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Luego de estar todo el día en la piscina, me cansé y me fui a mi habitación. Abrí la puerta y entré directamente al baño para darme una relajada ducha.

(....)

Estaba a punto de dormirme cuando escucho la puerta abrirse de golpe dejando ver a Andrea junto a Bryan, extremadamente ebrios. Rodé los ojos e intenté dormirme.

- Bryan... dormimos juntos?.. hip.. - dijo Andrea arrastrando las palabras. Abrí los ojos de par en par, no quiero tener que presenciar tal escena.

- ¿Dónde... está Miah?- Preguntó él.

¿Qué está pasando? ¿Acaso no se dan cuenta que estoy en la misma habitación?

De un momento a otro Andrea comienza a vomitar y se cae al suelo provocando que Bryan comenzará a gritar. Me paré de golpe y corrí hacia ella.
Bryan abrió los ojos al verme.
- ¡¿Qué esperas?! ¡Busca ayuda!- Le grité intentando sacarlo de su trance.

Una hora después Andrea fue llevada al hospital por intoxicación. Todos estaban asustados al principio pero luego se fueron a sus respectivas habitaciones. Genial ahora me toca quedarme sola con este imbécil.
Cerré la puerta detrás de mi y Bryan se lanzó en mi cama.

- Bryan hazme el favor y vete a tu cama -
- No quiero- Dijo como un niño pequeño.
Suspiré y me acerqué hacia el. Tomé su brazo y lo arrastré hasta el baño, abrí la llave y le indiqué que se colocara en la bañera. El hizo caso y se sentó en el suelo. El agua caía por su cabeza mojando su cabello y toda su ropa. Lo ayude a quitarse la camisa y los pantalones, hizo un ademán de quitarse los boxers y me alarmé.

-Eh cualquier cosa estoy afuera- Dije nerviosa lista para marcharme pero él tomo mi mano.
Lentamente me atrajo hacia la bañera y me senté frente a el. Mi pijama estaba empapada. Bryan me hizo un ademán para que me sentara de espaldas a él y obedecí. ¿Ya se le habrá pasado la borrachera?
- Miah-
- ¿Si Bryan?- Susurré atemorizada por lo que pudiera decir.
- Me gustas... mucho- susurró quedándose dormido.
Abrí los ojos impactada. ¿Qué acaba de decir? Talves sea sólo el efecto del alcohol.
- Ven hay que llevarte a la cama, ya estás diciendo sandeces -
Aún así una pequeña parte de mi tenía la esperanza de que eso que dijo fuera verdad.

Luego de un rato pude convencerlo de que se quedara en su cama. Lo arropé y sobé su cabello.

- ¿Porqué haces esto?- Susurró.
Inmediatamente los nervios me invadieron. El tiene razón. ¿Porqué estoy aquí ayudándolo, cuando pudiera estar en mi cama durmiendo? ¡Además son las cuatro de la madrugada!
La realidad es que no lo sé, no soy tan mala persona como para dejarlo así en ese estado. Tenía que ayudarlo, sentía esa necesidad de cuidar de él y protegerlo así como el hizo conmigo en la fiesta del otro día.

- Porque eres mi amigo y me importas- deposité un beso en su frente y me dirigí hacia mi cama.

En realidad no creo que sea sólo por eso.

- Buenas noches Miah...-
- Ya duérmete - bromeé.

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