seguía sin entender como había terminado en aquel lugar. renjun no era de cometer locuras, por eso, aquel ambiente lleno de luces, olor a alcohol y cuerpos chocando entre sí al ritmo de la música lo hacía sentir una ansiedad y pánico horribles.
recientemente había llegado de donde su abuela, llevaba una semana sin ver a sus amigos, sin ver a jaemin, y por eso se sentía aún más mal. jeno lo había traído ahí, con la intención de darle una "bienvenida", pero deseaba salir corriendo.
ni siquiera sabía bailar. buscó a jeno con la mirada, pues ambos estaban ahí, "bailando" y cuando lo vió le hizo una seña con la cabeza, indicando que saldría.
salió al jardín, ahí empezó a sentirse más fresco, y luego, con frío. tomó su celular y le marcó a jaemin. cuando este contestó, le pidió que viniera por él, para su suerte, aceptó.
necesitaba salir de ahí, propablemente nunca se había sentido tan fuera de lugar que ese día.
se quedó en la acera, esperando, pero luego de unos minutos sintió como alguien se sentaba a su lado.
-gracias por dejarme solo ahí.
la voz de jeno era tranquila y un tanto sarcástica. le dió igual.
-disculpa, pero odio las fiestas.
ni siquiera se tomó el tiempo de mirarlo. se sentía molesto, pero no era culpa de el chico a su lado. sabía que no debió haber aceptado salir con él, pero de todas formas lo hizo, y ahora sentirse así era su culpa.
volteó su cabeza luego de unos instantes, puesto que el silencio se sentía incómodo. conocía al chico desde hacía mucho, pero jamás habían sido tan cercanos, por eso aveces no sabía que hablar con él. jeno lo miraba demasiado fijamente, movia sus ojos por toda su cara, y aquello comenzaba a ponerlo nervioso.
más aún cuando comenzaba a acercarse, al punto de que sus labios se rozaron. entendió sus intenciones, aquello no estaba bien, quería alejarse, pero sus labios estaban atrapados por los del contrario cuando lo intentó. lo estaba besando, pero tan solo quería que parará. no tenía intenciones de mover sus labios para seguir aquel beso, sin embargo, eso no hizo que el chico se alejará.
puso las manos en el pecho del contrario, para empujarlo y así alejarse, pero antes de que lo hiciera una voz conocida habló.
-renjun.
al instante el chico que tenía encima se alejó mirándolo a él, y luego al muchacho que estaba frente a ambos.
sintió una especie de vergüenza, enojo, tristeza, combinadas. se paró de donde estaba, y se puso al lado de jaemin. lo miró, éste hizo lo mismo, pero de una manera tan seca, que su corazón se partió.
-¿te vas ya?
la pregunta tan obvia no era necesaria, pero jeno igual la hizo, tal vez para hacer que todo se sintiera menos incómodo y tenso.
-sí... yo, le dije a nana que viniera por mí... adiós.
se volteó, caminado con los brazos cruzados, sintiendo como jaemin venía detrás de él. sentía náuseas, sentía su corazón romperse por alguna extraña razón que no entendía. ambos caminaban, en silencio, ninguno quería romperlo, pero ambos necesitaban explicaciones, para no perder la cordura. no sabía como dar explicaciones ni siquiera, después de todo no eran nada más que amigos, o eso creían ambos.
¿los amigos se besan?
de todas las cosas que parecían no tener orden en su vida, su relación con nana era una.
pero ambos les daba miedo dejar todo claro, sin embargo, aquello debía terminar, o eso creía. solo necesitaba saber que palabras usar.
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