Diecisiete.- Duo Lunaris.

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-Quiero a hyung...-dijo Yugyeom dando vueltas por la habitación como un demente mientras los espasmos en su pecho lo sacudían cada tanto de dolor. Bambam lo miraba sentado en el suelo con la espalda pegada a la puerta. Estaba agotado.

-Jinyoung volverá mañana o pasado.-le dijo al menor.

-Esto no puede estar sucediendo. Yo sabía que no debía involucrarme con ustedes pero vi a hyung acercarse a Tuan con ese brillo en los ojos y luego estuvieron mis sentimientos hacia ti. Y...ahora soy esto.- se sacudió en su lugar y la ola invisible que desprendió sacudió a Bambam contra la puerta con fuerza.

-¿Hubieras preferido morir? ¿Imaginas cómo estaría tu hermano si eso hubiera pasado? No podía dejar que muriera delante de mi así, Yugyeom.- se sostuvo la cabeza que fue azotada contra la puerta.

-¿Y ahora qué? He visto películas, Bambam. Cada vez que esté con mi hermano o gente voy a querer comerlos porque no estoy acostumbrado a contener las sed. Incluso ahora, puedo sentir ese sonido de sangre correr por las venas de alguien lejano aquí. Y quiero salir y no...no...- Bambam intentó levantarse para acercarse a él.

-Lo siento, Yugyeom. Creí que esto sería lo mejor. ¿Quieres que te mate y nos deshacemos de tu mierda de una vez?-masculló enojado. Aceptar el cambio no era fácil pero no podía permitirle al menor que le lanzará mierda cuando él estuvo tan preocupado de perderlo. Hizo lo que pensó mejor para él. Morir joven no podía estar en el destino de Yugyeom. El menor lo miró con los ojos volviéndose fuentes de agua salada suspiró.

-Estoy asustado.- dijo Yugyeom. Bambam caminó hasta él y acarició su mejilla.

-Lo sé. Soy quien más te entiende, Yugyeom. Esto es algo que no te da derecho a elección. Perdóname por haber elegido por ti.- dijo Bambam, sus mejillas se volvieron rojas debido a la mirada de ojo rubíes de Yugyeom.

-Está bien... Creo que yo he sido el imbécil ahora. Mi cuerpo se siente extraño, casi vacío.- dijo Yugyeom. Sus ojos lo miraban intensamente, quizás no era intencional pero eso generaba demasiado en Bambam.

-Es normal. De hecho, lo estás soportando bastante bien. Cuando encontramos a Jeongin nos dio gran trabajo por dos días hasta que su frágil cuerpo aceptó el cambio. Lo que corre por tus venas es veneno ahora mismo. Un veneno que es mortal para ti y por eso necesitas beber sangre, es lo único que te mantiene con vida...- dijo Bambam. Yugyeom caminó lejos de él y se dirigió a un espejo de cuerpo completo para mirarse.

-Me puedo ver... -Bambam comenzó a reírse.

-Has visto demasiadas películas... No hay tal cosa como no reflejarse, seguimos estando hechos por materia. No existe cosa como no poder estar a la luz del sol, de hecho, no nos agrada porque se nota más nuestra palidez y nos consideramos medio expuestos. Tampoco le tememos al ajo.- dijo y Yugyeom se volvió hacia él. Estaba por decir algo pero la puerta se abrió con Jackson asomándose por allí.

-Hola, traje la mema para el nuevo bebé.- dijo sonriendo e imitando una infantil voz. Traía un recipiente blanco que no dejaba ver el contenido pero que Yugyeom reconoció con sólo olerlo.

-S-sangre...- dijo y dos segundos después estaba quitándole el recipiente a Jackson con los ojos iluminados. Bebió sin decir nada y de repente.

-Wow, eso fue rápido.- dijo Jackson mirando su mano ahora vacía. Yugyeom sentía como el líquido pasaba por su garganta y el placer lo inundaba por completo. La sed que estaba sostenida ahora era saciada y eso lo hacía sentir bien.

-¿Cómo te sientes ahora?-preguntó Bambam colocando cuidadosamente su mano en el hombro de Yugyeom. El menor se giró bruscamente y Bambam voló lejos golpeándose con la cama.-Mierda... tendremos que ayudarte con este poder porque nosotros lo soportamos pero llegas a hacer volar a un humano y puedes matarlo contra una pared.- dijo Bambam quejándose.

The reincarnation [•MarkJin•]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora