Capítulo 7: Hiden and Seek (Parte 1)

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[Dimensión 7, donde Ray, Emma y Norman son pacientes de un hospital psiquiátrico]

Había despertado solo, algo que lo extrañaba y le hacía sentir intranquilo. Y todavía más, al encontrarse en medio de un pasillo, de lo que sería un hospital; Norman estaba confundido y con un mal presentimiento agolpándose en su pecho.

Se levantó y decidió buscar a sus amigos, además de ir explorando de paso. Cada habitación olía a medicinas, sino es que alcohol y desinfectante, además de que había camillas y bolsas de suero que no tenían uso alguno.

Como si aquel sitio no estuviese habitado, aunque extrañamente se veía en buen estado. Como si lo tomasen en cuenta, pero no lo ocupasen.

¿Por qué?

Conforme más avanzaba, lo que veía se tornaba más tétrico. Comenzaba a notar camillas con sábanas ensangrentadas al igual que las paredes; sitúelas hechas de sangre y lo que parecían arañazos a la pared hasta que, tal vez, las uñas se le cayesen por la fuerza aplicada.

También había marcas de golpes, tanto en las puertas, como en las habitaciones.

Su mal presentimiento aumentó, al hallar en una habitación algunas palabras, escritas con sangre. Tal vez de hace mucho tiempo, pues se notaba seca y no había cadáver alguno.

Se metió, acercándose a leer lo que había escrito ahí. Un gesto de terror era lo que se podía notar en su rostro.

"CUIDADO CON ELLOS, SON MÁS LISTOS DE LO QUE PIENSAS."

"¡No confíes en ellos, huye!"

"¡Sálvate!"

"¡AUXILIO! ¡AYUDA! ¡SÁQUENNOS DE AQUÍ!"

"HUYE, CORRE, SÁLVATE ANTES DE QUE SEA TARDE."

"¿Estos niños son demonios en la tierra?"

Retrocedió, lentamente, cubriéndose la boca con una mano, soportando las inmensas arcadas que lo comenzaba a aquejar. En eso, sintió como pisó vidrio, alertándolo.

Miró el vidrio que había pisado, aunque cubierto de este, se encontraba lo que parecía un diario. Lo agarró con cuidado, limpiándolo, comenzando a leerlo.

El diario contaba lo que era el día a día de uno de los empleados, el cual no decía nombre, pero incluso así lo intrigaba; no había nada anormal, hasta que hacía mención de tres pacientes en específico.

Y quiso seguir averiguando más, pero al hacerlo, notó que las otras páginas estaban arrancadas, a excepción de la última; en la última página, parecía que el empleado estaba asustado, y que había sido atrapado por aquellos tres pacientes en un descuido suyo, se despedía de sus seres queridos y abajo, parecía ser un mensaje para él.

"Hagas lo que hagas, no te acerques a ellos. Mantente oculto, y si puedes, escapa o mejor... Mátalos."

Dejó el diario, asentado en una de las mesas con objetos quirúrgicos. Y cuando estaba a punto de irse, escuchó el sonido de algo caerse junto a unos quejidos; volteó a ver al umbral, nervioso y alerta, aunque no había nadie.

- ¿Debería salir?

- ¿Hola! ¿Hay alguien ahí! – aquella voz, era Emma. Salió deprisa de la habitación, parándose en medio del pasillo, buscándola.

- ¡Emma! ¿Dónde estás!

- ¡Aquí enfrente! ¡Por favor ayúdame! –

Norman ignoró el presentimiento que tenía, y abrió la puerta. Efectivamente, Emma estaba ahí, sólo que cómo había tropezado, le había caído encima la mesa con los objetos quirúrgicos; afortunadamente, no se había lastimado.

Ella le sonrió, un tanto nerviosa. Norman le sonrió devuelta, comenzando a ayudarla. Emma se sentó, y le sonrió en agradecimiento.

- ¿Dónde estabas, Emma?

- Lo siento, es que estaba buscando algo. – se disculpó, sonriente. Se levantó y se acercó a Norman, sorprendiéndolo. – Hey Norman, ¿Jugamos a las escondidas?

Si tan sólo hubiese hecho caso a su mal presentimiento...

- ¿Jugar? Emma nosotros...

- ¡Por favor Norman!

Él dudó un momento, hasta que finalmente accedió. Emma sonrió emocionada, y con la misma emoción, le entregó un bisturí; Norman comprendió, que esa Emma no era la que él conocía, más bien, la Emma de esta dimensión.

- Yo me esconderé y cuando me encuentres, apuñálame con el bisturí, ¿Sí?

Norman estaba perturbado. Soltó el bisturí, y comenzó a retroceder. Emma lo miró por un momento triste, para luego tomar el bisturí y sonreír.

- Está bien... Tú te esconderás y yo te buscaré y te apuñalaré. Contaré hasta 20~. – rió, dándose la vuelta, tapándose los ojos, comenzando a contar.

Norman salió deprisa de la habitación, y comenzó a correr por los pasillos. Debía admitir que toda esa dimensión lo aterraba más que cuando querían huir de Grace Field; decidió hacer caso al consejo que había leído en ese diario.

Esconderse.

- ...17, 18, 19 y 20. – se destapó los ojos, a la vez que una sonrisa surcaba su rostro. Empuñó el bisturí. - ¡Listo o no ahí voy!

Al final, había terminado escondiéndose en un cuarto de conserje. Trataba de controlar su respiración y calmarse, pues si no lo hacía, terminaría perdiendo los estribos.

Ahorita lo prioritario era escapar de esa Emma, y después encontrar a sus amigos. La puerta se abrió, helándolo.

- Te encontré~.

-Traumada Taisho

Yo dije agarrénme, y nadie hizo caso :v 

Mioyoshida, yo me encargo de los tres capítulo siguientes xd, claro, sino te molesta... Ojalá les haya gustado~.

Viajando entre dimesiones [REN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora