Sentimientos Abstractos.

-53-

Sonreía contigo, lo hacia de verdad. Reía a carcajadas hasta que me doliera el estomago y sentía que me quedaba sin aire al escuchar tus muy tontas pendejadas que decías para animarme. Me dabas consejos y me enseñabas un poco de todo cuando hablabas; amor, matemáticas e incluso cosas como ¿Porque existimos? Recuerdo que alguna vez dijiste eso. O cuando hablas de un libro que planeas escribir, duramos más de 6 horas hablando de mitología y cosas así y si no me hubiera tenido que ir, sé que hubiéramos durado muchas más horas. Contigo no es incomodo los silencios o cuando hablo de mi vida. Creo que sucede lo mismo contigo. También recuerdo todas esas veces que colocas tu lista de reproducción en tu celular, y sin importa el clase de canción que sea: rock, pop, rap e incluso electrónica, ambos las cantábamos sin darle importancia a las partes que no sabíamos y fingimos cantarlas perfectamente. Sabia tus malas mañas. A veces era extraño cuando continuábamos la oración del otro. Estábamos completamente locos. Sabias cuando estaba mal, te preocupaban por mi y aún lo haces. También sé cuando estas mal y sé cuando quieres hablar de tus problemas o simplemente quieres ese silencio que dice más de mil palabras. También, cuando le poníamos el corazón a "photograp" de Ed Sheeran, era como si sintiéramos cada palabra, a pesar de que ambos sabemos que cantamos horrible. O cuando buscabas café hiriendo y traías de más para a veces darme. Hablábamos de cosas tan insignificantes que se volvieron cosas importantes para ambos. Era lindo verte hablar de un libro que habías leído últimamente, te concentrabas tanto que me llegaba a dar un poco de risa tanta concentración. Mientras que yo, al hablarte de cualquier cosas que me ha pasado, me vuelvo un ocho y cuento cosas que no tienen nada que ver o cuento cosas antes de tiempo y sabia que no entendías nada, pero al menos lo intentabas. O cuando hablábamos de nuestras conspiraciones del gobierno. No me olvido cuando lloraste de pequeño porque no querías ir a una piscina te digo a veces para molestarte, pero ya no te molesta. O cuando te llevaba la contraria para hacerte enojar, y sé que siempre conseguía hacerlo, y luego me reía por la cara de pocos amigos que ponías. También cuando te daba algún regalo, un pequeño detalle, que sin importar lo pequeño que fuese, te dejaba sin palabras y me gusta eso, me gusta que no sepas como reaccionar en esos momentos. De hecho, amo dar cosas por eso, amo las reacciones de las personas, hay veces que no dicen nada o se ponen nerviosas por el hecho de no saber reaccionar. Mi mamá siempre me dice ¿Para que das si nunca recibes nada? Y le digo No se, me gusta más dar, me gusta que las persona se sientan importantes y es gracioso sus reacciones, pero también es muy lindo.
También una vez, cuando creímos sentir algo más que solo amistad, ¿te acuerdas?. No salio bien, pero aprendimos muchas cosas, como por ejemplo no revolver los sentimientos. Tanta confianza tenemos, que, aunque suene asqueroso para algunas personas, y se que lo será, hacíamos competencia de eructos, soy una niña y aun así te ganaba inconscientemente. Y aun no entiendo como hace algunos días, cuando me contabas tus problemas dijiste "Se que he sido una mierda como mejor amigo"  y yo aún no entiendo como te paso eso por la cabeza. Sí, has olvidado mi cumpleaños pero mi papá también lo hizo una vez, no me molesta, se que es raro, pero hay veces que yo también quiero olvidarlo. Luego me dices que nunca me has regalado nada pero una vez me diste una carta, hace 5 años, creo y aun la tengo... Tu ortigfafia era horrible en esos momentos y aun conservo aquel dibujo de "la parca" que una vez dibujaste y te rogué para que me lo dieras, aparte olvidaste lo más importante ¿y todas esas sonrisas? ¿todos esos buenos momentos? ¿las veces que hablábamos sin parar? Nunca nadie antes me ha regalado tanto tiempo de su vida ni tantos buenos recuerdos, que eso son, recuerdos. Nunca los olvidare o se dañaran, siempre van a estar.