Capítulo 23

1.7K 236 49
                                    

Sintió como los dientes de Taemin dejaron la piel de su cuello, pero sus labios quedaron sobre el lugar que había mordido, succionando suavemente antes de que sólo su lengua fuera la que se deslizara por la herida, quitando todos los rastros de sangre, y cuando se alejó un poco pudo ver sus ojos más rojos que antes, como si en lugar de ayudarlo todo eso lo hubiese envenenado todavía peor.

—Mu-Muérdeme.

La voz de Taemin fue baja y seductora al hacer aquella petición, mostrando su cuello a su alfa que dudó unos segundos, porque él acababa de decirle a su omega que no haría nada de eso, pero su lobo no estaba de acuerdo con que pensara tanto, tomando con fuerza a su pareja desde la parte posterior de su cabeza para mantenerlo en su lugar y hundir sus dientes en su cuello.

Las manos de Taemin estaban sobre los hombros de Min Ho, y se apretaron alrededor de la tela de su pijama y un gemido ahogado escapó de sus labios, e intentó mover su cabeza para darle más acceso a su cuello a su pareja, mientras su cuerpo se llenaba de miles de sensaciones que no podía decir de qué se trataba, incluso le parecía estar escuchando más fuerte el corazón del alfa.

—¡Mi-Min Ho...! —gritó-gimió.

Lo que menos había llegado a pensar era que una mordida de su alfa pudo haberlo hecho tener un orgasmo, pero acababa de suceder, porque no sólo se trataba de miles de imágenes llegando a su cabeza, desde Min Ho molestándolo cuando estaban en su antigua manada, o cuidándolo al sólo ser ellos dos, el nacimiento de sus hijos, la llegada a ese lugar y todo lo que tuvieron que pasar para mostrar que eran pareja.

Sino que a eso se habían incluido todas las sensaciones porque las manos de Min Ho sujetándolo parecían más cálidas, o su lengua pasando por el lugar de la mordida, así como también aquel sentimiento de vacío que llegaba a embargarlo, haciéndolo sollozar fuerte, mientras el alfa lo atrajo más a su pecho, porque él también podía sentir ese dolor de su omega.

Ese había sido el orgasmo más triste que Taemin sentía que había tenido, porque la sensación no permaneció en su cuerpo, realmente ni siquiera importó mientras se deshacía en llanto en los brazos de su pareja, sintiendo que el dolor cada vez se volvía más insoportable, y a su lobo aullar por éste, en un dúo con el de Min Ho, porque a los dos les dolía de la misma manera.

"Nu-Nuestro ca-cachorro, ma-maté a nuestro cachorro, Min Ho".

"No es cierto, no sabías de nuestro cachorro, y-y no fue tu culpa".

Min Ho acarició el cabello de su pareja, intentando retener sus propias lágrimas y si fuera posible, él hubiera absorbido todo el dolor de Taemin, porque le parecía tan injusto tener que pasar por eso y de nada servía arrepentirse de las cosas que hicieron, desear cambiar demasiadas cosas del pasado, como el haber hecho aquella prueba para demostrar que eran pareja, porque eso no les devolvería a su hijo del que no sabían de su existencia hasta ese momento.

Por un momento Min Ho hubiera querido que su omega no lo recordara, porque de esa manera parecía que éste no sufría, al menos no de la manera en que lo estaba sintiendo en ese instante mientras lloraba escondido en su pecho, y no estaba seguro de lo que sucedió, porque su enlace parecía haber regresado a la normalidad.

Min Ho se olvidó por todo lo que estaba pasando toda la manada, y se enfocó sólo en su pareja, sintiendo como si las fuerzas en su cuerpo hubieran regresado sólo porque debía de cuidar a su pareja, y su lobo estaba de acuerdo en eso, en darle toda su atención, porque se acomodó en la cama, manteniendo a Taemin junto a él, abrazándolo tan fuerte mientras intentaba tranquilizarlo, de convencerlo que nada había sido su culpa.

***

No estaba seguro de en qué momento de la noche Taemin había cambiado, pero cuando lo notó, él también lo hizo, cambió y se mantuvo al lado de su pareja, que a pesar de haberse quedado dormido parecía seguir sufriendo, haciendo que su lobo aullara de dolor.

DestinadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora