Sin dudas ni celos

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Desperte y estaba todo oscuro me dolía la cabeza me quise mover pero algo no me lo permitió volte y era Juls que me estaba abrazando con fuerza, estábamos en la cama no sabía cómo es que había llegado hasta acá además tenía mucha hambre, según el reloj despertador pasaban de las 3:00am moví un poco el brazo de Juls para ir a la cocina abrí el refri y saqué un jugo y lo necesario para preparar sándwich me senté a comermelo mirando a la nada

-Te sientes mejor?-Juls se sento frente a mi

-Me duele la cabeza, tengo mucha hambre y no recuerdo lo que pasó después de frenar

-Imagino, quedaste en shock me asuste mucho cuando te vi así, no decias nada solo mirabas al frente cuando te iba a llevar al hospital me dijiste que solo querías descansar así que maneje hasta acá te puse la pijama y te quedaste dormida, sentí que te levantaste pero no podía despertar, estoy muy cansada-se acercó para que le diera de mi sandwich-te duele la cabeza?-asenti, pasó una pierna por encima de las mías para quedar sentada frente a mi, tomo mis cabeza entre sus manos y comenzó a masajear mi sien cerré los ojos y descanse mi frente en su pecho al estar así podía inhalar el aroma que salía de ella estar asi con ella me daba mucha paz mi dolor empezó a aligerar.

A mi mente llegaron dos temas que no quería tocar pero esto apenas iba empezando y que mejor que hablarlo en un momento de paz como este.

-Chiquita se que esto apenas empieza y quiero que estemos bien-espero a que continuara-necesitamos hablar acerca de Ale y Sergio.

-Tienes razón, te escucho-levante mi cara para mirarla a los ojos.

-Ale en estos dias ha estado muy cerca de mi, pero sólo como apoyo tu dijiste que ella quiere conmigo-asintio-pero ella no ha dicho ni intentado nada y no creo que lo haga porqué ella sabe que te amo-espere su reacción podía ver en sus ojos como iba analizando todo lo que había dicho.

-Entonces ya no la ves sólo cómo tu asistente?-su pregunta era muy directa, no parecía molesta y yo no quería mentirle.

-No, ahora la veo más cómo mi amiga- cerré los ojos esperando su reacción.

-Ey mirame-abrí los ojos-entiendo que estos dias te lastime y de alguna manera yo te acerqué más a ella, tu cambiaste tu vida Val tu estabas acostumbrada a salir de shopping, de antro y aquí no tienes amigas y ella te apoyo cuando lo necesitaste yo no quiero ser la tipica novia celosa quiero poder confiar en ti y que tu confies en mi, si tu confias en ella pues yo tambien-sonreí y me acerque para darle un besó.

-Gracias amor, ahora le toca a usted señorita.-le dije tocando su nariz con mi dedo.

-Pues el otro día fue a mi casa y me pidió que te convenciera de que regresaras al hotel de la ciudad y nos dejarían en paz, le dije que nos habíamos peleado para que te dejaran de molestar, pero supongo que no se rendirán por lo que pudimos notar ayer.-

-Pues rendirme para mi no es una opción así que no les será facil-le guiñe un ojo.

-Bueno ahora que terminamos de comer tus sándwiches que por cierto te quedan muy ricos-reímos-podemos ir a la cama tengo sueño y quiero dormir.

-Pues yo tengo otra idea de que podemos hacer en la cama sin dormir, ademas esta pijama es muy provocativa-le dije juguetona bajando mi dedo por su escote, traía una bata color tinta de seda que le llegaba hasta los muslos resaltando sus hermosas piernas.

-Suena interesante, vamos?

La agarré de la cintura y comencé a besarla ella pasó sus manos en mi cuello y profundizó el beso, sus besos siempre provocaban que mi cuerpo se incendiara al instante, al separarnos nuestras respiraciones estaban agitadas, levanto la parte de arriba de mi pijama y beso mi cuello, con mis pies recorrí la mesa para poder pararme con Juls abrazando mi cintura con sus piernas así subimos a la habitación.

     En la última semana en el hotel todos estaban muy sonrientes.

-Buenos días señorita Valentina-Silvina trabaja de mucama en el hotel llevaba más de 20 años en el de la ciudad y ella es del pueblo desde que supo que se iba a abrir pidió su traslado y yo con mucho gusto me la traje conmigo.

-Hola Chivis, que tal los nietos?

-Bien gracias ya sabe son bien vagos...-fue interrumpida por una apurada Alejandra.

-Hola Chivis, Valentina que bueno que ya llegaste la junta empieza en 5 min.

-Alejandra alguna vez te he dicho lo pesada qué te pones a veces? -rodó los ojos vivía preocupada por el trabajo.

Se abrió el elevador y cuando Chivis salió volteó a decirnos- A la señorita Ale le hace falta un amor como a usted, para que se relaje- Ale comenzó a reír y se cerró el elevador.

-No te rías, como lo sabe? se supone que tú eres la única que lo sabe, acaso se te soltó  la lengua?-llevaba una semana con Juls y habíamos decidido no decir nada hasta que fuera más estable la relación.

- Vale por favor antes eras señorita seriedad y desde que están juntas te paseas por todo el hotel con esa sonrisa de idiota  enamorada todo el día, así que si alguien le echas la culpa es a ti.

-Tanto se me nota?

-Si, por cierto otra vez llegaste tarde que, sigues sin poder dormir?-soltó una carcajada y mis mejillas se incendiaron.

Toda la semana en casa tenía bastante actividad fisica nocturna con Juls, claro que no lo había mencionado pero ella lo intuía y no paraba de burlarse. Pero la verdad es que no podía estar cerca de Juls sin que mi cuerpo se abalanzara sobre ella, pasamos por casi todos los rincones de mi casa, supongo que esto algún día se controlaria pero mientras lo disfrutábamos al máximo. Y no contar de que Juls había descubierto que le encantaba quitarme la blusa del uniforme, tanto en las noches como por las mañanas así que no dudaba en quitarla y una cosa llevaba a otra y por eso se me hacía tarde.

-Jajaja muy chistosa, quiero que estés en la junta conmigo, mandaron correo de los temas que vamos a tocar?

-Nop

-Ok vamos.- La junta sólo duro media hora, el Sr. Ortiz era el gerente de zona nos informo que habían hecho unas inspecciones de rutina y que el mío había sido el mejor y habría una visita a nuestras instalaciones de varios gerentes de la zona y entro ellos venian los innombrables que tan mal me caían asi que me tenia que preparar mentalmente para recibirlos.

-No te agradó la noticia verdad?-Ale me sabía leer por mis estados de ánimo.

-No, neta Ale no los soportó. Sólo espero que no intenten nada mientras estén aquí.

Tocaron la puerta, Ale abrió y era Juls

-Hola-Aun no se llevaba del todo bien con Ale, aunque le había pedido perdón por como le habló, Ale en cuanto la veía se escabullia a su escritorio.

-Hey, pasale-me acerqué a recibirla y la bese hasta quedarnos sin aliento-que agradable visita.

-Pues después de que te diga a que vine no te va a parecer agradable.-ya había recibido una mala noticia y no quería otra más por el momento

-Que paso Juls no me asustes.

-Me hablaron para una entrevista de trabajo y es para mañana-claro que me daba gusto que trabajará pero eso nos tendría alejadas por lo menos dos horas diarias y no me quería separar de ella

-Mira Val no es nada seguro aún pero necesito trabajar.

-No, no te vayas yo te puedo mantener-le hice un pucherito y me abrazó.

- Tontita, tengo que trabajar.

-Te entiendo, pero te voy a extrañar mucho.

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