Capítulo 3

2.5K 180 2
                                    

Son las 2:30 de la tarde y ya he terminado el trabajo que me ha encargado mi jefe, ja, sabía que si podía. Me estiro en mi lugar, truenan mis huesitos, guardo todo en la computadora y en una memoria, siempre hay que tener una copia de los archivos y datos, cuando ya todo esta guardado y listo me dirijo a la oficina del señor Levrige

-Adelante- responde después de que he tocado su puerta

-Aqui esta todo lo que me ha encargado señor- digo extendiendole la memoria colo verde que llevo en mi mano derecha

-Muy bien, ahora porfavor encarguese de revisar que todo este listo para la reunión de esta noche, documentos, papeles y mmm- parece pensativo- si tiene alguna propuesta para la inversión mucho mejor, después de todo usted estudio administración- lo dice después de varios segundos

-Así es señor Levrige y cuente con eso, algo más?- se me queda mirando nuevamente, da un pequeño suspiro

-Traigame un café y se puede retirar a las 6 por hoy- responde

-Si señor- mucho mejor para mi, puedo descansar un poco más y cocinar algo

Después de llevar su café me dispongo a realizar todo lo que me ha indicado, ha venido su amigo Jared y ya ha ido a comer con su hermana y madre, el tiempo pasa rápido y cuando veo faltan 15 minutos para las 6 de la tarde, me pongo a recoger mis cosas, apago la computadora, bah ahora tengo que avisarle que me retiro, bueno el igual lo hará, tiene una cita, se que es para pasar el rato con una mujer.

-Adelante- su voz nuevamente se escucha cansada

-Yo venía a recordarle que tiene una cita con la señorita Corin y además ya me retiro- mi voz es firme, pero suave a la vez

-Muy bien puede retirarse, pero antes podria cancelar con la señorita, digale que será para la próxima y mande un collar de oro a esta dirección- me extiende su mano izquierda en la cual tiene un papel, suelto un sonoro suspiro

-De acuerdo, con permiso- salgo de su oficina y voy a la mia a hacer la bendita llamada

Primero llamo a la joyería que frecuento llamar cuando esto pasa y pido un collar pequeño pero llamativo de oro, con piedritas color lila y con un hermoso grabado, una vez que he dado la dirección llamo a la señorita Corin para avisarle

-Diga- contesta una voz suave al otro lado del teléfono

-Buenas tardes soy la secretaria del señor Levrige, le llamo para informarle que el no podrá acudir a su cita por cuestiones personales, pero cuando pueda el le llamará, además a enviado un obsequio para usted como disculpa- es lo mismo que digo cuando esto pasa

-Muy bien, digale que no se preocupe y que espero su llamada, además yo podría hacer que se relajara- lo dice de manera sensual que me dan escalofríos

-Este si, bueno hasta luego- digo y cuelgo.

Las mujeres con las que el señor frecuenta pasar el rato me han dicho muchas cosas, aveces se portan groseras, lindas, seductoras y con un vocabulario subido de tono, al cual aún no logró acostumbrarme. Recordar eso hace que suelte una risita y niegue con la cabeza

-Ha echo lo que le he pedido?- de nuevo salto en mi lugar

-Este si señor, me ha dicho que espera su llamada y que ella podría hacer que se relajara- lo digo haciendo una mueca, el permanece serio

-De acuerdo, puede retirarse y- piensa nuevamente- gracias

-Aja- no es raro que me de las gracias, aunque solo pocas veces lo ha echo.

