Viajando entre dimesiones [REN]

Capítulo 16: Rescate (Parte 2)

Abrió sus ojos, con pereza, para luego abrirlos completamente al darse cuenta de su situación. Estaba atado de manos y pies, colgado de los pies en lo que vendría siendo la rama de un árbol. Aunque no estaba solo.

- ¿Primera vez? – preguntó el joven cazador, con una sonrisa divertida. Norman le correspondió de la misma forma.

- Mi primera vez secuestrado, sí. Aunque al parecer, no es la primera vez para ti.

- Con decirte que me han abducido y secuestrado una extraña secta, pues sí, no es la primera vez.

- ¿Sólo a ti te pasan estas cosas?

- Mayormente, pero no todo el tiempo... Creo.

Sentía pena por el Ray de esa dimensión, era como si su amigo se hubiese metido en el papel de una princesa en apuros. Aunque no podía decir nada, él también estaba ahí, como si de un animal se tratase; necesitaban salir de ahí, y ya.

- ¿Aunque sea sabes cómo salir de esto?

- Mmmm, no tengo idea. – respondió con simpleza, sonriendo. Norman lo miró escéptico.

- ¿Qué!

- ¿Verdad que te engañé? – chasqueó los dedos, al mismo tiempo que las ataduras de sus manos se caían. Comenzó a balancearse hacia adelante y atrás, logrando trepar a la rama del árbol al que estaban atados. Sacó la pequeña navaja que traía consigo, cortando la soga que sostenía a Norman, haciendo que cayese de boca. De paso, cortó la suya también, saltando y cayendo de pie al suelo.

- ¿Cómo hiciste todo eso? – preguntó Norman, dándose la vuelta, quedando acostado. Ray sonrió.

- Suelo llevar navajas por cualquier cosa.

- Aparte de pirómano, suicida.

- ¿Dijiste algo?

- Que muchas gracias. – mintió, con una sonrisa. Ray se agachó a cortarle las ataduras de las muñecas, y de paso la de sus pies.

- Bueno ahora...

- ¡Pum-Pum-Pumkin! ¡Canon-Pumkin!

- Ay no... - tomó de la muñeca al albino, comenzando a correr en dirección al bosque, evitando aquella explosión por parte de su amiga. Lo cual, estuvo relativamente cerca de matarlos.

- ¿Qué fue eso?

- Fue Anna... Supongo que Norman y su séquito también vendrán. – murmuró lo último, sabiendo la masacre que se avecinaba. – Hijo de la parca tenía que ser.

Comenzaba a compadecerse de sus agresores, había peores destinos que la muerte. Los gritos de horror no se hicieron esperar, además del olor a sangre y... ¿Acaso lo que voló había sido un ojo?

- ¡Norman! – llamó Emma, bajando de un saltó de su alterna junto a Ray. Emma se lanzó a sus brazos, provocando que ambos cayesen al suelo. Aunque luego al abrazo se unió Ray, pues Emma lo había jalado del brazo.

Los tres comenzaron a reír.

- Nos preocupaste mucho.

- Lo siento...

Y antes de que alguien dijese algo, fueron espectadores de como la loba se lanzaba a los brazos del joven cazador. De sólo imaginar el peso de la caída, les dolió, pobre Ray; aunque ni tanto, porque Emma estaba lamiendo su cara, al mismo tiempo que movía su cola y Ray no hacía más que reírse y acariciar su cabeza.

- No, estará bien. – pensó el trío al ver el ambiente ameno que los rodeaba.

- Espere, por favor no... - rogó uno de los secuestradores al hijo de la parca, quien mantenía su guadaña en alto, listo para el golpe final. Él sonrió de forma tétrica. – P-Piedad... ¡PIEDAD!

- Eso debiste pensarlo antes de secuestrar a mi amigo. – y con esas últimas palabras, lo degolló, provocando que se manchase de sangre tanto su rostro como su ropa. El cuerpo cayó al suelo, terminando por desangrarse.

Cislo saltaba encima de uno de los cadáveres, terminando por destriparlo, haciéndolo reír. Bárbara comía uno de los miembros extirpados de sus recientes víctimas, Zazie limpiaba sus cuchillas y los perros de Ayshe terminaban de zangolotear algunos cadáveres. Vincent limpiaba tranquilamente sus lentes, los cuales estaban cubiertos de algunas manchas de sangre.

Anna se acercó a Norman, limpiando una de sus mejillas con delicadeza, haciendo que este cerrase un ojo y sonriera levemente, haciéndola sonreír a su vez.

- Parece que todo terminó bien. – dictaminó Norman, dejándose limpiar por la rubia. Ella asintió, sonriendo. Ray apareció, seguido de la loba. – Ahí viene la doncella en apuros.

- Tsk, cállate parquita albina.

- ¿Dónde están los demás? – preguntó Anna, mirando a Ray y Emma.

- Se los llevó una puerta después de que los tres se reuniesen. – explicó Emma, ladeando las orejas, en un claro gesto de confusión. Anna sonrió aliviada.

- Sólo espero que ellos estén bien. – dijo Norman, con gesto serio. Ray lo miró con una sonrisa.

- Lo estarán, sabrán como arreglárselas.

Todos esperaban que las palabras de Ray fuesen ciertas.

-Traumada Taisho

Mira esas referencias de Soul Eater xd

¡Ojalá les haya gustado! Aunque fuese corto. Me divertí haciendo esto, que puedo decir~. Les dejo a su imaginación que especie eran Cislo, Bárbara, Vincent y Ayshe <3

Ahora la pregunta es, ¿A dónde los llevará esa puerta? Porque esta vez, no fue un vórtice...