¡ʏᴏ ɴᴏ sᴏʏ ᴇʟ ᴛʀᴀɪᴅᴏʀ!

[Capítulo 5]

« Dᴇsᴄᴀɴsᴀʀᴇ́ ᴇɴ ᴘᴀᴢ ᴇɴ ᴇʟ ᴍᴏᴍᴇɴᴛᴏ ᴇɴ ϙᴜᴇ ᴛᴇ ᴘɪᴅᴀ ᴘᴇʀᴅᴏ́ɴ »

 

All might

Siento como todo esto es una pesadilla, es la misma sensación del momento que perdí a mi maestra,es doloroso.

Me arrepiento de no aver apoyado a el joven Midoriya, deje que la presión de la gente controlara mis acciones, te arrebate aquél sueño que yo mismo te otorgue.

No importa cuanto lo piensen no puedo verte en el papel de traidor,símplemente irracional, hay pruebas que dictan lo contrario.Pero no puedo creer en esas cosas, para mi son como una película mal fabrica.

Quiero ir a buscarlo y pedirle perdón, que harías tu Nana. Todo esto es muy difícil para mi, cedí a la presión y no defendí al Joven Midoriya, solo fui un cobarde y no pude defender a al gente que es especial para mi.

Y ahora, no hay nada que yo pueda proteger y no hay nadie a quien aconsejar, el Joven Mirio ah decidido aceptar el One for All, hoy se le entregaré yo. Veo el fracaso en el cual el Joven Midoriya depósito cierta cantidad de sangre, diciendo que el cabello es fácil de perder.

Mirio consigo el Ofa, estaba apunto de irse, alejarse por esa puerta, dejando a Yagi con su impotencia, tenía que decirlo, tenía que hacerlo.

– Joven Togata, corrige mis errores y demuestra que el Joven Midoriya es inocente, yo no pude hacerlo...pero confío en ti, se que tu crees en el....por favor...

El chico por un momento expresó su sorpresa, pero el es Togata Mirio y el héroe que salvaría a un millón y entré ese millón tambien estará Midoriya incluido.

– ¡Claro que si All might, buenas tardes!

La puerta se cerró, con un All might cansado pero con la voluntad de seguir durando con vida hasta poder pedir perdón a su sucesor, a Izuku Midoriya, la persona que demostró lanzarse al peligro sin importar su situación.

Inko se encontraba sentada, viendo desde el comedor la televisión, con una mesa vacía, había estado así desde que su hijo se fue a vivir a los dormitorios pero esta vez era diferente, en esta vez su hijo no volvería los sábados para poder pasar rato con ella; charlar y reír como suelen hacerlo.

Seria mentira si dijera que no tenía miedo, su temor más fuerte, el de perder a su hijo, su bebé, el no era un traidor, el siempre soño con ser un héroe alguien que salvara a todos con una sonrisa.

Inko Midoriya no creerá ninguna de más palabras de las noticias, ni la de ningún héroe, ella conoce a su hijo y el no es una mala persona, su pequeño era su mayor tesoro.

Su héroe, el que le dio una sonrisa en el momento en el que se comenzó el papeleo de divorcio de su marido, aquel que cuando se enferma le ayudaba en los deberes de la casa, su hijo no es un traidor; y nunca lo será.