¡Nunca Me Enamoraria De El!

Capitulo 17

Lleve a Hannah a su recamara de tanto llorar se quedo dormida.

Como se le ocurre venir y quererse llevar a Hannah cuando se le plazca.
Sentía como mi sangre hervía mi cuerpo sacaba vapor, aun estaba muy enojado, quería aventar todas las cosas pero eso haría despertar a Hannah.

Me puse una chamarra de piel negra, tome las llaves de mi moto, apenas abrí la puerta y Rebecca se encontraba apunto de tocar.

—¿Que haces aquí?.—Exclame molesto.

—Pero que humor.—Paso sus manos por mis hombros y se fue acercando a mi oreja.—Pero yo se lo que tu necesitas.—Mordió el lóbulo de mi oreja.

—Lo siento pero no me apetece Rebecca.—Quite sus manos.

—¡¿Que?!.. ¡de seguro te vas a ir con esa estupida!.

—Y eso a ti que más te da.—Acelere el paso y baje al estacionamiento.

Coloque el casco sobre mi cabeza, subí a la moto y acelere.

Iba a toda velocidad, pasando en zigzag todos aquellos vehículos que estaban a mi paso, podía sentir como se disparaba la adrenalina en mi cuerpo. El miedo y la exaltación producida por la conducción a gran velocidad y por la sensación a la perdida del control provoca que mi cuerpo reaccione combinando pensamientos e instintos de supervivencia y provocando el aumento de mi ritmo cardiaco, están genial que logra que por un momento me olvide de mis problemas.

Desde muy chiquitos  tanto mi madre, Hannah y yo, no le importamos ni en lo más mínimo  a mi padre, nos ha tratado  de lo peor  y nos ha hecho tanto daño, lo único que nos ha dejado en claro que lo más importante  para el es su empresa, el siempre ha sido un hombre muy avaro, egoísta y ambicioso. En mi corazón solo cabe rencor hacía mi padre.

[...]

—¿Donde estabas?.—Me deje caer sobre el sofá y recargue mi nuca sobre el respaldo.

—¿Que haces despierta Hannah?.

—Yo te pregunte primero.—Tomó asiento a un  lado de mi.

—Fui a dar una vuelta por ahí.—La mire.—No has respondido a mi pregunta.

—No puedo dormir, tengo miedo de que regrese.

—Todo va estar bien, nada te va a pasar si estas a mi lado.—Le afirme y le di un calido beso en la frente.

Tome una ducha rápido, enrolle una toalla en mi cintura, con otra seque mi cabello, mire mis nudillos estaban rojos con pequeñas raspaduras.

No medi mi fuerza al golpear aquellos tipos pero eso no me importaba, lo que importaba es que Hannah estuviera a salvo.

[....]

En el colegio

Apague la moto, tenía en la mira a Cynthia quien hablaba con su amiga de algo muy gracioso por lo que no paraba de reír. Observe cada uno de sus movimientos, esa curva de sus labios llenos de vida al sonreír  es tan hermosa, como pasaba sus manos por su cabello rojizo acomodandolo,  no puedo negar que Cynthia es una chica muy hermosa.

—Hola Bebe.— Me beso en los labios.

—Madison sabes perfectamente bien que no me gusta que me llames así.

—Esta bien,  pero quita esa cara arrugada.—Pensándolo muy bien Madison es el primer obstaculo y como a de lugar tengo que deshacerme de ella si quiero ganar la apuesta.