El Idiota de las Escaleras [Rubius y Tú]

Capitulo 11.

-I want to break free

I want to break free

I want to break free from your lies

You’re so self satisfied I don’t need you

I’ve got to break free

God knows, God knows I want to break free.

I’ve fallen in love

I’ve fallen in love for the first time

And this time I know it’s for real

I’ve fallen in love, yeah –Estaba de espaldas hacia donde supuestamente estaba Emma, así que hice un estúpido paso de baile y gire-

God knows, God knows!... –Grite, pero me detuve al notar que el comedor no solo se encontraba Emma, observe a los que se encontraban ahí- I’ve fallen in love... –Dije con un hilo de voz poniéndome colorada y mirando el piso, no podía creer lo que estaba pasando- ¿Q-Qué están haciendo acá? –Podía sentir como ardían mis mejillas-

Se hizo un silencio que después fue reemplazado por sonoras carcajadas provenientes de Mangel, Rubius y también mi rubia amiga.

-Sabia de esto, pero no pensé que también te gustaba hacerlo delante de otra gente –Rio Emma-

-No es gracioso ¡y ustedes! –Los señale- ¡No se rían! 

-¡Tendrías que dedicarte a esto Issa! –Rio Mangel-

-Tendríamos que haber traído la cámara Mangel –Exclamo Rubén-

-Al parecer todavía no se te va lo idiota, debe ser grave.

-Tienes mal humor apenas te levantas, al parecer.

-Vos me pones de mal humor –Le acuse-

-¿Ahora no se puede venir a ver como esta una amiga porque su compañera de piso es una gruñona?

No me había percatado de que se había levantado de su silla y estaba al otro extremo de la mesa mirándome fijamente esperando mi respuesta, yo estaba en la misma pose que él: al lado de la mesa con mis manos apoyada en esta, mi mirada estaba un poco más arriba ya que él me llevaba un poco más de una cabeza, Emma y Mangel estaban sentados mirando la escena pero esta vez se notaba la preocupación de ambos, con Rubén nos sacábamos chispas de los ojos.

-¡Yo no sería una ‘’gruñona’’ si no me pusieras de mal humor cada vez que vienes! –Hice comillas con mis manos en ‘gruñona’-

-¡Paren! –Emma grito y se levanto de la silla haciendo que esta haga ruido al deslizarse por el suelo- ¿Cada vez que estamos juntos los cuatro no podemos tener una velada feliz porque ustedes dos SIEMPRE están discutiendo? Piensen en cómo nos sentimos con Mangel al ver esto; Las primeras veces eran graciosas pero ¡basta! –Puse mi vista en Emma la cual también me miro y yo  con unos ojos de -Perdóname sabes que no lo vuelvo hacer si te molesta- Ahora –Saco su vista de la mía para mirar a Rubén- Pedí comida, así que ¿Podemos tener una noche tranquila? –Volvió su vista a mi- ¿Sí?

-Supongo que si…

-Está bien –Dijo Rubén sentándose-

La noche estuvo bien, nos la pasamos riendo, me gustaban las cosas tranquilas pero a la vez divertidas, me hacían acordar mucho a las noches que compartíamos en Argentina con mis amigas, luego de comer, nos sentamos todos en el sofá, les contamos algo de nuestra vida de Argentina y Emma sugirió que trajera la caja de fotos que trajimos, así que me pare y fui hasta mi pieza, abrí la parte de arriba de mi placard, ahí estaba la caja, solo que la muy perra estaba muy arriba para que la alcance, después de estar unos minutos deduciendo que hacer, se me ocurrió sacar un cajón de los más altos y meter mi pie en el hueco que quedaba y así poder subir, probé y… tampoco funcionaba, sabia quien podía ayudarme pero no me dignaba a perder mi orgullo así que intente e intente pero no podía conseguirlo, ya frustrada me dirigí otra vez al living, pero antes de que mis dos pies tocaran el suelo vi a un Rubén con su típica mirada graciosa.

-¿Qué? –Le dije incrédula-

-Vamos dilo, se que de todas maneras ibas a buscarme, Emma me dijo –Sonrió burlón- 

-Bien, entonces, si sabes, hacelo dale –Hice un ademan de manos dirigidas al placard-

-Quiero que lo digas

-No voy a decirlo, tengo mucho orgullo –Me cruce de brazos-

-Bueno, supongo que a Emma no le va a importar que le diga que su amiga me echo a rastras del cuarto –Me amenazo-

-Está bien, pero que conste que solo lo hago por Emma –Dije-

-Me basta –Levanto sus hombros-

-Bueno… -Revolee los ojos- ¿Podes alcanzarme esa caja que contiene todos mis recuerdos felices de Argentina?

-Por favor –Dijo mientras sonreía-

-¿Por favor? –Trate de sonreír pero solo me salió una mueca de ‘’ ¿enserio?’’-

-Como no, muyaya –Me paso por al lado sin sacarme la vista de encima-

-¿Y quién es ese? –Pregunto curioso Rubén sosteniendo una foto en la que se encontraba Emma abrazada a un chico, los cuales ambos sonreían felices-

-Mi asqueroso ex novio –Arrugo la nariz y yo solté una carcajada- Pásamela, creo que tengo que quemarla –Rubén se la paso y Emma con cara de horror se fue a la cocina-

-Siempre hace eso cuando encuentra algo relacionado a él –Yo seguía riendo- 

-Pero ¿Por qué tiah? ¿Qué ha pasao’? -Pregunto Mangel-

-Una larga historia, algún día se la vamos a contar.

Después de que Emma se diera cuenta que eran la 1 A.M y que teníamos universidad al día siguiente, Mangel y Rubius se fueron. Nos acostamos, claro, no sin antes de que Emma me diera el sermón de –Tienes que evitar esas peleas, odio los mal ratos-.

A la mañana siguiente me desperté como de costumbre, hice la rutina, bañarme, peinarme, un poco de maquillaje y vestirme con una musculosa con letras algo suelta, la chaqueta de mezclilla con un jean, mis Vans rojas, esta vez seque mi pelo y lo deje que caiga en ondas para ponerme una badana del mismo color que mis zapatillas (1), metí todo lo necesario en mi mochila y comí una tostada, esta vez me tocaba ir sola ya que Emma entraba más tarde.

El día paso normal, pero raro a la vez, no me cruce a Emma en todo el día porque teníamos horarios diferentes, además de que estuve toda la tarde encerrada en mi habitación haciendo tareas de la universidad, de mi mamá y mis amigas no sabia nada, no habían mandado ningún mensaje y yo tampoco, al único que pude ver fue a Lucas, ese chico era increíble, cada vez me sorprendía mas con sus anécdotas, era realmente genial y me caía muy bien.

En la universidad me informaron que el día siguiente comenzaría a trabajar y que debía estar presentable, antes de que pueda preocuparme, Nora –La secretaria de la universidad que me había recibido el primer día-  me dijo que no había ningún problema con mi vestimenta, solo que era una empresa seria y eso querían, por lo que me dijo que no me preocupara porque me darían todas las indicaciones al día siguiente…

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NUEVO CAP! BUENO PERDON POR NO SUBIR EL VIERNES, QUERIA CONTARLES DE QUE NO TENGO MUCHO TIEMPO PARA ESCRIBIR, EXPLICARLES DE QUE CUANDO NO SUBO SE DEVE A QUE NO TENGO CAPITULO. ASI QUE GRACIAS POR EL AGUANTE:)

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