Día 2: Au Policía y criminal.

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Él culpable de mi arresto.

Dando roces nerviosos al contrario, buscando poder sentirse mas volvía locos a ambos hombres. En el camino ambos se escondía del resto de compañeros de el contrario, si los encontraban sin duda que seria un gran problema, aun así nunca soltaron sus manos durante el camino. Se sostenían con ansias y nerviosismo.

Las peleas entre organizaciones habían cesado de una manera brutal y rápida, había una persona capaz de aplastar a las mayores organizaciones con poderes, la organización delictiva de este joven se había vuelto una de las mas reconocidas. Sin en cambio aún se tenia un poco de esperanza que daba el mejor oficial de todo Yokohama, todos tenían la esperanza de que ese oficial destruiría esa organización tan turbia.

Pero ¿Qué tan seguro era que eso realmente pasara?, nadie sabia nada del mafioso pero al contrario todos conocían el rostro del oficial y se corria el rumor de que ambos eran de esas personas con poderes.

Bajo la lluvia dos amantes se besaban con cariño y ansiedad, ambos llevaban tiempo sin lograr verse esto se demostraba en sus caricias y abrazos que se transmitía en esa calle desierta de Yokohama-Me atrapó oficial Odasaku~- contesto rodeando del cuello al mencionado con una sonrisa -Osamu debes dejar de jugar conmigo, eres un líder de la mafia y debo encerrarte...- menciono el pelirrojo tratando de auto convencerse y volviendo a fundirse en un beso con uno de los criminales mas joven es de toda Yokohana, criminal que había logrado enamorarlo por completo a pesar de la diferencia de edad.

Este niño había armado una mafia nueva y con esta aplasto a la Port Mafia y Agencia Armada de Detectives era un criminal muy buscado por todo Japón, con solo un año y medio de haber recien formado su mafia pero nadie conocía su rostro, lo cual era una enorme desventaja para el gobierno, su inteligencia era algo de temer para todas las demás organizaciones con poderes.

-Entonce, arresteme oficial Odasaku- dijo rozando sus labios con los del pelirrojo, en ese momento se sentía tan amado que quería quedarse ahí abrazandolo y tal vez llegar algo mas en la casa del mayor. El simple hecho de estar a su lado lo hacia sentir especial, si él pelirrojo le pidiera dejar la mafia e irse juntos con gusto traicionaria a todos sus subordinados sin remordimiento alguno -¿No va arrestame oficial? Porque si no lo hará creo que su casa es la que mas cerca nos queda- al mirar él rostro de su acompañante deseoso supo que su juego había funcionado Oda Sakunosuke el mejor oficial de todo Yokohama volvería a estar entre sus sábanas.

Odazai Week escritos~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora