Se siente a lo lejos un tick-tock. Unas manecillas que avanzan lentamente, y se unen a mi pulso con cada bocanada de aire que capturo del exterior. Es como si una gran y densa ola se levantara frente a mi; imponente pero sin chocarme aun. Simplemente se mantiene ahí. Como cuando un ave planea en el aire asechando a su presa, esperando el momento preciso; ese instante en el que la víctima, ignorante de su destino, va de un lugar a otro con naturalidad. Sus manecillas también marcan aquel.desagradable tick-tock, pero uno con cierta melodía funesta. El tiempo corre, se agota, y solo en cuestión de segundos puede cambiar. El ave desciende y se hace con su comida.
Y así como el pez, me muevo frente a la ola amenazante, ignoro lo que seguirá. Mientras, no tengo otra opción, sino que escuchar ese punzante tick-tock, marcando cada uno de mis pasos...
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Lo que soy
Teen FictionTal como el título lo dice. Acá no hay mucho que leer más que la persona detrás de sus letras.
