[ nineteen ]

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Yoongi había buscado en cada expediente sobre el mostrador la dirección de Jungkook, pero no había tenido demasiado éxito. Era muy común que el teñido los guardará en su propio consultorio bajo llave, para evitar perder los datos de sus pacientes en caso de que alguien intentará entrar.

Incluso aunque hubiese querido ir a buscar a Hoseok en mitad de la noche el mismo Taehyung no se lo hubiera permitido, Yoongi debía de ser coherente, algo podía pasarle a esas horas en la calle, y las cosas se tornarían de la peor forma.

No pudo dormir demasiado tampoco a pesar de la insistencia del híbrido de tomar al menos una pequeña siesta junto a él, quién cayó dormido sin despertar el resto de la noche debido al cansancio en su cuerpo, aunque gracias a su insomnio Yoongi pudo cuidar de él, notando que le costaba trabajo respirar algunas veces en que su corazón se aceleraba.

Siguió pensando en cómo es que le pediría perdón a Hoseok por la manera tan egoísta en que había actuado antes, sabía que lo había lastimado terriblemente, pero lo que más le dolía pensar era en que el híbrido había sido más considerado con él de lo que merecía.

Hoseok ni siquiera había armado un escándalo cuando Jungkook lo llevó consigo, no quiso despedirse porque sabía que crearía más problemas de los que ya había. Se había ido sin un solo pero, incluso sabiendo que su vida dependía de estar allí junto a él.

Yoongi no podía nombrar lo que sentía, incluso habiéndolo pensado por más días de lo que aparentaba, una parte de él seguía siendo irracional sobre sus sentimientos, esa parte que le dictaba que sentir algo por alguien de su especie no era realmente lo correcto, pues los híbridos no eran muy diferentes de los animales comunes.

Era esa parte quien siempre lo detenía de todo, de decirle a Hoseok lo hermoso que era tanto físicamente como lo era en su corazón, de abrazarlo por las mañanas cuando el híbrido se encontraba mirándolo hasta que despertará, recostado con su cabello revuelto y sus ojos brillantes.

Era esa parte de él que se negaba a admitir que Hoseok lo había logrado enamorar en un número contado de días, con nada más que su cálida presencia en su vida, era esa parte de él que estaba aterrada de amar al híbrido porque era desconocido en su vida cotidiana.

Pero no iba a permitir de nuevo que sus miedos le arrebataron a Hoseok, ya había sido demasiado cobarde antes para detenerlo, no iba a dejar que la vida se lo arrebatará una vez más.

Yoongi esperó con paciencia a que el reloj marcará las ocho por la mañana, que era la hora en que Kihyun llegaba al lugar, a cada minuto de retraso sentía que el nudo en su estómago se volvía más grande. 

Taehyung seguía recostado, y él tenía un par de toallas en su cuerpo debido a la fiebre que de pronto lo había atacado -- ¿Estás seguro de que quieres que te deje aquí? --preguntó Yoongi al escuchar al híbrido quejarse por lo bajo-- puedo quedarme a cuidarte, puede esperar.

-- No, no puede esperar más --el chico tomó la mano del humano y le sonrió con esfuerzo-- Yoongi, él debe de estar peor que yo, el lazo que cree con Jungkook no es ni siquiera la mitad de fuerte de lo que es el tuyo con él, ve y búscalo, y dile cuánto lo amas antes de que sea demasiado tarde.

-- Taehyung, gracias. Le diré a Jungkook que venga aquí apenas lo encuentre, no empeores por favor --Yoongi dejo un beso en la frente del híbrido y acarició su cabello con un inmenso cariño que hizo sonreír al chico-- te quiero.

-- Date prisa.

Yoongi salió de su consultorio finalmente al escuchar la puerta de la entrada abrirse, sintió el alivio recorrer su cuerpo al ver a Kihyun entrar junto a Minhyuk -- Kihyun, necesito la dirección de Jungkook, por favor, es urgente.

hobi ;  hopegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora