Historia de terror

FREDDY KRUEGER..

La historia enfermiza de Freddy Kruger comienza antes de su nacimiento. Su Madre, Amanda Krueger era una monja que trabajaba en un manicomio. Un día, encerrada accidentalmente en el ala de los enfermos mentales, fue violada por más de 50 hombres.

Y por supuesto, un niño generado con tanta violencia no podría desarrollarse normalmente. En la infancia, Freddy le gustaba torturar y matar animales domésticos [característico de asesinos en serie].

Su Madre, siendo expulsada de la hermandad religiosa que integraba, terminó con varios hombres en el intento de criar a Fred. Los sucesivos padrastros ayudaron a formar la personalidad enferma del chico, violentos y alcohólicos, que se dedicaban a maltratar a madre e hijo.

Freddy se casó, e incluso tuvo una hija que huyó de casa cuando mató a su esposa después de una pelea. El crimen nunca llegó a repercutir y Freddy Krueger consiguió trabajo en una fábrica en las afueras de la ciudad de Springwood. Allí, entre calderas y llamas, sus instintos asesinos se iban desarrollando . Decidió construir un guante con navajas en las yemas de los dedos para poder "divertirse" con los niños de la ciudad.

"Me encantaba la sensación de poder causar dolor".

Un día, se puso un suéter rojo y verde y se fue a la puerta de una escuela. Freddy vio a una niña solitaria esperando la llegada de sus padres. Vio, reflejado por la luz solar, la pequeña lonchera de la niña y notó que había una palabra escrita en ella: Amy, su primera víctima.

Freddy se identificó como "tío Freddy" y la llevó a la fábrica, donde Amy fue torturada y asesinada, teniendo el pecho desgarrado por la mano de navaja, avivaba su sed de sangre, que comenzó a matar más y más niños, llevando - las a su casa, que se quedaba en el número 1.428 de la calle Elm. La cantidad de desapariciones de niños generó una intensa investigación cuando se descubrió que Freddy era el culpable.

Para que todos supieran que sus niños estaban muertos, Freddy dejó pistas que a al teniente Thompson a encontrar los cuerpos de los niños ya en estado de putrefacción. Freddy fue arrestado y la gente de la ciudad ahora sabía quién era el responsable de la matanza.

Pero los abogados de defensa de Freddy encontraron errores en el procedimiento de arresto del asesino, lo que resultó en su liberación durante el juicio. Enojados por la libertad del asesino, un grupo de padres, liderados por el policía Thompson, fueron a la casa de Freddy una noche, tiraron gasolina sobre el asesino y miraron mientras él agonizaba quemándole vivo. Al final, sus huesos fueron enterrados en un viejo depósito de chatarra.

Antes de morir, Freddy había hecho un pacto con los demonios del sueño para hacerlo inmortal. Así es como obtuvo el poder sobrenatural de vengarse de sus asesinos, apareciendo en los sueños de sus hijos.

Cuando mueren en las pesadillas, mueren también en la vida real.

Freddy siempre aparece en los sueños con la ropa que llevaba cuando murió, es decir: un viejo suéter con rayas rojas y verdes y un sombrero marrón arrugado. Además, por supuesto, del guante de navajas.

En las primeras películas de la serie, Freddy Krueger prácticamente ablandó su sed de venganza matando tanto a los hijos de los culpables como sus propios asesinos. En sus pesadillas, los jóvenes solían visitar escenarios horrendos, como casas embrujadas llenas de cadáveres y los pasillos oscuros de la vieja refinería donde freddy trabajaba. Aún en las pesadillas, aparecían los fantasmas de los niños muertos por el asesino cuando aún era humano.