Capitulo 65

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Lauren.

-Bien jugado.- le digo a una rival besando su mejilla en el medio del campo.

-Gracias, también para ti.- me sonrió. -¿Cambiamos camiseta?.- me señala.

-Por supuesto.- le digo amablemente, aunque me haya pegado patadas todo el partido me la saqué para dársela quedando en mi top deportivo recibiendo su camiseta para ponerla a mi hombro.

Luego de volver a despedirme de ella, seguí saludando a las rivales en medio del campo y también a algunas de mis compañeras. Alce mis brazos aplaudiendo al público acercándome por fin a las gradas preferenciales donde estaba mi hermosa novia con la gobernada de Vero.

Ayer la mandaron a dormir al sofá porque se peleo con Emily. Que manera de reírme al escuchar como le suplicaba a su novia que no se enojara, pero Emily terminó ganando la batalla sin quedarle más opción que dormí toda incómoda. Quería ir a dormir conmigo pero no me gustaba su olor a pedos, el único olor que me agradaba era de mi princesita hermosa que había llegado como Hulk en la mañana.

¡Ya se había transformado en Fiona!

Es que es muy gruñona.

Además no hice nada Tan malo, tan solo salí con el equipo a celebrar la nueva temporada, más nuevas contrataciones como lo era mi gran amiga persona Tiane Endler, teniendo un buen momento. Si entendía la postura de Camila, yo también me hubiera molestado pero Camila exagera en su enojo, él no responder mis mensajes o llamadas lo hace, más me preocupo yo que ella cada vez que sucede algo así, no me molestaba que se enojara solo que a veces exageraba un poco en su enojo, solo fue una fiesta y no hice absolutamente nada más que estar con las chicas celebrando, incluso ni siquiera baile con otra mujer además de Endler y las chicas del equipo.

Pero la entendía.

Y más cuando la había extrañado tanto, por fin la tenía de nuevo conmigo, abrazándome y besándome en cada segundo porque la había necesitado todo el tiempo que estuvimos lejos, y no fue tanto solo dos semanas pero fue suficiente para darme cuenta de lo importante que la princesita se había vuelto en mi vida, la necesitaba conmigo la verdad. Quería verla cada día de mi vida, y aunque habláramos todos los días no era lo mismo, no cuando necesitaba de su presencia a mi lado pero era algo que no podiamos solucionar sino más bien sólo acostumbrarnos a esta situación.

-¡Mi princesita!.- la llamo para que se acercara y ella lo hizo de inmediato. -¿Viste que hice mucho goles?.- le digo como niña pequeña, ella me sonrió tomando mis mejillas.

-Lo vi, estuviste increíble mi sapito.- beso mis labios suavemente. -Aunque quiero ir golpear a todas las que te golpearon.- me dice y yo me reí levemente.

-No a la violencia.- le digo, con cuidado la tome de la cintura para bajarla al campo de juego envolviendo mis brazos a su alrededor. -Huelo mal.- le susurró.

-Un poco...- me dice oliéndome. -La verdad hueles como a Leo cuando no va a la peluquería.- ambas reímos por eso pero aún así no se separó de mi.

La tengo loca.

Soporta mi mal olor.

Así se hace, ustedes nunca.

¡Ella me ama a mi!

¡Mi novia!

Supera eso Alejandro Cabello, me como a tu hija enterita y me aguanta mi olor, a ti ni el olor a pata te soporta.

Lauren Queen Mil, Cabeza de nieve Cero.

-Van conmigo.- le pido tomando su mano entre la mía caminando por el campo hacia el camarín.

El Poder. CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora