1.- Mario es un muchacho a quien le parece que la vida no tiene sentido. Todo lo que ocurre le da igual. Es lo que él deja ver a quien lo trata, pero en conversaciones con él, percibo que hay algo más.
Mario es hijo de un matrimonio concebido bajo los patrones normales de la sociedad. Sus padres Juan y María contrajeron nupcias e inmediatamente llegó la maternidad para María. Tuvo su primer hijo y en poco tiempo procreó ocho más, para un total de nueve hijos. Mario es el número ocho. Ya en esta etapa le aconsejan a su madre que si vuelve a salir en estado debe ligarse, ya que son muchos. Ella asintió y pasado unos 3 años vuelve a quedar embarazada. Así que tomó la decisión de la cauterización tan pronto naciera la criatura en gestación.
Entonces la madre de María se ofreció a cuidar al nieto (Mario) hasta que su hija se recuperara, pero pasó el tiempo y no buscaban a Mario. La abuela lo inscribió en el Preescolar y, ya los tíos asumen compromiso de llevarlo, buscarlo y hasta comprarle vestimenta; era un hermanito, no el sobrino.
Pasado cierto tiempo unos siete años, la abuela enfermó y ya no podía prestar atención al menor. Los tíos trabajaban, estudiaban; así que decidieron llevarlo con la madre.
María recibió al chico, pero éste no logró adaptarse a la familia. Y causó dificultades en la relación con los hermanos.
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Mario, un muchacho, que no aprendió a vivir
Short StoryUn muchacho que no aprendió a vivir nace de una vivencia con un joven que se veía triste, desorientado y con poco interés por situaciones y cosas que a otros jóvenes de su edad les atraían. En conversaciones observé que necesitaba atención, afecto...