Capítulo 5 - PESADILLA

584 37 28
                                    


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


PESADILLA 


Abro los ojos otro día más sin tener ganas de hacerlo, ojalá volver a quedarme dormido porque allí la tengo junto a mí y al abrir los ojos me encuentro en una pesadilla de la que quiero salir. Pero tengo que levantarme y seguir buscándola, no puedo rendirme, no puedo porque ahora... ahora son dos, voy a ser padre... Aún no me lo puedo creer.

Me levanto y me meto en la ducha para poder despejarme, al salir me miro en el espejo y observo mi cara, la barba sin arreglar de hace un par de días, unas grandes ojeras de no haber dormida poco o nada y mis ojos tristes, sin ese brillo especial que siempre tienen, que ella consigue que tenga.

Bajo a comer algo, aunque la verdad es que no suelo comer mucho, el apetito se me ha ido, solo pienso en ella, en dónde estará, en cómo estará y... simplemente no puedo comer nada.

Mi hermano me mira mientras me tomo un vaso de leche. No se ha separado de mí desde que pasó todo y se lo agradezco enormemente. Mi padre llega hoy de Mallorca y los padres de María mañana. No sé que voy a decirles...

- ¿Hey? ¿Qué pasa? – me pregunta mi hermano preocupado.

- Mañana llegan los padres de María – respondo con lo que estoy pensando.

- Sí – me confirma lo que ya sabía - ¿Y? – vuelve a insistirme.

- Se supone que tengo que cuidarla, que tengo que protegerla – le digo con la voz entrecortada – Ellos confiaban en mí para ello pero... no he podido hacerlo Igor. ¿Cómo voy a mirarles a la cara ahora sabiendo que la han secuestrado por mi culpa? – sigo diciendo mientras lloro, porque no puedo contenerme.

- No digas eso – se acerca mi hermano – tú no tienes la culpa de nada ¿vale? Es culpa de Marina que es una psicópata y se ha vuelto loca – me abraza para reconfortarme – Vamos a encontrarla – dice seguro.

- ¿Me lo prometes? – le pregunto mirándole a los ojos.

- Te lo prometo – me asegura y yo me tiro a sus brazos nuevamente.

No sé qué es lo que haría sin mi hermano, es mi mayor apoyo, a quién puedo contarle todo sabiendo que no va a juzgarme y siempre me va ayudar. Es una de las personas más importantes que tengo en mi vida.


La tarde está llegando a su final, mi padre llegó a la hora de la comida y fue verle y no pude contenerme, llore en sus brazos como cuando era pequeño. Sintiendo me seguro allí entre sus brazos. El timbre de casa suena y me sobresalto. No esperaba ninguna visita. Mi hermano va a abrir la puerta y vuelve serio con unos hombres detrás.

- Hola somos el inspector Harrinton y el inspector Fernández – habla el chico moreno y me levanto del sofá para estrecharle la mano – somos los encargados del caso de María – termina de decir.

AMOR ETERNO 3 || INCENDIOS || MARCO ASENSIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora