Chuuya Nakahara y Dazai Osamu tuvieron una relación casi abierta en la Port Mafia, muchos miembros lo sabían, pero aquel par no mostraba afecto alguno en su trabajo, todo de ellos estaba rodeado de peleas; de todos modos ni siquiera cuando estaban solos mostraban algún tipo de cariño o interés.
Su relación era bastante tóxica, para Dazai y Chuuya lo que existía entre ellos sólo se enfocaba en el sexo.
Desde que se conocieron quisieron demostrar que uno es mejor que el otro, lo de ellos solo era rivalidad, competencia y odio.
Ellos veían su relación como un juego: el que se enamora pierde. No debían sentir nada más que deseo y lujuria.
A pesar de todo, la relación duró un par de años ya que Dazai se fue de la Port Mafia, pero se fue antes de que Chuuya pudiera darle una importante noticia. Una noticia que iba a cambiar la vida de ambos.Época actual.
—¡Dazai date prisa imbécil! —gritó Kunikida ya que Dazai se encontraba acostado en el sofá con su libro favorito en el rostro.
Dazai solo ignoraba a Kunikida mientras pensaba en ir a buscar una chica con quien pasar el rato y tal vez cometer suicidio doble con ella.
—¡No me ignores desperdicio de vendajes! —siguió Kunikida.
Dazai estaba algo molesto por alguna extraña razón y no quería escuchar los gritos de su compañero, lo mejor era no estar ahí.
—Vuelvo en unas horas, no tengo ganas de trabajar —dijo Dazai para luego levantarse del sofá y dirigirse a la puerta.
—¡DAZAI! —gritó Kunikida viendo como este suicida no le hizo caso y se fue.Dazai se encontraba caminando por las calles de Yokohama viendo qué chicas le gustaban físicamente aunque a decir verdad no estaba de gran ánimo para bromear o andar de casanova como de costumbre.
—¡Fumiya! —se escuchó de aquella voz con un tono de preocupación.
Dazai reconoció inmediatamente la voz, era de su ex amado Chuuya Nakahara, se dirigió hacia dónde provenía la voz y pudo verlo, quería molestarlo para levantarse el ánimo, pero lo vio con una niña.
—«Chuuya aún es demasiado joven para tener una hija, aún más para edad que parece tener esa pequeña» —pensó Dazai un poco celoso mientras estaba imaginando muchas cosas.
Siguió observándolo hasta que una mujer apareció y se acercó a ellos. Le dio un beso en la mejilla a Chuuya y abrazó a la niña de nombre Fumiya que pareció estar seria al recibir el contacto.
Dazai estaba muy celoso, pero ¿por qué?, se supone que él y Chuuya terminaron hace años y además su relación era solo sexo; nada de amor.
—¿Estoy enamorado de Chuuya? —Se preguntó internamente al borde de entrar en pánico, algo no estaba bien con él.
Chuuya abrazó a Fumiya y los tres se fueron.
—Debo descubrir quién es esa tipa —dijo Dazai con una voz audible para sólo él.
Más tarde, en la oficina de Mori Ougai.
—Jefe, le encargo a mi hija —dijo Chuuya quien se encontraba en la oficina de Mori.
—No te preocupes Chuuya-kun, tu hija está a salvo como siempre, además Elise jugará con ella —le dijo Mori.Chuuya no podía cuidar a su hija todo el tiempo por su trabajo, así que se la dejaba a su jefe quien se encontraba más tiempo en su oficina y se sabía que al menos ahí se encontraba un poco seguro, salió para hacer un trabajo y entró en su auto, conducía lentamente mientras se dirigía a una dirección X.
Al llegar a su destino bajó de su auto y entra al lugar donde fue citado, no iba a ser una sorpresa que fuera emboscado por un enemigo, estaba preparado para todo.
—¿Qué es lo que quieres con la Port Mafia? —formuló en voz alta en aquella habitación que parecía vacía mientras se preparaba para pelear, seguía cerca de la entrada, pero dio un par de pasos para tratar de visualizar si había alguien con él.
—Quiero hablar contigo —se escuchó esa frase.
Chuuya reconocería donde fuera esa voz, esto lo hizo molestar e intentó irse, pero no le fue posible ya que lo habían atrapado. La puerta cerrada y sin manera cercana de escapar, a parte estaba acorralado y sujetado por Dazai, no iba a resultar nada, sus poderes serían anulados y no podría golpearlo aunque lo intentara, la posición en la que estaba le impedía realizar algún movimiento brusco.
—Suéltame maldito Dazai —forcejeaba Chuuya tratando de irse.
— Escúchame —le dijo levantando la voz.Chuuya se quedó quieto esperando a escuchar cualquier tontería que saliera de la boca de su ex amante, ya estaba fastidiado antes de escucharlo, cuando Dazai bajara la guardia aprovecharía para golpearlo y escapar.
Pasaron un par de segundos de un silencio sepulcral hasta que Dazai reunió todo su valor para hablar, no era fácil para él preguntar sobre algo que no era de su incumbencia y sobre todo lo haría parecer estar celoso lo cual sería algo humillante para él.
—Nunca me dijiste que tenías una hija —soltó Dazai.
Chuuya se estremeció un poco, no sabía que él ya se había dado cuenta de la existencia de su hija Fumiya, su plan era que Dazai nunca supiera que ella existía.
—Yo... —Chuuya no podía hablar, no quería decir nada, temblaba del nerviosismo y miedo, esto no tenía que suceder.
—Te escucho —Le dijo Dazai con paciencia.Chuuya estaba a punto de decirle quien era realmente Fumiya, pero recordó un detalle muy importante.
—¿Desde cuando te importa lo que haga con mi vida? , te fuiste hace años de la Port Mafia y ahora crees que puedes actuar como si nada hubiera pasado, te recuerdo que una vez me abandonaste en un bosque después de pelear con El Gremio, no es de tu incumbencia saber de donde salió mi hija —dijo Chuuya en un tono muy molesto.
—Lo lamento —mencionó Dazai.Esas palabras dejaron impactado a Chuuya, él nunca creyó que escucharía esas palabras, Dazai no era el tipo de persona que se disculpaba por sus acciones, mucho menos las que eran intencionales.
—¿Por qué te disculpas? —cuestionó Chuuya algo avergonzado tratando de evitar querer darse la vuelta para ver la expresión de Dazai, lo tomó por sorpresa.
De forma rápida, Dazai le da la vuelta a Chuuya y sujeta sus muñecas para que no pueda huir.
—Dime todo lo que te ha pasado en estos años... te lo pido, por favor —pidió Dazai mientras se acercaba cada vez más a Chuuya, su mirada hipnotizaba al pelirrojo, esos ojos lo devoraban por completo, le imploraban responder lo más honesto posible.
—No tengo nada que decirte —ríe levemente—, no me digas que te has enamorado de mí, ya no puedes manipularme como antes; ¿no crees que te tardaste 5 años en eso?
—¿Acaso tú si sentías algo por mí? —le preguntó Dazai a su ex compañero/amante quien lo seguía mirando con burla, pero claramente al hacer la pregunta sintió que él dio un ligero brinco.
—Tal vez, pero lo superé, dejaste la Mafia antes de que pudiera decirte una importante noticia —le dijo Chuuya de forma desinteresada sin pensar, era obvio que se arrepintió de lo último.
—¿Qué querías decirme? —Dazai quería escuchar una confesión de parte del pelirrojo.
—No importa, ya no más —Chuuya lo empuja ya que lo vio más relajado y logró escapar.Dazai mira como Chuuya sube con rapidez a su auto y se va; él solo sonríe levemente mientras camina hacia su casa sin prisa; él tenía un plan: conquistar a Chuuya, descubrir su secreto y tal vez hacer que termine con su novia. Había una posibilidad de que le pida que Chuuya deje a su, hija, pero según Dazai, él no era tan desalmado. Sus planes nunca salían mal aunque... sus sentimientos estaban involucrados esta vez.
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TE NECESITO
FanfictionUna relación de solo sexo entre Dazai y Chuuya no resultó bien. Cada acción tiene consecuencias y para ellos fue una niña de nombre Fumiya Nakahara; la hija de ambos. Dazai no se enteraría sobre la existencia de su hija hasta 5 años después donde qu...