Losing Everything

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Ambos estaban en la habitación. Se encontraban acostados en la cama del castaño, el estaba conectado a una máquina que iba mediendo los latidos de su bebé. Su gestación era riesgosa, había que vigilar al pequeño ser todo el tiempo.

Mientras eso ocurría, Steve estaba en una siesta. Todo lo que estaba pasando lo dejaba sin energía.

Tony veía la televisión. La veía, pero no la observaba. Se quedó atrapado en sus pensamientos. En sus recuerdos.

Pasó la mano por su cuello, donde se encontraba la marca que le unía de por vida al rubio a su lado. Sonrió ante ese pensamiento y éstos se fueron hasta el momento en que esa marca quedó ahí.

"Eran las 22 horas y el ambiente en la habitación de Steve estaba caliente.

Los cuerpos se besaban ferozmente sobre un pequeño sofá en el lugar. El celo de Tony estaba comenzando y está vez no quería tomar supresores. Él lo quería todo. En realidad, quería todo de Steve.

Al sentir la incomodidad del sofá, Steve tomó en brazos a su omega y lo llevó con suavidad hasta la cama, donde lo acostó en medio sin separarse ni un milímetro de su cuerpo.

El juego de besos siguió por largos minutos hasta que se separaron por aire. Tony aprovechó esa oportunidad para comenzar a quitar sus prendas lo más rápido posible. Su cuerpo ardía y su entrada exigía ser llenada. Si bien ya lo habían hecho antes, nunca durante el celo del castaño por el miedo de un embarazo... Pero eso en este momento no importaba. Tony quería los cachorros de su alfa. Necesitaba sentirlo dentro.

Steve por su parte tampoco perdía el tiempo. Casi de forma bestial retiró sus ropas y ayudó a su pareja a sacarlas también. Sentía la urgencia de poseer aquel cuerpo sin importar las consecuencias.

El olor de su omega en período de celo era a frutillas y crema. Una combinación muy dulce que lo enloquecía y que en este instante estaba haciendo que pierda la cordura completamente.

Una vez que la ropa salió, Steve se abalanzó sobre el castaño para volver a devorarlo. Sin previo aviso, la encajó dos dedos en la entrada de su pareja y comenzó a moverlos desesperadamente.

-Ste... Steve!... Mmmmhhh... Sigue... Sigue... - intentaba hablar Tony, el placer le hacía perder el habla.

Un momento después, metió un tercer dedo haciendo retorcer de placer a Tony ya que con esos dedos estaba golpeando de forma rítmica su próstata logrando sacar gritos de pura excitación.
Después de unos minutos sintiendo el exquisito masaje, el castaño se vino entre los dos cuerpos, terminando con un jadeo gutural.

Steve no desaprovechó la oportunidad y se acomodó entre las piernas de su amante, para meter su miembro de forma lenta y controlada. Los ojos del ingeniero se abrieron más de lo que jamás pensó y se deshizo en jadeos y gemidos ante la sensación de llenado que estaba en su entrada. Estaba tan apretado que el rubio no pudo reprimir un sonoro jadeo que inundó la pequeña habitación.

Los movimientos comenzaron lentamente, un ritmo constante y de forma cadenciosa a los jadeos de su contraparte. Temía hacerle daño a lo más preciado que tenía.

- No... No piensas... Move... Uhhh... Mmm... Moverte más ra... Rápido? - preguntó Tony entre jadeos.

Eso fue un afrodisíaco para su mente y automáticamente comenzó a moverse con mayor velocidad... Ya no le importaba nada más que acabar dentro de él.
Los jadeos del castaño se intensificaron, casi pasando a ser gritos de placer al sentir el pene de Steve salir y entrar con fuerza.
Sentía como sonaba el choque de la pelvis del rubio contra su trasero. Dolía, pero el placer era mayor a las punzadas que comenzaba a sentir en su entrada.
El miembro de Steve era enorme, no sabía por qué lo llenaba más que antes si previamente ya lo habían hecho... Pero no en su celo.

Las embestidas eran rápidas y profundas. Rogers gemía guturalmente a medida que sentía su orgasmo venir. Sentía además tocar un punto que lograba estremecer a su pareja, había tocado la próstata nuevamente y el castaño gritaba de placer.

- Sí, ahí... eso .. . sigue así... Te amo Steve, te amo... te necesito... necesito ser tuyo... Márcame... ahora...

Steve perdió completamente el control, se lanzó al cuello de Tony y clavó sus dientes en la suave piel, provocando un fuerte jadeo en el menor y que su pene se corriera en una considerable cantidad de semen.

La imagen del castaño en pleno orgasmo fue el detonante para que se viniera de forma abundante en el interior de Tony y el nudo se formara. El ingeniero gimió levemente cuando lo sintió.

Permanecieron así varios minutos. Tony tocaba su marca recién hecha, sentía la sangre que aún salía en pequeñas gotas y las miraba en sus dedos. Steve, al ver esto y sin salir del interior de su amante, tomó la mano y se llevó los dedos a la boca para saborear la sangre.

- Estuvo increíble, Steve.
- ¿Estás bien? - preguntó preocupado.
- Sí, mejor que nunca. Aunque... - Tony se acomodó un poco dentro de lo que podía moverse - Mi trasero duele, pero es un dolor agradable.
- Perdóname, me descontrolé. Pero, en mi defensa, eres delicioso. - dijo el rubio, acariciando la cara de Tony. Sobresaltado paró sus caricias y miró a los ojos del otro asustado - Tony, mi amor, anudé dentro de ti y estás en tu celo... Puede que...
- No me importa, Steve... Además ya es tiempo de ser una familia.
- Tony, llevamos menos de un año juntos...
- ¿Bueno y? Es nuestra relación... A menos que tú no quieras tener una con el desastre de persona que soy - ante tal declaración, el olor de Tony cambió por uno de naranjas podridas. Steve notó el cambio y se reprendió mentalmente por haber hecho sentir mal a su castaño, aún estando anudado dentro de él.

Esperaron unos minutos en silencio, hasta que el nudo se desvaneció y el mayor pudo salir del cuerpo de su amante. Tony sin esperar palabra se puso de pie con dificultad y buscó algo para ponerse, para luego caminar hacia la puerta. Cuando Steve se dio cuenta de las intenciones del castaño, corrió hasta la puerta y lo tomó de la cintura para apresarlo en un abrazo.

-¿Dónde vas? No hemos terminado - dijo seductoramente en su oído.
- Voy a buscar algún medicamento para evitar la concepción. No tardaré. Espérame aquí, ya vuelvo - dijo intentando sonar sexy pero fallando en el intento.

Steve sabía que los omegas en celo eran más sensibles de lo normal, en todo aspecto.
Ahora le tocaba ver como Tony estaba dolido por la situación anterior, así que decidió hablar con sinceridad.

- A ver, mi amor, no vayas por nada. Yo sí quiero formar una familia contigo... Lo anhelo demasiado! - al oír eso, el castaño volteó para verlo de frente - Mi miedo es no ser el padre que esperas. Me costó tenerte a mi lado y...
- No seas mentiroso, Rogers. Yo me declaré primero - dijo el más bajo
- Sí, es verdad... Pero yo ya te quería desde mucho antes y que te declare sólo me ayudó. - tomó suavemente la barbilla del otro y se sinceró - Anthony, te he amado por mucho tiempo. El que quieras estar conmigo y formar una familia, me hace el hombre más feliz de la vida. Te amo.

Dicho eso Tony volvió a desprender el olor a frutillas con crema que tanto enloquecía al rubio y con pasó lento el castaño lo empujó hasta la cama, para subir sobre sus caderas y moverse sensualmente.

- Me calienta cuando eres así de tierno.

Al terminar, comenzó a comer la boca de su pareja de forma salvaje. Se venía otra ronda, más salvaje que la anterior... "

El recuerdo le hizo sonreír y mirar primero al capitán para luego poner una mano subre su abultado vientre.

- Definitivamente eres lo mejor que me ha pasado, Steve Rogers.

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Hola!! Ya, sé que demoré como el infierno... Pero pasé un breve bloqueo mental y bueno, aquí estamos. Se supone que era corto pero se me fue de las manos 😅😅
El lemmon/hard/sexo no es mi fuerte... Espero que haya sido de su agrado.
Sus comentarios son mi alegría! Siempre los respondo!!!
Gracias!!
Les ama Pinnilette!