Me dirijo al elevador para porfin ir a mi departamento, soy la única en el, eso da miedo, cuando el elevador suena bajo rápido y camino hacia la puerta principal, me despido del guardia el cual se llama Jim.
Cuando salgo el aire pega en mi rostro, el día esta excelente ni muy caluroso, ni muy frío, y el viento se siente genial, camino por la banqueta con pasos despreocupados ya que aún tengo mucho tiempo para la reunión de esta noche.
Después de media hora he llegado y lo primero que hago es quitarme los zapatos y la camisa, me gusta estar cómoda en casa, me dirijo hacia la cocina a ver que haré de comer y lo tengo, taquitos veganos, no soy vegana al cien, pero me gusta la comida vegana puedo comer ambos estilos y es agradable, tardo media hora en prepararlos, pero ha valido la pena me han gustado demasiado, miro el reloj que tengo en la sala y me doy cuenta que son ya las 7:25, aún es muy temprano queda tiempo para un largo baño, pero primero escogeré que me pondré. Tengo ropa que solo me he puesto una vez y la he abandonado, mi cuerpo no ha cambiado demasiado, solo que ahora tengo más curvas, mientras busco veo una linda falda negra de encaje así que decido medirmela, me queda casi como cuando la compré solo que ahora marca más mi figura, busco una camisa y me quedo observando una color verde oscuro, es de manga larga con un escote bajo y con transparencia en la parte de la espalda alta, me mido la falda y camisa juntas, me queda muy bien, la camisa llega un poco abajo de mi ombligo y eso me encanta, pero ahora faltan los zapatos, tomo unas botas negras bajas de tacón ancho y alto, me gusta como me veo. Ahora si tomo mi ropa interior negra, mi toalla y me meto a la ducha.
El agua tibia relaja mi cuerpo, siento como recorre cada parte de mi piel, la sensación es placentera, alzo mi cabeza y dejo que caiga el agua desde mi cara hasta mis pies, un escalofrío corre por mi cuerpo cuando observo las gotas ir desde mi pecho hasta mis muslos, dejando así escapar un pequeño suspiro que suena más como un gemido, necesito concentrarme, no tengo tiempo para darme placer por ahora, sin más que hacer muevo mis manos que ya se encontraban dirigiéndose a la parte baja de mi cuerpo y coloco en ellas shampoo. Me enredo en una toalla color azul el cuerpo y en una más pequeña el cabello, seco bien mi cuerpo, me pongo la ropa interior y coloco crema en el, cuando ya he terminado comienzo a colocarme la ropa que he escogido, y ahora maquillaje, no soy una experta pero diré que me se maquillar, coloco sombra verde y dibujo la línea negra en la parte de arriba y abajo de mis ojos, me pongo un labial rojo mate, alzo mis pestañas y el cabello lo dejo suelto, coloco unos pequeños aretes color plateado y rocio perfume en mi he quedado supongo que bien, observo mi celular y son las 8 de la noche me tomará media llegar al restaurant, pero si no pasa un taxi luego ne tomará más tiempo llegar, mejor salgo de una vez, solo busco mi bolso en el cual coloco mi celular, agenda, lapicero y documentos, no he pensado en alguna propuesta para los inversionistas, pero se que en el momento se me ocurrirá algo, cierro la puerta de mi hogar con llave y me dirijo al elevador. Para mi suerte el taxi no tarda en pasar y solo tardo 45 minutos en llegar al lugar, pago y bajo, wow, se ve que es muy lujoso este lugar, cuando pienso avanzar a la entrada del lugar alguien toma mi brazo con delicadeza.

-Puntual, como siempre- murmura por lo bajo- ha seguido mis indicaciones- dice después de mirarme detenidamente

-Así es señor- lo digo de manera lenta

-Pues pasemos- sigue caminando sin esperarme

-Mesa a nombre del señor Levrige- su voz vuelve a ser gruesa y demandante

-Si señor por aquí porfavor- dice el chico que ha buscado el nombre de mi jefe en la lista

Nos dirige a una mesa grande en una parte alejada de los demás, es comodo, privado, la iluminación es buena, el mantel es color blanco y

-Ha traido los documentos?- me saca de mi observación la persona que se encuentra mi lado izquierdo

-Asi es- saco de mi bolso lo que me ha pedido y se lo entrego

-Bien tiene alguna propuesta?- vuelve a preguntar

-La verdad es que no, su propuesta es buena y estoy segura que ellos accederán a invertir en su empresa, y usted podrá invertir en la de ellos- digo para animarlo

-Eso espero- es lo único que dice

Reviso mi celular aun faltan 10 minutos para que lleguen, miro ami jefe y este se encuentra revisando su celular, hoy lleva un traje azul con camisa blanca, una corbata negra y zapatos negros, su cabello aún se ve húmedo por lo que deduzco se ha bañado hace poco, se ve muy bien y se ve mucho más joven y relajado, sobre todo en este momento en el cual se le ha escapado una pequeña sonrisa, no lo niego el me atrae, pues como no hacerlo, aunque no pienso dejar que el se entere en algún momento.

Almenos eso creía yo en ese momento, el momento en el cual no sabía que el sería mi mayor atracción, mi mayor tentación.

PROHIBIDO ENAMORARSE!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora