Viviendo en una fraternidad. DE SOLO HOMBRES!

capítulo 13 *

Lucas se había ido a por algo de beber, y yo estaba de chill aquí con sus amigos.

-Y cuéntanos Sam, ¿De dónde eres?-me dijo una chica con el pelo corto

-soy de California, pero me mudé aquí para estudiar y aquí sigo hasta que me echen de otra fraternidad

-¿Te echaron de una fraternidad?- dijo riendo Raúl

Les conté la historia, y no paraban de reírse y de insultar a mi prima, no les había caído bien, no me extraña

Después de cómo 1 hora esperando a Lucas para que me trajera algo de beber decidí hacerlo por mi cuenta.

-Bueno chicos, voy a por algo de beber , ¿alguien quiere algo?

-Que vaa, estamos servidos- dijo cella enseñándome sus vasos

-Bueno, pues ahora vuelvo-dije levantándome

-Espera, te acompaño- me dijo Raúl

Después de decirle 10 veces que no hacía falta me acompañó, este chico es muy raro, me intenta besar, le doy una patada en su zona sensible, y ahora quiere ser mi amigo

Llegamos a una barra donde había mucha gente.

-Dos calimochos genio - dijo Raúl al camarero

El chico nos les entrego y cuando íbamos a volver Raúl me agarró

-Ey, ¿quieres ver una cosa?-me preguntó él sonriendo

-La verdad es que no- dije yo, estos sitios hacen que no te fies de nada ni nadie y menos en él

-Venga que no te voy a hacer nada-dijo el riéndose.

Acepté más que nada por curiosidad, me hizo un gesto con la cabeza para que le siguiera, y llegamos a una pared del local donde había una puerta, antes no la había

-¿Y ahora qué?-dije yo haciéndome la impaciente por saber que había ahí, aunque ya lo sabia

-ansiosa - dijo él, abriendo la puerta donde de escuchaba mucho ruido, pasé delante de él, y vi a mucha gente gritando y apostando, otras personas peleando, wtf donde coño estaba, esto no era tan así

-¿Qué es esto?-dije yo haciéndome la loca

-peleas callejeras obviamente- dijo riéndose, me agarró la mano y me llevo hacia una de esas peleas. Había dos chicos peleándose, pero no veía muy bien quienes eran porque soy miope je.

-ahora vuelvo, quédate aquí-dijo él.

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Había pasado ya 20 minutos y me aburría de ver a esos dos pelear, asi que fui a otra.

Aquí había una ronda grande de chicas y chicos. Y en el centro dos chicos, llevaban la cara tapada con un pasamontañas, nose porque, pero el torso le llevaban al descubierto.

-Que buenos son- comentó alguien detrás mío

Me giré y estaba cella

- oye, ¿Porque llevan pasamontañas?- pregunté

-para si viene la pasma no les reconozcan, casi todos estos chicos ya han estado en la cárcel más de una vez, y no se la pueden jugar

Volví a mirar a los dos chicos, uno era más alto que el otro, y estaba mejor físicamente, le estaba reventando literalmente, el chico alto estaba encima del otro, dándole de puñetazos, de un momento a otro se acercaron mucho a dónde estábamos nosotros y vi que tenía un tatuaje en la parte de atrás del hombro, en forma de un pájaro grande.

Me estaba empezando a agobiar, el chico más débil estaba sangrando un montón, y el chico se estaba cebando, estaba reventándole, de un momento a otro empezaron a sonar las sirenas de la poli, todo el mundo empezó a correr

El chico fuerte se habia ido corriendo y el otro estaba en el suelo.

-Vamos Sam- me dijo cella- corre, te llevamos

-no podemos dejar al chico aquí-dije mirando al chico desangrandose

-si que podemos, si nos pillan estamos jodidos-dijo ella insistiendo

-tú misma has dicho que si pillan a otro de estos chicos les meten en la cárcel, vamos a llevarle

-No, no le vamos a llevar- dijo un chaval por detrás, agarrando a cella y llevándosela

Mierda mierda mierda, ahora qué hago, me acerqué al chico, que se estaba intentando levantar.

-No se quién eres y no me importa, pero dame la mano y sube- le dije

Él me miró anonadado, estaba sangrando muchísimo, me extendió la mano y le agarre fuerte, y pasé su brazo por mis hombros

Pesaba mucho, pero pude empezar a andar, se oía a los policías entrar en la primera parte del bar, no sabía cómo irnos de aquí, porque la única salida era esa, o saltar una valla de alambre, que era por donde salir todo el mundo.

-¿Quién eres?-me dijo él analizándome

- Ahora no importa, no sé dónde ir-dije mirando a todos lados

-Dejame, y vete-dijo él

-No, si te he agarrado no te voy a dejar ahora lo siento, y encima tampoco podría hacerlo, se ha ido todo el mundo y soy pésima saltando vayas- le dije sonriendo a lo que él me respondió con una mueca.

Fuimos a una de las esquinas de la plaza donde estamos, y le senté en el suelo.

Empezé a pensar como salir de aquí, y me acordé de que en el bolso tenía una lima de uñas de hierro.

Cogí una piedra y di a la valla, haciendo que se balanceara, se rompió un poco, y con la lima empecé a rajar, haciendo un agujero pequeño pero suficiente para poder salir, GRACIAS INGENERÍA POR EXISTIR

Le levanté con cuidado y le pase por el agujero, oí portazos en la puerta de la sala, ya no quedaba casi nadie, cuando el consiguió pasar, pasé yo a la vez que entraban los policías, le agarré y empezamos a andar por los matorrales hasta llegar a un parque que estaba cerca de la fraternidad por suerte.

-¿Puedes llamar a alguien que te lleve a casa?-le pregunté

-Si creo, pero no tengo móvil, estaba en el garito

Cogí mi bolso y le di mi móvil, él llamó a un amigo llamado loro y dijo que en 10 minutos venia.

-¿Por qué me has ayudado? -me preguntó

-Ya te lo he dicho, no te iba a dejar ahí con lo mal que estabas, tienes la cara destrozada- dije sonriendo, hacia mucho que no le veía y él parecía no reconocerme

-Gracias maja- dijo él agarrándose la mejilla por donde estaba sangrando, se le iba a infectar

-¿Me dejas curártelo un poco?-dije yo mirándole

Él asintió

-No tengo un botiquín aquí, pero tengo colonia, algodoncillos y tiritas

Le agarré la cara, y con cuidado eché un poco de colonia en el algodón y se lo pasé por la cara, él cerró los ojos muy fuerte, y yo seguí a lo mío, cuando paré abrió los ojos y me miró fijamente como analizandome , tenía los ojos bonitos, de un azul apagado

-Te voy a poner una tirita, para que se te cierre antes, quítatela cuando quieras- dije enseñándole una tirita con dibujos de Bob esponja

Se la puse y estaba muy gracioso

-Gracias,¿Cómo te llamas?- me pregunto

Iba a responder pero un coche pitó

-Ruco corre tío vámonos- dijo su amigo

El chico salió corriendo y subió, y se despidió desde el coche con la mano

Que día más largo, y cuántos recuerdos

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CAPITULO EDITADO