Park Ji Min y Kim Sun Hee se enamoraron sin saber de los terribles secretos que los rodeaban. Y cuando se revelen, destruirian aquel amor en un abrir y cerrar de ojos.
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Increíble y hermosa portada hecha por @taisa...
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La poca paciencia que tenía sunhee estaba a punto de perderse sentada en aquella silla. Buscaba en su mente una razón justificable por la cual su madre le pidió que viniera. Odiaba estar así, sin saber nada.
La puerta de la oficina de su padre se abrió para darle paso a una elegante y hermosa mujer. Jiwon se sentó frente a su hija, guardando un poco de silencio antes de darle la gran noticia.
- Madre –sunhee llamo su atención-. ¿Por qué pediste que viniera tan rápido?
- Disculpa por haber hecho que te saltaras esa clase. Pero hay algo importante que debo decirte.
- Dime la noticia –Su madre tramaba algo. La conocía-. Por favor.
- Vas a casarte con baekhyun –soltó sin más tomando desprevenida a la pobre sun hee-. Lo he pensado bien, ya ustedes tienen mucho tiempo de noviazgo. Es hora de que den el siguiente pas...
- ¿¡Estás loca madre!? –exclamó levantandose de golpe de la silla. Eso debía ser una broma-. No quiero casarme.
- Siéntate y escucha –demandó-. Ellos están problemas, están en la bancarrota sun hee. La están pasando muy mal.
- Eso no es cierto –volvió a sentarse-. Baek me dijo que están bien.
- Lo dijo para no preocuparte, esta misma noche habrá una gran fiesta en donde él te pedirá matrimonio.
- Madre yo... –quiso protestar
- Lo sé –tomó sus manos-. Sé que no fácil, yo y tu padre sabemos más que nadie lo difícil que será.
- ¿mi padre lo acepta? –inquirió con sorpresa. Él es su adoración.
- Si –soltó las manos de su hija y así poder caminar hacia ella-. Le costó demasiado –tomó entre sus manos el rostro de sunhee-. Te amo más que a mi propia vida sunhee, solo te pido que lo pienses –y le dio un beso en la frente para luego retirarse.
***
Era demasiado incómodo para ella estar entre tanta gente, la idea de casarse era una locura. No entendía como sus padres lo permitieron. Toda su vida los ha complacido, en ser la mejor de su clase, estudiar una carrera que a ella no le gusta e incluso en tener un novio que no ama, todo lo hizo por ellos. Pero casarse era algo que no iba a permitir.
Pasó desapercibida entre la gente y subió lo más rápido que pudo hacia su habitación. Abrió la ventana, no era la primera vez que se escapaba. Cambió su vestido por algo más cómodo y bajo con sumo cuidado sin ser notada. Ya estando fuera de esa gran casa partió camino lejos de ahí.
- Perdón mamá –miro atrás asegurándose que nadie la siguiera-. Pero no puedo hacerlo.
