❝POR SIEMPRE APOSTADO❞
Kim Jungwoo era conocido por ser el nuevo integrante del grupo fundado por Lee Taeyong años atrás en el instituto, y por el momento estaba posicionado en el segundo lugar de los más tranquilos, siendo Winwin el único que lo superaba. A veces sentía una fuerte falta de conexión con los otros cuatro, ya que eran demasiado cercanos, y no quería entrometerse en sus conversaciones. Por ello, casi nadie estaba al tanto de lo que sucedía en su mente.
Tras haber esperado el momento apropiado, a mitad de año decidió dar un paso más para completar su jugada. Un largo período de observación se encargó de guiarlo para que no cometiera errores fatales y fuera bien recibido por el corazón al que deseaba llegar, sin importar que uno de sus mayores rivales comiera a su lado todos los días y mirara en la misma dirección que él sin darse cuenta. El saber que tenían gustos parecidos no hizo más que indicarle una verdad triste: siempre competirían.
A Jungwoo también le gustaba Ahn Vivi. La primera vez que la vio, quedó anonadado con su belleza, y con el tiempo fue enamorándose más. Para su suerte, al estar junto a Doyoung durante los recreos también tenía la oportunidad de ver a Vivi sonriendo en todo su esplendor, y de compartir un par de palabras con ella; esto último, desde que los dos mayores decidieron ser amigos. Como vio que todo iba viento en popa, exceptuando la llegada de Sewoon a sus vidas, tomó la iniciativa de dar un paso que lo dejara delante de sus dos rivales.
—Woah, te queda muy lindo ese color —dijo la chica, emocionada, cuando vio las mechas naranjas por primera vez, adornadas por una linda boina negra que complementaba su look. Doyoung lo miró con sorpresa también.
—Gracias, noona —sonrió, inocente. Nadie más hizo un comentario al respecto, y pronto encontraron un tema de conversación, pero supo que había conseguido su propósito inicial de atraer la atención de Vivi.
El día después de eso, cuando llegó y saludó a sus amigos como habituaba, hubo alguien resentido que no le devolvió el gesto. A veces Doyoung hyung es muy infantil, pensó, restándole importancia a lo sucedido. De todos modos, el mal trato que recibió no le afectaría en las clases del día o en las demás interacciones sociales que tuviera que efectuar. Es más, durante la hora de Álgebra, descubrió que podía avanzar más.
El sonido de la campana después de la larga clase fue música para sus oídos. Se dirigió, apresurado, hacia la cafetería, para encontrarse con Vivi lo más pronto posible. Notó que Jaehyun y Winwin se dirigían hacia la mesa de siempre, así que aprovechó para saludarlos.
—¿Y los demás? —preguntó, al darse cuenta que la línea del noventa y seis no estaba presente.
—Doyoung no quiere venir, creo que está celoso. —Jung no pudo evitar reír.
El menor sonrió. Era el momento perfecto.
—Gracias, hyung. —Se despidió, acercándose a la mesa donde el objetivo estaba esperando—. ¡Noona! —exclamó, para llamar su atención.
Ahn volteó, reconociendo su voz, e intentó saludar al sonriente chico con la misma energía, sin lograrlo del todo.
—Noona, me preguntaba si me podrías ayudar en algo —dijo, mirando al suelo en señal de nerviosismo.
La sorpresa no tardó en hacerse presente.
—¿Qué necesitas?
—Quiero que me expliques Álgebra, la verdad no entiendo muy bien... ¿P-Podrías? —Sus inocentes palabras no sólo guardaban doble intención, sino que eran ciertas. Nunca fue bueno en tal materia.
—Por supuesto, te ayudaré —respondió al instante, aliviada porque el favor no era demasiado grande—. ¿Quieres que estudiemos en mi casa?
Asintió y le agradeció con un fuerte abrazo que la tomó desprevenida.
Por otro lado, las seis palabras que conformaban la pregunta lograron entrar a oídos de la persona menos indicada. Jungwoo no supo cómo pasó, pero de repente se encontró con Doyoung frente a él, mirándolo fijamente. Ten estaba detrás, tratando de detenerlo de cometer una locura. Y, cuando parecía que se echarían a golpes en cualquier momento, Sewoon se puso en medio y susurró:
—Aquí no.
Sus palabras tenían un significado más profundo que el simple hecho de no pelear ahí, mas ninguno de los dos supo qué era. Después de intercambiar un par de miradas asesinas con el menor, Doyoung se marchó hacia donde se encontraban sus amigos.
—¿Quieres sentarte? —preguntó el amable Sewoon a Jungwoo, a modo de disculpa por sonar tan duro antes. El menor asintió—. ¿Doyoung siempre es así de celoso? ¿O, más bien, posesivo? Hasta ahora desconfío de él. Me dio una mala impresión...
Se encogió de hombros.
—No lo conozco lo suficiente.
⋅⋅⋅
Esa misma tarde, Kim Jungwoo tuvo su primera clase oficial con Ahn Vivi y, a pesar de que ella se esmeraba por repetirle las cosas que no entendía, seguía sin hacerlo. Miró sus labios moverse para tratar de descifrar qué le estaba diciendo, se fijó en la mina de su lápiz recorriendo el papel para entender qué le estaba explicando y también escuchó su voz. Pero no logró procesar nada. ¡Ah! El poder del amor, siempre evitando que se concentrase.
Volvió a casa con una sensación placentera en el pecho, esa que sólo la chica podía provocar en él. A pesar de su carácter sociable, no era un muchacho con amigos cercanos que lo hicieran feliz con su presencia, así que se refugiaba en su pequeño amor platónico; pequeño porque, según él, no pensaba en Vivi todo el tiempo y no llegaba hasta el punto de ser obsesivo.
Jungwoo tenía oportunidad para ganarse su corazón, y estaba dispuesto a aprovecharla. Tras la exitosa "primera fase" de su plan, sólo le quedaba pensar en cómo efectuaría la segunda.
❛ Tienes mi apuesta, quiero apostar en mí
No necesitas amarme
Esta podría ser mi única oportunidad
Podrías arrepentirte si me pierdes ❜—BET BET :: NU'EST
Holi, esta historia se desarrolla como en 2013 gg
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[NCT] Forever yours | Kim Doyoung
FanfictionLa única misión de Doyoung es entrar en el corazón de Ahn Vivi y quedarse ahí para siempre. ❝Me detendré cuando por fin me digas que me amas❞ » nct's doyoung fluff fanfic.