*La fuerza del Corazón*

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Cuando nos quisimos dar cuenta ya teníamos todo listo.

Nos quedaban prácticamente dos semanas.

¡Dos semanas!¡Dos semanas! repetía constantemente en mi cabeza.

Iban a ser las semanas más largas de mi vida.

No veía el momento de volver a darle el sí quiero de nuevo a Shane.

Volver a ponerme el mismo vestido que en Las Vegas y que el volviera a emocionarse como lo hizo.

Que me vuelva a mirar tan dulce como cuando me vió avanzar por el pasillo hasta la capilla.

Que me vuelva a besar tan dulce como después de decir Sí,quiero.

Y salir de la mano de la capilla y mirarnos a los ojos y sonreír a la vez.

Quizás después del banquete podríamos revelar la locura que hicimos meses antes.

O mantenerlo en secreto.

Pero tarde o temprano tendrían que saberlo.

Esas cosas se acaban sabiendo y más si eres una figura pública como es el caso de mi marido.

La prensa del corazón siempre está al acecho y ávida de información.

Son unos buitres en potencia.

Aunque en la otra cara de la moneda hay periodistas muy respetuosos.

Pero lo que más abundan en ese mundillo son los primeros.

Harán lo que sea por tener información de primera mano y llevarse la exclusiva del año.

Y forrarse a costa del famoso,famosillo de turno según le convenga.

O lo que es peor,sacar a la luz los trapos sucios de la persona que esté en auge ese momento y hundirle la carrera.

Que esto último lo he visto con mis propios ojos y presenciado en directo.

No es plato de buen gusto ver como se cargan la carrera de alguien por unos rumores mal difundidos.