NO TE ENAMORES DE MI

#3

-Esta bien Ally, te prometo que luego te contaré todo a lujo de detalles ¡Es solo que no quiero hablar de eso!-
-Vale, dejaré que me lo cuentes luego pero con una condición - rodé los ojos. ¿Qué querrá ahora?
-Lo que tu quieras- suspiré tendida en la cama mientras ponía el móvil en altavoz.
- Que me acompañes a la pelea de mi novio está noche - dijo en un tono casi inaudible.
-¡¿Que?! ¡¿Estas loca?! Mamá va a matarme si se entera.- Grité como una loca mientras manoteaba en el aire.
-¡Ay porfa amiga! Ya sabes que me da mucho miedo ir sola.- Suplicó. Me senté con los pies cruzados en forma de indio y tomé mi cabello con frustración. Mamá jamás me dejará ir, pero tampoco puedo dejarla sola. Es mi mejor amiga.
-Vale-
-¿Que?-
- Te acompañaré pero tendrás que pasar por mi a eso de las diez.- Susurré en la bocina del teléfono para que nadie pudiese oirme. Mi amiga chilló de la emoción y asintió.
En que lío me he metido. Me dirigí hacia la percha para buscar alguna ropa para esta noche. La puerta de mi cuarto se abrió de repente y pegué un grito al ver a mi padre mirándome fijamente, como si pudiese descifrar lo que pienso. Afortunada y desgraciadamente mi padre no es un hombre de negocios que se la pasa ocupado todo el dia. Esa nos es mi realidad. Tiene un trabajo en una compañía y trabaja solo hasta por la tarde y siempre se pasa al pendiente de mi. Hija única al fin.
-La cena está casi lista- indicó con una sonrisa y asentí. Sin más se marchó lo cual agradecí. Cerré la puerta con seguro y tome unos jeans negros rasgados en el área de las rodillas, mis vanz estilo ajedrez blanco y negro y un hoodie gris con las palabras "Trasher" al frente. Tomé toda la ropa y la coloqué debajo de mi almohada y bajé a cenar.

*Mensaje de Ally*
- Ya estamos aquí, baja-
Apagué mi celular y lo coloqué en el bolsillo trasero de mi pantalón junto a mi ID y algo de dinero.
Acomodé algunos cojines en la cama, intentando que paresca un cuerpo y no una oruga gigante. Dejé todo en su lugar y logré salir de mi casa.
Me subí al auto y saludé a mi amiga junto a Joe su novio. Ally sabe que ésta idea no me agrada para nada. Joe participa en peleas callejeras para reunir dinero y pagar la Universidad, es dos años mayor que nosotras por lo que tiene 20. No me gustan ese tipo de ambientes además de que es muy peligroso. Llegamos a un callejón y nos bajamos del auto. Entramos a un edificio semi abandonado y mi cara cambio de una de una de terror a una de sorpresa. El lugar estaba abarrotado de gente de más o menos nuestra edad, la música casi me revienta los tímpanos y a lo lejos pude ver el "ring". Ya estaba empezando a arrepentirme de haber venido. Ally tomó mi mano y me arrastró hacia quien sabe donde. Nos sentamos en unos bancos alrededor del "ring" y vimos a Joe entrar en él, junto a otro chico. Los nervios comenzaron a invadirme. Tomé la mano de mi amiga para darle "consuelo" ante lo que hiba a ver. En estas peleas usualmente salen con la cara bañada en sangre o con un par de costillas rotas. Sentí mi celular vibrar y al ver de qué se trataba me sorprendí un poco. Era un mensaje de Bryan.
*Bryan*
- Hola Miah, ¿qué haces?-
Rodé Los ojos y bufé. Si tan siquiera supiera donde estoy le daría un ataque al corazón. Bloqueé la pantalla del aparato y lo guardé en su lugar. La pelea comenzó y yo no podía mirar, sólo quería que esto acabara pronto. De un momento a otro se escucharon sirenas de policía y todos comenzaron a correr. Mi amiga y yo buscamos a su novio con la mirada hasta que lo vimos en una esquina quejándose de dolor. Ally corrió hacia el e intenté seguirla pero los gritos y constantes choques con las demás personas corriendo, hizo que la perdiera de vista. Las sirenas de los policías se escuchaban cada vez más cerca y entré en pánico. Me sujeté el cabello desesperada mientras miraba hacia todos lados buscando una salida. Traté de seguir a la multitud y luego me fijé en que el edificio tenía unas ventanas que daban a la parte de atrás, sin pensarlo corrí hacía allá. Hiba como desquiciada cuando sentí que choqué con un cuerpo el cual provocó que me tambaleara y cayera sentada. Frustrada alce la cabeza y quité de mala gana algunos mechones de cabello que tapaban mi vista.
-¿Miah? ¿Qué rayos haces aquí?- Gritó Bryan con sorpresa al verme. Me encojí de hombros y de un momento a otro tomó mi cintura y me ayudó a levantarme.
-Tenemos que salir de aquí ya- Susurró. Su voz era temblorosa y era obvio que estaba aterrado. Pero.. ¿Qué hacía el en un lugar como este? Tomó mi mano y como si hubiera leído mi mente saltamos por las ventanas traseras del edificio. Sentí mi cuerpo impactar con el suelo y solté un leve gemido de dolor.
-¿Estas bien?- Preguntó Bryan un tanto preocupado. Asentí con la cabeza y se puso de cuclillas para estar a mi altura. Tomó mi barbilla, provocando que lo mirase. Contemplé su cara aún así con la poca luz que nos brindaba la luna, ya deben ser las tres de la madrugada. Su cabello lucía un poco despeinado pero aún así se veía guapísimo. Sonreí sinceramente y lo abracé. El se sorprendió un poco y luego respondió a mi abrazo pegándome mas a él.
-Gracias-
-No hay de qué, ven hay que llevarte a casa.-

————————————
(Outfit de Miah en multimedia)