mejor que les dé su espacio. Yo me iré en un taxi y ustedes en otro, ¿okay?- Dijo mi amiga.

Voy hacia ella y la abrazo fuerte.

-Gracias, de verdad- Digo soltando un suspiro.

-No importa, Cariño. Todo por verte feliz- Dijo ella. Enserio amo a esta chica.

Nos separamos, y al cabo  de unas horas me encontraba en un taxi, de camino a casa con el Amor de mi vida al lado.

Él está mirando por la ventanilla y yo no me canso de observarlo. Se gira y me sonríe. Tomó su cara entre mis manos y le doy un piquito.

-Te Amo- Digo encantada.

-Yo te amo muchísimo más- Responde él.

Relatos sobre él.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora