Jimin se sentía decepcionado, jamás pensó que Jungkook lo engañaría y menos que lo hiciera con uno de sus amigos.
En medio del despecho y el alcohol decidió enviarle una foto caliente a Jungkook, para que se diera cuenta de todo lo que había perdi...
Guardé mi celular en uno de mis bolsillos del pantalon, pensé en todo lo que Namjoon había mencionado de Jisoo, a veces pensaba que exageraba mucho las cosas, pero era un buen amigo, apreciaba que cuidara de mí.
Agarré las llaves del auto dispuesto para salir, al abrir la puerta de mi apartamento me encuentro con una Jisso sonriente.
Después de todo creo que Namjoon tenía razón al advertirme de ella
– Hola, bonito – no podía negar que ella era muy linda y si no fuera porque está loca aún siguiera con ella – vine a buscarte y pasarla bien un rato. – no dijo nada más, como pudo besó mis labios y fui guiado hasta uno de los muebles de mi pequeño apartamento, ella estaba loca y yo no quería ser grosero, pero ella ya no me gustaba y no quería nada.
Agarré sus brazos y la separaré de mí – ¿Qué parte del NO SOMOS NOVIOS no entiendes? – solté el agarre que tenía de sus brazos para no lastimarla pero parece que hice mal.
– No lo somos, pero eso no es necesario para diver...
– No quiero diversión contigo, a demás, pediste el día libre. ¿Qué haces aquí? – estaba perdiendo la poca paciencia que le tenía a esta chica.
– Vine a buscarte, ¿no es obvio? – sonrió inocente – ví que no estabas en la tienda y supuse que hoy tampoco irías y quise venir a hacer compañía. – trató de acariciar mi rostro pero no la dejé.
– No la necesito, puedes retirarte, por favor – hice una seña mientras la miraba serio.
Lo siguiente que pasó me dejó sorprendido. Jisso acababa de quitarse el abrigo que traía puesto, estaba totalmente desnuda y loca.
– Dime Yoongi, ¿acaso no extrañas esto? – por primera vez sentí asco, vergüenza ajena.
– No te hagas esto, póntelo de nuevo. – recogí el abrigo del suelo – podrías resfriarte si vas así por las calles, no quiero nada contigo. Y ahora tengo dolor de cabeza.
– Puedo ayudarte con eso. – Está chica era terca, no entiendo por qué me sucedían estas cosas a mí.
– Tengo que ir a trabajar.– agarré si brazo no sin antes asegurarme que trajera bien puesto ese abrigo. – ahora te vas a ir, y no te quiero volver a ver.
– Te arrepentirás de esto, Yoongi – dijo muy molesta mientras caminaba hasta los ascensores, sería grocero decir que ya no me importaba esa clase de cosas, pero ella llevó mi paciencia hasta el límite.
Me hubiese encantado que fuera Jimin el que viniera de esa forma, pero no todo en esta vida es perfecto.
Entré al apartamento, quería ver si esa loca no había dejado algo, las veces anteriores me había encontrado con diminutas cámaras y no quería que esta vez sucediera lo mismo. Estaba pensando en cambiarme de casa a uno privado, no quería que ella viniera de nuevo, por ella cambié varias veces número y ahora también tendré que hacerlo de casa.
Suspiré cansado cuando entré en mi auto, debería ponerle más que un alto a todo esto o me volveré loco.
Mi teléfono empezó a sonar indicándome que un mensaje había llegado, sonreí al ver de quién se trataba.
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