¡Esta goukon es un error! ¡Modern AU!

9. Maldita casualidad

"¡Ah! Como añoraba la vuelta a la normalidad" sopesaste en alto mientras te ponías el uniforme.

No tardaste mucho en prepararte para ir al Instituto. El timbre sonó desviando así tu atención.

Era Reiner, que había decidido por su cuenta acompañarte durante el camino a clases.

Echaste un último vistazo comprobando que todo estaba en orden y cerraste la puerta de tu pequeño apartamento.

"Buenos días Rei" sonreíste como nunca, debido a tu desbordante buen humor.

"Vaya Nin-Nin veo que hoy no te has levantado con el pie izquierdo" dijo el rubio con una sonrisa ladina en los labios.

"¡Para variar! ¿verdad?" Una pequeña carcajada brotó de tus rosados labios.

Nunca habías sido una persona de mañanas y tus amigos lo sabían de sobra.

El gigante rubio te pasó el brazo por encima de los hombros y emprendísteis la marcha.

"Entonces... ¿qué tal en la goukon? No te habrás echado novio sin contarnos nada, ¿no? Tu buen humor es sospechoso" inquirió el muchacho.

"¿Cómo que sospechoso, acaso no puedo alegrarme de estar aquí contigo?"

Ante ésto, Reiner se ruborizó visiblemente, pero tú no te percataste de ello.

"¿Qué ha pasado para que te alegres tanto de estar de vuelta?" Insistió.

"Levi, eso es lo que ha pasado. Ya por historias era detestable, pero en persona es aún más irritante"

Reiner te observó con atención esperando a que prosiguieras con tu historia.

"Y a-aún encima me robó mi primer beso..." dijiste en bajito, apartando la mirada.

"¡¿ Que qué?!" Vociferó el muchacho perplejo mientras te zarandeaba.

El resto del camino resultó ser un interrogatorio de lo más concienzudo.
Reiner no había dejado piedra sin remover y pronto se enterarían los demás...

Y así fue como en el recreo, debido al buen tiempo, salísteis a comer al jardín.

Os sentásteis los cuatro en círculo y Reiner comenzó con la historia, parando ocasionalmente por la intervención de Annie, que añadía más información al relato.

Annie, que no sabía lo del beso, parecía muy enfadada por no haber acudido a ella en busca de consejo.

"Bueno, ya no tendré que verle nunca más, asique está bien. No importa ya que mi primer beso contará con la persona que yo quiera" dijiste satisfecha, llevándote un rollito de huevo a la boca.

"¿De dónde has sacado esa frase tan rebuscada?" Rió Reiner ante tu repentino positivismo.

Te sonrojaste como por arte de magia y comenzaron a meterse contigo.

"¿Y Ral lo sabe?" Preguntó Annie pensativa .

"La verdad es que no. Y prefiero que siga siendo así, no quiero preocuparla innecesariamente o que mal entienda lo que ha pasado... Además, habíamos bebido..." Intentaste justificarte.

"Sabes lo que dicen ¿no? Los que se pelean se desean..." añadió Bert, dejándote perpleja.

Te abalanzaste sobre él y comenzaste a hacerle cosquillas, pronto el resto del grupo se unió a la batalla.

"¿Por qué no vamos a las recreativas? ¡Hay una nueva figura que me muero por conseguir!" Bramaste emocionada incorporándote, quedando así sentada entre las piernas de Bertolt.