Gaia acomodo su bicicleta con su cadena y su candado en la entra de la enorme preparatoria, Eleonor High, una de las mejores preparatorias de todo Washington D.C. pero pocos la conocían ya que estaba en un pequeño pueblo a las afueras de la gran ciudad.
Era como una gran mansión con grandes jardines, y las habitaciones en lugar de tener camas y cosas por el estilo tenían lo que cualquier otro salón de clase, se decía que ese lugar perteneció a un señor muy rico hace varios siglos y que una de sus bisnietas lo convirtió en escuela pero no se hablaba mucho de eso.
Era el 10 de enero y el primer día de clases, Gaia esperaba que este semestre sus notas subieran de 8 y 7 a 9 como mínimo, en especial en biología, era la materia que peor se le daba, y no entendía muy bien el porqué, cada cosa que la maestra Rollmer le enseñaba la entendía perfectamente y la grababa en su mente pero al momento de hacer los exámenes siempre se bloqueaba y olvidaba todo, era una pesadilla, así que se esforzaría más, esa era una de sus metas, otra era que se metería al taller de cocina por las tardes y que empezaría a ir más seguido a la biblioteca, adoraba leer pero siempre se le olvidaba ir a la biblioteca por un buen libro para distraerse por estar hablando o saliendo con sus amigos.
Apenas termino de acomodar su bicicleta se hecho la mochila al hombro y se dirigió a la entrada de la escuela mientras buscaba con la mirada a su amiga Lilian. Sintió que unos brazos muy delgados la rodeaban abrazándola por la espalda y el ver las uñas de los dedos pintadas con diseños muy coloridos sonrió y se dio la vuelta para mirar a su amiga.
-¡Lili! Por fin te veo, creí que me habías dejado sola el primer día, te extrañe mucho sirenita. - la pelinegra abrazo con fuerza a su amiga mostrando una gran sonrisa.
-Yo también te extrañe mucho, las vacaciones fueron muy aburridas sin ti molestándome todo el día- respondió su amiga regresándole el abrazo con fuerza.
Lilian era una de las chicas más lindas de toda la escuela, tenía un cabello pelirrojo oscuro muy hermoso y unos ojos verdes llenos de vida y alegría, sin mencionar un cuerpo muy bien moldeado, al igual que Gaia gracias a las clases de gimnasia que compartieron por 8 años.
-No es mi culpa, yo no te podía acompañar a Canadá a visitar a tus abuelos - se excusó Gaia sonriendo divertida -, además, hablamos todos los días todo el tiempo, fue como si estuviéramos juntas.
-Ya lo sé, pero sabes que mi familia te adora en especial mis abuelos, por cierto, la abuela Corni te envía saludos y te envió un regalo de navidad y año nuevo, y dijo que espera que también cuente como regalo de cumpleaños- Gaia y Lilian se conocían desde los 5 años, sus madres eran grandes amigas desde ese entonces y las familias de ambas estaban encantadas una con la otra y las consideraban un miembro más de la familia.
-Tu abuela siempre tan amable, espero poder verla pronto, ¿y dónde está mi regalo?
-Te lo daré hasta tu cumpleaños, ordenes de la abuela.- dijo Lili riendo al ver a su amiga haciendo un puchero de decepción.
-Está bien, a fin de cuentas solo faltan unos días- sonrió mirando a su amiga y entonces escucho a unos profesores gritar desde la entrada.
-¡Todos los alumnos vallan al gimnasio por favor, para el discurso de bienvenida de este semestre dado por el director Alexander!
Las dos amigas suspiraron pesadamente y empezaron a caminar al interior de la escuela.
-Esto nos llevara una hora si el discurso es igual de largo que el del semestre pasado - respondía la pelirroja mientras pasaban al lado de los profesores y alumnos que había en los pasillos.
-Y eso sí solo dice el discurso, no olvides que también menciona a todo el personal de la escuela y todos los talleres y clubs que hay, incluyendo los grupos deportivos ¡Oh! Y no olvides los trofeos que la escuela ha ganado en los últimos treinta años... -Gaia suspiro de forma pesada y levanto su mirada para ver el techo de la escuela - Tal vez tengamos suerte y esta vez su discurso sea corto, algo así como: "gracias a los alumnos de nuevo ingreso por escogernos como su preparatoria y a los antiguos por quedarse con nosotros, tengan un buen semestre y diviértanse"... Aunque creo que eso sería pedir demasiado para alguien como él.
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Crónicas De La Guerra Eterna
Novela Juvenil¿Qué pasa si descubres que el sueño que has tenido cada noche desde que tienes memoria en realidad no es un sueño? ¿Y si en realidad es lo único cierto en tu vida? Para Gaia, la vida nunca había sido especialmente mala aunque tampoco buena, después...