Explicaciones

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-Jade, yo...yo te puedo explicar. Eh...- dijo muy nervioso mientras se quitaba la capucha a lo que el príncipe lo vio aún más sorprendido y molesto.

-Ya veo... ¿Así que escapaste y ahora resulta que eres un príncipe? ¿Qué clase de truco es ese? ¿Solo fingías ser un ladrón?- preguntó indignado al suponer el plan del joven.

-No, no Jade. Escúchame yo...

-¿Kal? ¿Kon? ¿Son ustedes? Creo que dejé la puerta abierta- dijo un tanto preocupada antes de abrir la cortina sorprendiéndose por ver al príncipe- Eh...Jade, que sorpresa querido ¿Cómo estás?...Em...Veo que viniste con el príncipe A...

-¿Te refieres a Kal?- preguntó serio con los brazos cruzados haciendo que la mujer se pusiera muy nerviosa. 

-¿Kal? Yo no sé de...

-No tienes por qué esforzarte Selina, él ya lo sabe- dijo algo preocupado haciendo que la mujer lo viera sorprendida.

-Jade no te enojes, por favor. Él solo...- dijo antes de que su padre se pusiera frente a él inclinándose a su altura. 

-No, Kon. Eso es algo que yo tengo que explicar. Tu sube con Selina- dijo  con una sonrisa ligera con una mano en el hombro del menor. 

-Está bien, papá- respondió antes de tomar la mano de la mujer para subir por las escaleras. 

-¿Mi papá estará bien?

-No te preocupes, querido. No hay nada que tu padre no pueda lograr- dijo con una sonrisa mientras subía las escaleras junto al niño antes de voltear ligeramente para ver al joven con preocupación. 

-No tenías por qué enviarlos arriba. Tu y yo no tenemos nada de qué hablar- advirtió con el ceño fruncido con intención de abrir la puerta para irse.

-Desde que te vi quise decírtelo...-dijo haciendo que el príncipe se detuviera - Pero no sabía por dónde podría empezar...Aunque estoy seguro de que a ti se te hubiera ocurrido algo mejor de haber estado en mi lugar...

-¿Y cuál se supone que es tu lugar?- preguntó con molestia antes de verlo de brazos cruzados.

-Las calles más pobres de Agrabah...-dijo serio y decaído dejando muy confundido al príncipe.

-¿A qué te refieres con eso?

-A que estás en todo tu derecho de irte. Yo no tengo nada bueno que ofrecerte. No sé en qué pensaba al haber hecho todo esto....Pero antes de que te vayas al menos quiero decirte la verdad- dijo viéndolo a los ojos antes de tomar aire bajando la mirada- Mi nombre real es Kal. Soy un ladrón desde que mi padre me abandonó. Creí que siempre estaría solo hasta que tuve a Kon y hace poco tuve la suerte de convertirme en un príncipe. Sé que nos conocimos muy poco pero hice todo esto con la intención de volver a verte y así conocerte. Te juro que no quería seguirte mintiendo, por eso vine con Selina para pedirle algún consejo porque la persona que soy realmente, no es alguien que siquiera debería siquiera pensar en acercarse a...- trató de explicar antes que el príncipe lo abrazara.

-... Creí que estabas muerto...- musitó con la voz quebrada a lo que el joven luego de no saber como reaccionar correspondió al abrazo sujetando la cabeza y cintura del príncipe con cuidado.

-Perdóname, Jade- se disculpó cuando de pronto unos chillidos de murciélago hicieron que ambos se separaran un poco. 

-Te envió el sultán ¿No es así?- preguntó mientras el murciélago aterrizaba en la cabeza del joven.

-¿Significa que estás en problemas?- preguntó algo preocupado.

-De seguro tendré que hacer unas lecciones de más o tendré que estar más involucrado en las aburridas reuniones de palacio, pero no es nada que no pueda manejar- explicó con una sonrisa haciendo una señal para que su murciélago volara a su hombro- Será mejor irme ahora o el sultán hará que los guardias salgan a buscarme.

Aladdin  (Versión Superbat )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora