capitulo 14

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— ¿de quién corres? —dice, y me separo,  y creo bajar la mirada, por su reacción de lastima — ¿Qué paso?, ¿acaso ellos intentaron lastimarte?

— no solo es, que no hay ningún problema estoy bien— digo mostrando una sonrisa

— ¿has visto a Oscar? — dice con una mirada reprendedora

— No, no lo he visto desde el último día de entrenamiento— para ser mi mentira me sale demasiado bien

— ¿enserio? — pregunta sospechando de mi

— sí, ¿tú lo has visto? — intento contestar lo más segura que puedo

— No últimamente, es mi aliado— dice con una expresión muy extraña— oye, ¿te gustaría ser nuestra aliada?

No, no me gustaría, en primera he matado a Oscar y en segunda esto aquí es muy extraño

— he claro, si, me gustaría — digo titubeando

— está bien, es mejor alejarnos de aquí, el rio está creciendo demasiado

— sí, claro— digo con falsedad

Caminamos con un paso rápido, lo más lejos posible

— ¿Por qué tan rápido? — dice entre sus intentos de respirar normalmente

— solo me quiero evitar problemas

Lea deja su mirada fija en un punto, cuando volteo no veo más que hojas moviéndose

— ¿Qué pasa? — pregunto

— Nada— voltea a verme— ¿tienes hambre?

Hasta el momento que dice la palabra hambre, me doy cuenta en que mi pansa está  gruñendo

— creo que algo de comida, no me haría daño

— está bien iré por ella, no te muevas

Desaparece ente la hierba, y me quedo nuevamente sola en este lugar, me quedo un rato sola bueno viéndola bien ya es mucho tiempo que quedo sola

— ¿a quien crees que me encontré? — dice Lea, saliendo tras ella Oscar, con una mano en el estómago, y su playera llena de sangre

— Hola de nuevo preciosa— dice con palabras llenas de odio

— ¿cómo es que…….?— no puedo decir más, porque la verdad no sé si Lea este de su lado o del mío y más vale aparentar

— ¿Cómo es que he seguido vivo? — dice, y creo que ya estoy muerta, porque ¿qué puedo hace si son dos contra una? — mira gran pregunta, y la verdad no tengo una respuesta clara, solo que ahora busco venganza

— Maldición estoy muerta— me digo en voz alta

— bueno no hay nadie que te salve, por más que grites. Hasta donde yo sé, te has peleado con tus amigos ¿verdad?

— ¿una disculpa arreglaría todo?

— no lo creo, tuviste tu tiempo para decidir, fue una muy buena opción, pero bueno, me traicionaste

— bueno, desde un principio, nos unimos, nosotros y otros poco más y todo para ir contra tu distrito— dice Lea— pero viendo cómo va el asunto creo que mejor primero vamos contra ti

— Será un honor— respondo intentando frustrarlos

Cuando acabo de decir mis palabras, alguien tomas mis dos brazos sosteniéndolos contra mi espalda, quedando inmovilizada

— ¿no creen que esto es trampa?, son tres contra una

— primor, todo el mundo está lleno de trampas, ¿tú conoces alguna? — Hace una pausa para ver si respondo— creo que no, pero bueno, secretos, mentiras, problemas y demás se irán con tigo a la tumba— dice mientras toma un cuchillo de mi cinturón y juguetea con él, después me mira y me lanza el cuchillo, que crea un gran dolor en mi hombro, y junto a él la sensación de un líquido recorriendo parte de mi brazo, al parecer el líquido es rojo. Y vuelvo la mirada hacia el— ¿no te dolió?, mm bueno intentemos esto otra vez— quita el cuchillo de mi brazo, y otra oleada de dolor me recorre el cuerpo, y me lo vuelve a enterrar. Grito pero creo que la presión aumenta más el dolor que esto me causa— mira tuviste piedad de mí, al no asegurarte de mi muerte, por eso, no te matare— me sueltan y el dolor no me deja sostenerme en mis pies y caigo— tu arma es el arco, y sin un brazo no encuentro la posibilidad en que sigas viva— se da la vuelta y la persona que me sostenía lo sigue al igual que lo hace Lea.

A pesar de mi dolor alcanzo a tomar mi arco y una flecha, con micha dificultad me levanto y preparo la flecha

— Te hubiera matado, y también mejor me hubieras matado— intento decir con un tono fuerte y sin dolor

Voltea y lanzo la flecha que cae justo en su pecho, sus compañeros levantan sus armas y corro, lo más rápido que puedo que no es mucho.

Con dificultad saco, otra flecha, volteo y le disparo lamentablemente o afortunadamente a Lea, su compañero me ve y se aleja.

Vuelvo quedar como al principio, sola, el dolor de mi brazo ha cubierto todo mi cuerpo.

— tiene razón, sin un brazo no encuentro la posibilidad de tomar el arco, y sin arco, no imagino como sobrevivir sin el— me digo en voz alta — ¡soy una idiota! ¡Soy una estúpida! — repito mientras me golpeó la cabeza con un tronco, y caigo con mi espalda recargada en el— y ahora, ya no se en quien confiar, ni siquiera en mi— termino de decir y empieza a llover, ¿Qué estará pensando mi abuelo en teste momento o mejor dicho que estará haciendo?— me quiero ir de aquí, pero así nunca acabare mi propósito y lo peor aún, es que ya no sé si seguir con este juego, el juego que de cualquier forma va a terminar con migo— suenan dos cañonazos y sé que esa fue mi alarma para poder descansar en lo que lleva, en paz. Y cierro mis ojos.

Make It Possible (los juegos del hambre)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora