De A Dos (G!P)

cavernícola #24

[ Te sabias el popurri del kamasutra
Y burlábamos la ley de gravedad.
Intentábamos de todo sin preguntas,
Y metíamos con toda honestidad.

No había reloj, ni presupuesto.
La piel lo que traíamos puesto
Y nos bastaba.

Besos y croissants por desayuno,
Sudor, gimnasia y piel para cenar
Homo sapiens en pleno siglo XXI.
Trogloditas del amor al natural.

Se nos dió un fideicomiso
Por unos días el paraíso para los 2...]

Lauren pov

Ella ni me había tocado aún y yo ya estaba más que excitada. Desprendió mis pantalones con esa cara de picara que me enloquecía.

- ¿no respondiste a mi pregunta? ¿Quieres que me detenga?
Pregunto levantando una ceja subjetivamente.
Negué rápidamente, en realidad no lo quería, con ella quería todo.

Sin mucho aviso bajo mi boxer, liberando a mi lolito que ya estaba despierto. Maldije no era posible que tan rápido ya estaba erecto.
Camila mordió sus labios y yo me tapé la cara intentando no atacarla y hacerla mía allí mismo.
Fue entonces cuando sentí el jarabe frió en mi miembro.
Abrí grande los ojos y la boca mirándola. Ella me sonrió, se acercó lentamente a mí pene, parecía que mi corazón me saldría por la garganta y la punta de su lengua me recorrió.

- ¡Oh por Dios!
Tiré mi cabeza hacia atrás, me estaba dando mucho placer lo que me hacía. Sus manos bombeaban mi miembro, mientras su boca y lengua lo chupaban.
Cuando sentí que su garganta tocó mi glande, apreté mis muslos, tenía ganas de moverme en su boca, pero intentaría ser paciente y esperar que ella tomé sola todo el control.
La volví a mirar y verla devorando mí pene me dejaba al límite, estaba a punto de tener una eyaculación, era algo increíble porque no era de hacerlo tan precozmente.
Pero había esperado tanto por esto y ya mi cuerpo no están en las mejores condiciones.
Sacó su boca y colocó un poco más de jarabe, mis gemidos se hicieron presente una vez ella volvió a chupármela toda, como si fuera un maldito helado.
Luego dejó de hacerlo, subió lentamente hasta mi boca.

- Sabes tan bien Lauren, deseaba tanto saborearte así.
Fue todo lo que dijo, para luego besarme apasionadamente. Su lengua estaba más juguetona y su mano me masturbaba duró.
Saqué su mano de mi miembro, porque no iba a aguantar tanto si lo seguía haciendo.
La giré colocándola boca arriba en la cama, Me saqué por completo mis pantalones. ella estaba con las piernas cerradas, ya que yo me senté a horcajadas en ella, ella miraba mí pene que estaba bastante grande y me golpeaba el abdomen cuando me movía.

- es tu turno.
Abrí su camisa de un solo estirón haciendo que los botones volarán, ella soltó un gemido con la acción.
No tenía brasier lo que facilitaba más mi objetivo.
Volví a besar su boca muy sensualmente, con la mano  libre tomé el helado de almendra (mi preferido) y lo abrí, con la cuchara tomé un poco colocándole en sus tetas, pezones y luego su abdomen.

- ¡está muy... frió Lo!
Tenía su pezón erecto desde antes y su piel toda erizada. Sonreí porque la imagen de ella llena de helado me encantaba. Así que me apresure a limpiarla, lambi todo al rededor, para terminar chupando sus perfectos pezones endurecidos.
Mientras hacía mi trabajo en ellos, salí de sobre ella colocándome a su costado, acaricie su muslo con las puntas de mis dedos casi arañando, hasta llegar al borde de sus pantalones.
Los baje con ambas manos llevándola hasta sus rodillas.
Y mientras seguía trabajando en sus pezones mis dedos acariciaban sus labios vaginales, al bajar un poco más pude dentro lo húmeda que estaba, ella abrió un poco más sus piernas para que yo hiciera lo que me apeteciera, así que abrí sus labios vaginales y fui directo a masajear con círculos su entrada. Ella gemía y sostenía la sábana con fuerza.
No iba a penetrarla, así que baje con besos húmedos hasta su vidente y la miré, ella estaba atenta a lo que hacía, su respiración agitada.
No la hice esperar más, me posicione entre sus piernas, acomode el cabello para atrás, ella mordió sus labios y yo sonreí atacando mi objetivo. Saboreando cada parte de ella, mi lengua estaba desesperada por recorrer cada punto extracto que le daba placer. Ella se retorcía así que tomé sus piernas para que permanecieran abierta, mientras yo le daba sexo oral.
Fui hasta su clítoris y lo succione, ella grito. Fue entonces que supé que ella estaba muy bien que preparada.
Me llevaré rápidamente acostándome sobre ella, tomé mi pene y pase por su centro mi glande, ella se inclinó un poco para ver lo que le hacía, fue entonces cuando decidí darle un golpe con el, ella abrió la boca sensualmente y gimió, le di otro golpe y ella mordió sus labios.
Era perfecta, tan sexy y era mía.
Metí la punta con algo de dificultad en su vagina. Ella me apretó el trasero en señal que le estaba doliendo un poco. Así que decidí no llenarla completamente. Porque sabía que yo estaba muy excitada y no la quería lastimar.
Sí que empecé a moverme lentamente en ella, estaba tan estrecha, parecía que era la primera vez que teníamos relación. No voy a mentir me gustaba lo estrecha que estaba. Me acomodé mejor sobre ella, haciendo fuerza con mis brazos para no poner todo el peso sobre ella. Y me movía, se sentía tan bien penetrarla y ver cómo disfrutaba. La besé, rápidamente fui a su cuello. Ella arañaba mi espalda y lentamente la iba penetrando más profundo.