Parte 3

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Los días pasaron y todos los días iba a la clínica a hacerse controles de rutina, Shindong entendía que era importante que se controlara pero esto le parecía demasiado, lo único bueno era que los mareos y esos síntomas que lo dejaban mal se empezaron a espaciar y ahora solo los tenia por la mañana, el doctor le había recetado algunas vitaminas y cosas que ayudarían al desarrollo neurológico del bebé, al final no le habían hecho ninguna eco-grafía porque su nuevo obstetra el Dr Oh, dijo que todavía era muy temprano que debían esperar un par de semanas más hasta que poder conocerlo y escuchar su corazón.

Por las noches ya se había hecho costumbre que Siwon fuera a su habitación, solo por un par de minutos le acariciaba el vientre aunque seguían sin hablar, era su momento favorito del dia y Shindong agradecía que Siwon volviera cada noche, era su momento y aunque no se engañaba sabía bien que durante ese momento solo eran ellos dos.

Aún se le dificulta estar cerca de HeeChul, porque lo incomodaba además HeeChul había empezado a despertarlo por el embarazo, Shindong entendía que lo hacía por miedo a lo desconocido, y eso que todavía no sabía quién era el padre del bebé pero escuchar como lo maldecía cuando no estaba Siwon ya lo estaba cansando.

Otra cosa que lo molestaba era el constante acoso de sus compañeros por saber quién era el padre del bebé, ya no sabía cómo decirles que no les importaba y que si iban a la casa de su padre a molestar los iba a castrar a todos juntos.

Min se había vuelto su fiel compañero, siempre habían sido buenos amigos, pero ahora Min se había tomado el papel de padre y cuidaba de él y de su bebé, no lo dejaba cansarse demasiado, le daba las vitaminas a las horas acordadas, durante las comidas no dejaba de darle cosas saludables. Kang se reía de él y le decía "Eso que el niño no es tuyo, que si lo fuera no dejarías a Shin ni ir al baño solo", todos reían, todos menos Siwon.

Shindong sintió unas ganas locas de comer chocolate con menta, su cuerpo y mente se lo pedían a gritos y su boca se hacía agua, se levantó y fue a comprar un par de barras al supermercado a dos manzanas, contento con su compra volvió al departamento comiendo un poco del chocolate, pero no le supo del todo bien, algo le faltaba pero no sabia que era, eso no lo dejaba de molestar, cuando regresó al departamento noto que había alguien en la cocina, a medida que entraba en ella el olor a tierra húmeda y menta de Siwon lo fue llenando y sonrió.

Siwon estaba sentado comiendo unas galletas saborizadas con cara algo molesta y fue ahí donde su cabeza supo que era lo que quería, fue a agarrar un tarro y lo puso en el microondas para derretir la tableta de chocolate con menta, le sonrió a Siwon que lo miraba atento, agarró una silla y se sentó enfrente de Siwon cuando el microondas terminó.

Sin decir nada agarró una de las galletas saborizadas con romero y lo sumergió en chocolate con menta derretido, cuando lo llevo a su boca y lo saboreo sintió como explotaba el placer dentro de su boca, gimió disfrutando el sabor "o si esto es y quiero más", le hizo señas a Siwon que no dudo en hacer lo mismo y al probarlo la cara de placer fue tan grande que Shindong sonrió, empezaron a comer a la par, hasta acabar el chocolates y las galletas.

Shindong se paró para lavar el tarro y Siwon aprovechó para tocarle una vez más el vientre, sonrió y dejando el tarro de lado el también aprovecho a tocar a su hijo, mientras de manera mental le decía "Pequeño, ven con fuerzas, te quiero y siempre voy a quererte, prometo hacer lo posible porque tu otro padre esté presente en tu vida", con un suspiro se separaron y así como todas las noches sin decir nada cada uno se fue a dormir.

Todos los días durante los ensayos tomaban más descansos que lo de costumbre para que Shindong no se sobre exigiera. Durante uno de los descansos Min sacó un paquete de chocolate con menta mientras Shindong agradeció, pudo ver a Siwon sacó su paquete de galletitas saborizadas con romero, sin mirarse tan siquiera levantaron levemente la porción que tenían en sus manos como diciendo un brindis y comieron, Shindong volvió a sentir que le faltaba algo pero ahora no podía ir a pedirle a Siwon galletitas porque Heechul armaría un hermoso escándalo.

En SilencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora