A New starter, a New Apocalypse

Capítulo 3

_No, Simon. No le he dicho que está embarazada, esperaba a un mejor momento para contárselo.

El castaño se echó para atrás ante la mirada asesina del Herondale. 

_Simon, será mejor que vuelvas a tu habitación, con Clary despierta no creo que Jace necesite la ayuda de los dos, conmigo será suficiente. 

Después de unos minutos de indecisión, entre quedarse con su parabatai o ponerse a salvo del teñido, decidió ponerse a salvo

Cuando se quedaron solos, Jace y Jonathan empezaron a cambiarle las vendas a Clary. No hablaron de la metedura de pata de Simon, aunque Jace sabía que cuando se fuera Jonathan, Clary y él tendrían que hablar del tema. 

_¿Qué piensas sobre los bebés?_ preguntó Jace cuando se quedaron solos. Él acariciaba el cabello de Clary con suavidad. 

_No lo sé...ahora mismo, mi mente es un cúmulo de emociones contradictorias: culpa por haberlos puesto en peligro, miedo de no saber cómo actuar, felicidad porque esto no les ha hecho daño. No les ha hecho daño...¿verdad? 

A Jace se le secó la garganta por unos instantes.

_No les ha hecho daño, tranquila_ mintió Jace mientas la cubría con la sábana_ Ahora la cuestión es: ¿quieres tenerlos?

La chica lo meditó durante unos instantes. Era una decisión complicada, ¿estaba preparada para ser madre?

_Quiero tenerlos, ¿y tú? ¿Quieres ser padre?

_Sí. Lo haremos, Clary. Tendremos a estos dos preciosos bebés 

Jace ocultó lo que el hermano silencioso le dijo; según este, para confirmar qué efecto tendría sobre los pequeños el veneno, aún tendrían que esperar dos semanas más. Cuando estuviera confirmado se lo diría a Clary, contárselo ahora solo serviría para que la chica se preocupara más. 

Alec llegó al loft a altas horas de la madrugada y con la cabeza baja. 

La chica, la madre del niño, se había suicidado. Alec intentó hablar con la familia, pero nadie fue cuando la ambulancia se llevó el cuerpo al depósito de cadáveres. 

Solo a las horas, dos mujeres aparecieron en la morgue (la hermana y la madre de Megan) y no expresaban precisamente tristeza o dolor por la muerte de la chica

Alec no conocía de nada a Megan, pero su muerte y las causas que la llevaron a acabar con todo, le dolían. 

Llegó a su habitación, Magnus estaba durmiendo en la cama, al lado de esta la cuna con el bebé que aún en la oscuridad jugaba con el móvil que había sobre él. Cuando Alec encendió la luz, el niño lo vio, alzó sus pequeños bracitos y al entenderlo, Alec lo cargó con cuidado

_¿Ya estás aquí? _preguntó Magnus con voz adormilada mientras empezaba a abrir los ojos. 

_Sí_ Alec se sentó en la cama con las piernas cruzadas mientras acunaba al bebé en sus brazos_ Ella me ha pedido que lo cuide, ha sido su última voluntad. 

_Tranquilo _Magnus limpió una lágrima rebelde de la mejilla de Alec con su dedo y acto seguido lo abrazó_ lo cuidaremos. 

Clary miró de reojo la herida mientras Jace le curaba

_Está mucho mejor que ayer _ dijo él_ aunque tendrás que estar en reposo unos días más hasta que se cierre del todo. 

_Si ahora está "mucho mejor" no me quiero imaginar como estaría ayer. 

_No,  no quieres saberlo. Tengo que ir a ayudar a Alec con el papeleo de la adopción, volveré en una hora o menos. Pero si pasa algo, lo más mínimo, llámame y vendré en seguida_Besó la frente de Clary y se fue. 

Alec se había tenido que quedar despierto hasta las dos de la mañana, pero ya tenía todo el papeleo arreglado. Solo faltaba ponerle un nombre al pequeño. Le gustaba la idea de llamarlo como a su hermano, a Magnus también. Pero no podía dejar de pensar en la madre del niño, en Megan, ella debió de ponerle un nombre a su bebé. Y Alec sentía que el niño tenía derecho a llevar el nombre que su madre le puso al nacer, ese nombre y el crucifijo de oro sería lo único que le quedaría de ella. Pero sabía que averiguar ese nombre era imposible. Los únicos que podían saberlo eran los miembros de su familia. Y cuando se les preguntó, negaron saber de la existencia del bebé. 

_Pues con Max se queda _ dijo Alec escribiendo el nombre en el papel de registro. 4

Firmó al lado de la firma de Magnus (que había firmado en casa antes de que Alec se fuera para ahorrar tiempo) y lo envió por mensaje de fuego a Alacante para que el Inquisidor y la Cónsul dieran luz verde a la adopción. por suerte ya habían conseguido el permiso del Laberinto Espiral. Mañana por la mañana Max sería oficialmente su hijo. 

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¡Holi! ¿Qué os está pareciendo la historia? ¿Os apetecería que hiciera en un extra el pov de Max cuando lo abandonaron y Magnus y Alec lo encontraron?