perdón, perdón #19

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[Te idealicé a mi lado en mis noches y días
Y me aferré a la idea que tu eras el amor de mi vida.

Hoy te pido perdón, perdón, perdón
Por haberte confiando sin dudar mi corazón,
entregar mi alma a tus brazos.
Por confiar mi cuerpo en tus manos
Perdón, perdón, perdón
Por crearme esta falsa historia de amor...]

Lauren pov

Había sido una pelea constante desde la casa quinta de los Cabellos. Después de una magnífica noche con mi amada Camz.

- no te daré el divorcio hasta que le convenza a tu tío Frederic a promocionar mi nueva línea de ropas.
El mañana estará aquí en una importantísima reunión.

- y como crees que haré eso. Yo jamás me metí en sus negocios.

- vamos no te pases de lista conmigo Lauren. Todo el mundo sabe que él tiene una debilidad absoluta por ti, que cuando tu padre murió el te llevó un tiempo a vivir con el.
Sí mañana en la reunión le convencemos que lo nuestro es lo mejor que te paso, el aceptará promocionar mi marca en París y yo te dejaré libre. Firmaré ese maldito divorcio que tanto quieres.
Suspiré, quizás sabía que no estaba bien engañar a mi tío que tanto me ama de está manera, pero necesito el divorció.
Quiero ser libre para poder tener por completo a mí camz en mi vida.
- no entiendo de qué dudas, tienes toda lo que deseas.
Tú solo piensas revolcarte con esa maestrucha sin futuro y yo te daré tu ansiada libertad.
Me sorprendía con la frialdad que lo decía. Como si no le importara lo que por años vivimos, como pude ser tan ciega con Lucia.
Hoy hacia eco en mi mente cada palabra que mi madre o Tay me decían.
Era la única que no veía que en realidad no había amor en nuestra relación.

- ¿y como lo convencernos si tú no puedes si quiera acercarte a mí?

- se muy bien que hacer para conseguir lo que quiero Lauren.
La manera que me hablaba me daba escalófrío. Sentía que no la conocía en absoluto.

Me giré y me fui a la habitación a tomar una ducha.
Cuando salí la vi sentada en la cama me acerque sin hacer ruido a ver qué hacia. Se estaba sacando las vendas de sus muñecas. Al destapar las pude ver que las cicatrices eran pequeñas.

- ¿que demonios?
Ella se giró rápidamente mirándome con asombro.
- respóndeme Lucía, ¿no hay tal suicidio? Me viste la cara.
Ella se intentó tapar las muñecas pero era tarde. Las tomé y giré mirando sus cortaduras invisibles.
- Estás demente.

- ya no tenemos que fingir, era solo para que estés conmigo por tu tío, pero es mejor para las dos de este modo.
Solté sus manos indignada, nunca había tenido tantas ganas de golpear a alguien como en este momento lo hacía.
Me fui hasta la cocina y me servi una medida de whisky. Necesitaba sacarme la frustración de otro modo que no sea insultando.

- ya sabes Jauregui, si tú no cumples no te liberarse de mi.
Tengo buenos amigos que no tendrán piedad en acatar mis órdenes y lastimar a tu noviesita.
Me giré a mirarla, no podía creer lo que me estaba diciendo.

- no te metas con ella Lucía,  de lo contrario te arrepentirás toda la vida.

- el que avisa no traiciona, no volverás a verla hasta que tú tío se vaya. ¿Lo has entendido?
Ya no sabía con quién trataba, ella se fue hasta la habitación.
Yo me quedé pensando en el doctor cuando me dijo que no era profundo el corte, en la vez que Taylor me dijo que me Lucía me mintió para irse del departamento a dormir diariamente en su estética. Estaba todo en mi cara y no quise ver que ciega estaba.
No iba a poner en riesgo a Camila, pensaba volver a verla luego de mañana.
Escribí en mi celular un mensaje, pero ella me tenía aún bloqueada. Maldije y luego intenta llamarla pero no me atendía.
Demonios, demonios demonios.
Miré la hora y ya eran las 20:00 llamé a mi madre.

De A Dos (G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora