El Adios

Capítulo 15

Kaiba sonreía ante su victoria sabiendo que ninguno de esos tres CEOS  fastidiosos volverían a molestarlo con aquel tema

- Kaiba vas a contestar? O cuelgo?

-Perdon cachorro, solo quería escuchar tu voz para dejar un punto en claro dentro de una reunión, te veo esta noche

Sin más colgó de inmediato notando que el chico dado estaba a unto de hablar con el rubio y sonrió al notar la cara de molestia que este poseía

-Muy bien, habla de una vez Kaiba, como fue que te casaste con Joey siendo que ninguno de los dos se soporta ?

-Te equivocas, desde mi torneo en ciudad batallas, Wheeler me declaro lo que sentía durante las finales...desde entonces ya había decidido que el sería el único en compartir mis excitos junto con Mokuba, yo soy quien a decidido casarse con el cachorro y ahora, si ya terminaron de fastidiar me, les pido que se retiren

Pegasus sonrió ante la arrogancia del castaño mientras los otros dos gruñían apretando los puños, sin embargo el peliplateado sonrió al ojizafiro

-Muchas felicidades Kaiba, por fin conseguiste a tu igual, ya solo te falta la otra mitad del trabajo

El castaño frunció la mirada al notar la voz juguetona del amante de los cartoons así que mientras lo observaba trato de calmar su furia

- a que te refieres fenómeno?

El peligris sonrió con superioridad mientras sacaba una revista con la foto de una familia en la portada y se la lanzaba para que la viese

-Ya solo te falta algo simple mi querido amigo, uno o dos herederos para la corporación, o es que acaso...ya tienes hijos ilegítimos para que Wheeler no sufra la alegría de la adopción o de la infidelidad?

Kaiba apretó con fuerza aquella revista, el no deseaba infantes en su vida ya que los creía molestos pero desde el inicio Pegasus tenía las de ganar, ya que es verdad que una empresa familiar no solo debía crecer en ganancias sino también en descendencia, los compradores de cada artículo dado por Kaiba Corp siempre eran influenciados por el dichoso tema de una familia feliz, pero como lograr eso? El jamás fue de la idea de casarse, salir con alguien y mucho menos la de ser padre, para el su vida era Mokuba y cuando dejase de respirar la empresa pasaría a manos del menor

-No creo que un hijo sea conveniente Pegasus, en especial porque estoy recién casado con Wheeler además, no creo que él tenga mayor capacidad de cuidar a un bebé al igual que yo, yo manejo una empresa multimillonaria y el recién inicia su carrera como duelista profesional, no es momento para tener hijos propios así que olvida esa estúpida idea!!!

-De verdad crees que el pequeño Joey no desea un bebé Kaiba?

No solo el castaño, sino que los otros dos que conocían al rubio se quedaron pensativos recordaban como Joey protegía a Mokuba, como sentía empatía por los niños a los cuales veía llorar y como era capaz de callar a otros sin importarle si poseía poder político o no con tal de defender a un niño sobre todo como cuidaba de serenity

Pegasus sonrió al ver que no sólo a duke y a sighfrid los ponía a pensar sino que Kaiba lo veía fijamente sin decir nada dándole la razón con ello

-Bien....discute eso con el pequeño cachorro

-Yo soy el único que puede llamarlo así Pegasus, no voy a permitir que ni tú ni nadie lo llame sino es por su nombre, entendido?!!

-Quien lo diría, muy bien, me disculpo Kaiba, pero eso no cambia el hecho de que no sólo necesitas herederos sino que ya deberías hacer público tu matrimonio y que mejor que con eso

Saco un sobre decorado de forma muy llamativa con dos pases en el interior haciendo torcer la boca al castaño

-en unos días es mi fiesta anual de beneficencia así que puedes presentar a Wheeler allí en sociedad y espero ustedes dos lleven pareja o tendré que comprar sus acciones hasta poseer sus  empresas, bueno ya que lo han entendido ...me retiro

El peliplata termino de dar las invitaciones y salio de alli mientras Duke y sighfrit meditaban sobre qué hacer ya que Pegasus nunca amenazaba en vano al igual que Kaiba, por su parte el castaño salió de allí y volvió a su oficina, tendría que hablar con su cachorro de la fiesta, pero del bebé era otro asunto aparte