La luz de mi oscuridad

1.2K 157 10
                                    

Estaba en el suelo la luz traspasaba mis parpados, sentía mi piel caliente por los rayos del sol, mi cara hinchada por los golpes todo mi cuerpo estaba débil al recargar mi mano me dolía bastante como pude me senté estaba bajo un pequeño barranco al parecer me habían tirado por el, me quedé sentada tomando fuerza para levantarme delante de mi sólo se veían árboles tenía que buscar ayuda.

Poco a poco fui avanzando no había nada por lo cual guiarme así q decidí caminar en dirección al sol.

Dure horas caminando, me sentía bastante cansada y decidí buscar un árbol para sentarme y descansar un rato. Mis párpados me pesaban no sabía si era por los golpes o el camino pero me sentí muy cansada mis ojos se cerraron sin poderlo evitar, me desperté cuando el sol estaba de mi lado izquierdo por lo que calculé y faltaban unas 4 horas antes de que cayera la noche sobre mi espalda. Me pare y seguí caminando. El tiempo pasaba muy rápido y yo no avance mucho a lo lejos escuche el murmullo del agua, decidí apurar mi paso para llegar antes del anochecer mis pasos eran lentos pero era todo lo que mi cuerpo me permitía avanzar llegue a una gran roca no sabía que clase de animales me podría encontrar tome una rama y estaría en vela la mayor parte de la noche, me senté de espaldas a la roca. Perdí la noción del tiempo y volví a caer en la pesadez de mis párpados, al despertar el sol estaba casi por encima de mi agudize mi oído para guiarme por el río cuesta abajo lo usaría como guía en algún momento desbordaria en algun lago o cruzaria una carretera, ahora entendía porque mi papá insistió en que fuera a clases de boys scouts, aprendí cosas de supervivencia las cuales resultaban útiles en estos momentos. Llegue al río no sabía que tan profundo estaría así que tome una rama y la hundi al parecer la orilla no era muy profunda pero no estaba en condiciones de meterme a bañar por la poca fuerza que tenia no queria nadar en corriente, me acerqué y me lave la cara el agua era fresca, sabia que no era lo más sano pero mi organismo me pedía agua así que tome un poco mi garganta me lo agradeció, seguí caminando por la orilla ahora el sol estaba a mi izquierda y no tardaría en volverse a ocultar, más adelante pude ver un gran árbol decidí tomarlo como un refugio nocturno, mi cuerpo ya me pedía otro descanso. Llegue al árbol y tome un poco más de agua del río, me recargue en el tronco y poco a poco el cansancio me volvió a vencer. Desperté en la oscuridad se escuchaban ruidos un poco lejanos.

-Hola? Aquí estoy - grité lo más fuerte que mi cuerpo me lo permitió. Puse atención pero no volví a escuchar nada tal vez fue parte de mi imaginación, bajo la luz de la Luna alcance a ver varios pares de ojos brillar sólo son búhos pensaba para mi pero no estaba segura de lo que podrían ser me quedé despierta la mayor parte de la noche pero casi para el amanecer mi cuerpo no pudo más y me pidió más descanso. Desperté y mi estómago me pedía comida necesitaba alimentarme, dicen que nunca se valora algo hasta que lo pierdes y ahora es cuando me doy cuenta lo que es despertar y poder comer, mi cuerpo necesitaba descanso para recuperar energía por la falta de alimento, según mis cuentas habían pasado 3 días  desde que me golpearon lo más probable es que me estuvieran buscando pensé en Juls en mi familia que estarían pensando que me habría pasado algo pues si, si me paso tal vez si hubiera hablado con Juls pero el hubiera no existe. Necesitaba seguir como le dije al chino, no importaba cuantas veces cayera, por Juls me levantaria y aquí estoy de pie para continuar luchando aún cuando la corriente esta en contra, al no consumir alimento, mi cuerpo se cansaria con más facilidad pero el agua me ayudaba bastante. Llevaba caminando buen rato cuando paso algo que jamas Imagine al dar un paso caí unos 3 o 4 metros lo peor de todo es que al caer me lastime el pie, el lugar parecía una cueva, no era oscuro pero si se sentía la humedad en el lugar. Mire a mi alrededor y busque algo que me ayudará a salir tenía una abertura de donde provenía un poco de luz, Estaba segura que no cabría ahí, aun asi lo intente pero el espacio era demasiado angosto siempre me había gustado mi estatura pero justo hoy renegaba de ella, además el dolor del pie aumentaba a cada movimiento que hacía, termine por sentarme y gritar, sabia que nadie me escucharia pero grite, grité por desesperación, por rabia, por dolor, era tanto lo que sentía y estar atrapada en este lugar empeoró todo al menos arriba podía caminar pero atrapada aquí nadie jamás me encontraría. Mis pensamientos me jugaban malas pasadas creía escuchar cosas para terminar dándome cuenta que era el mismo eco que yo producía. Al no recibir alimento mi cuerpo se debilitaba cada vez más y más aun que ya no podría tomar agua, sabía que podría durar sin comer pero sin agua no duraría mucho y sin ayuda jamás podría sobrevivir a esto mis únicas salidas estaba muy por encima de mi y otra que no cabía. No me quería rendir pero no veía manera de salir, guardaba silencio para saber si escuchaba algo pero nada. Pasaron 2 días más y mis energías para mantenerme despierta eran nulas, no podía más con la sed mi garganta, mi cuerpo requería de fuerzas que ya no tenía, por las noches bajaba la temperatura y era aún peor aquí dentro. Perdí la cuenta de los días que habían pasado no debí moverme del lugar seguro ya me habrían encontrado, mis parpados pesaban con mucho trabajo abrí los ojos al lado de mi encontré una botella con agua y un paquete de mis galletas favoritas con la poca fuerza que me quedaba abrí la botella y le di unos pequeños sorbos, la tape y me volví a quedar dormida. Escuche ruidos pero no podía abrir mis ojos, sentí un popote en mi boca y tome agua, tenía mucha sed. Alguien hablaba no sabía que decía pero alguien estaba a mi lado. Me dio un pedazo de comida y poco a poco lo comí cuando termine me dio más agua.

La ConexiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora