ShinKami Week 2019

Día 1: SQUADvsSQUAD

Son rápidos.

Llega un punto en el que Hitoshi no puede respirar, comienza a ver borroso, y el corazón recibe ciertas punzadas dolorosas, su brazo izquierdo sangra y la herida expuesta duele demasiado.

No debería estar corriendo. Hace minutos recibió la orden de detenerse y esperar refuerzos.

No puede hacerlo, lo ha visto, y sus recuerdos son lo suficientemente potentes para generarle más adrenalina y aplacar ligeramente el malestar.

"Shinso, estamos en camino ¡espera a tu equipo!"

La voz en el auricular suena furiosa, Midoriya no es de enojarse, sin embargo, entiende que él ha excedido su cuota de samaritano. Lo siguiente que escucha a través de éstos, son el sonido de las llantas deslizándose sin control, un poco más de agitación y la voz de Todoroki gritándole algo a Midoriya. Él no logra entender lo que dice porque a la distancia alcanza a ver una cabellera rubia con un rayo pintado, la ropa negra característica y finalmente una sonrisa torcida.

Es él. Denki Kaminari. Los reportes no fueron erróneos.

Entonces, de alguna forma logra acelerar el paso, y el aire vuelve a entrar con fuerza en sus pulmones quemando y rasgando su garganta.
Por un momento cree que no podrá llegar, el suelo parece desaparecer bajo sus pies, y siente como la sangre llena sus venas queriendo explotar.
Hasta que logra tocarlo, y ambos caen.

La lucha comienza en el instante que dejan de rodar por la mugrosa calle. Primero un puñetazo directo en la mejilla que logra desestabilizarlo, entonces, Hitoshi también da un puñetazo, los golpes llegan a todas partes del estómago, Kaminari logra devolver cada uno de ellos, hasta que da contra la herida sangrante del otro y tiene una ligera ventaja, le da unos cuantos puñetazos más en el rostro que difícilmente puede retener Shinso, uno en particular lo aturde lo suficiente para que Kaminari se levante e intente huir, sin embargo, antes de que pueda escapar Hitoshi lo hace caer de nuevo y esta vez es él quien tira un golpe, la nariz de Kaminari sangra y sus ojos se pierden por un segundo en el blanco, oye su quejido y luego su risa.
Kaminari acostumbra a reír cuando algo le duele.
Y Hitoshi lo ha escuchado reír cientos de veces en el pasado.

Finalmente Kaminari lo mira. Sus ojos siempre parecieron atrapar el sol y dejarlo brillar en ellos.
Ahora, no logra encontrar ningún destello.

-Justo en la nariz, Shinso. Felicidades -dice, y su voz suena ligeramente diferente a la que oye en sus recuerdos, pero en definitiva sigue siendo la misma.

La sangre sigue corriendo de su nariz, y Hitoshi tampoco ha dejado de sangrar.

Kaminari cierra los ojos, el dolor no lo deja enfocar bien, y respirar por la boca comienza ha ser difícil por la posición en la que están, Hitoshi lo tiene preso bajo su peso. Y lo que hace a continuación le saca un grito que podría haberse escuchado hasta cinco cuadras en adelante.

Ya no le sale sangre pero el dolor lo deja retorciéndose en el suelo cuando es liberado. Ahora su nariz ya no está torcida.

-¡Joder, Shinso!

-De nada.

Mientras el rubio se queda lloriqueando en el suelo y quejándose, él se permite recordar que Denki es el enemigo. Pero que alguna vez fue su amigo. Y quizás algo más.

Los recuerdos lo atacan demasiado rápido.

Ellos solo eran unos niños, pero había personas que los veían como un montón de arcilla fácilmente moldeable. Personas quienes lograron transformarlos en piezas valiosas. El único problema es que el proceso fue un infierno, y el uso que le dieron en un sucio juego -como simples peones- es enfermo y a la vez es lo único real que tienen en la actualidad.