Construir un futuro (ItachixOc) EDITANDO

Comienzo de la farsa

- Será mejor que siga desde aquí - Dije al pelinegro a mi lado

Después de lo ocurrido con Itachi, no me contó nada más, y yo tampoco insistí, solo me quede en silencio a su lado por el resto de la noche, hasta que me quede dormida sobre su pecho.

Al dia siguiente partí a mi misión, explicando al Uchiha que regresaría en un mes, el se ofreció a acompañarme, pero lo rechace por ser una misión solo para mi, no quería meterle en problemas y que luchara usando su Sharingan si era necesario, pero le dije que podía acompañarme una parte del trayecto de donde lo vimos por ultima vez, había pasado una semana desde la misión anterior no debía estar lejos.

- Estarás bien? - Me pregunto cuando nos detuvimos en la rama de un árbol

- Si, solo es un trabajo de espionaje, no pretendo tener ningún enfrentamiento - Dije sonriéndole, para luego mirarle con preocupación - Que tal tu?

El puso una mano sobre mi cabeza acariciando mis cabellos, luego puso una sonrisa casi invisible.

- Haré lo que pueda - Dijo para tranquilizarme

No aguante las ganas y le di un abrazo, ocultando mi cara en su fornido pecho.

- Regresare y encontrare una forma de curar tu enfermedad, lo prometo - Dije decidida

Sentí como bajo su mano hasta mi nuca y su otra mano sujetaba mi hombro.

- No te preocupes por mi - Me pidió

Yo levante la mirada encontrando sus hermosos ojos oscuros a pocos centímetros de mi, haciéndome sonrojar.

- Será mejor que me vaya - Dije alejándome con la mejillas encendidas

Pero el aprisiono mi muñeca con su mano antes de que saltara a otro árbol, provocando que me girara a verlo.

- Ten cuidado, te estaré esperando - Dijo suavemente

Palabras nuevas que han escuchado mis oídos, alguien que espere por mi, no lo defraudare.

- Si, nos veremos en un mes - Dije con una gran sonrisa, el asintió y me soltó.

Salte de rama en rama hasta perderle de vista, sabiendo que quizá el viaje duraría más de un mes, pero quería que no se preocupara por mi.

Seguí por un par de horas hasta llegar al ultimo pueblo, donde vimos al chico rubio, pregunte en varios establecimientos hasta que me dijeron que los vieron salir en dirección a un lugar cercano, pista que me guió hasta otra pequeña locación, a la que tarde en llegar tres días.

Este juego ya me estaba cansando, me remonto a mis días de Anbu, localizando y matando a desertores, trabajo duro, donde en ciertas ocasiones me pregunte las razones de alguien para abandonar su aldea, la primera, por matar a altos mandos del lugar, y la segunda, por libertad, como lo hice yo, bueno por eso, y para encontrar mis propias respuestas de mi pasado.

Mi ultima orden fue localizar a Kisame, y matarlo de cualquier forma.

Simple, pensé.

No sabia que en el proceso conocería a una persona que decía llamarse Madara Uchiha, con una mascara en forma de espiral y el ojo Sharingan, personaje sumamente misterioso, me extraña que haya decidido confiar en el, siendo que no me dio ni una pista de mi verdadera identidad, pero cuando estas en una situación como la mía, aprendes a creer en el más minimo indicio, en una pequeña luz de esperanza.

Tarde cerca de una semana en dar con el rubio, decidí tomar una apariencia falsa para acercarme a el, por lo que use un Jutsu de transformación, algo más potente que los normales para que no me detectara.