Llegué a casa cansado de las largas horas de practica que tuve, me había quedado varías horas más ensayando para perfeccionar ciertos pasos.Entré haciendo el menor ruido posible, ya que era tarde y los chicos deberían estar descansando o durmiendo.
Fui a la cocina a por un poco de agua, pero mientras caminaba hacía allí, escuché gritos desde una de las habitaciones del piso principal, la cual estaba a un lado de la cocina.
Me asomé un poco por la puerta, la cual estaba un tanto entreabierta, y allí visualice a mis Hyungs hablando entre ellos.
—El manager volvió a llamar —la voz de Namjoon hyung se escuchó por encima de las demás.
—¿Jungkook? —la voz llena de frustración de Jimin se escuchó— no entiendo que ocurre con él.
Mis ojos se cristalizaron al escucharlo decir eso, él siempre me había dicho que no era un problema, él no mentiría, ¿verdad?.
—El Manager está pensando en que lo mejor será que comencemos a ser mas firmes con él —escuché a seokjin hyung decir.
—Es lo correcto, no podemos seguir soportando sus caprichos.
¿Hoseok realmente estaba diciendo eso?, me negaba a aceptar que aquel chico había dicho esas palabras, él era un sol.
Las voces de Yoongi y Taehyung dándole la razón me hicieron querer llorar aún más.
No quería seguir escuchando eso, pero tampoco interrumpiría y les diría que dejaran de hablar a mis espaldas, no tenía la fuerza de voluntad para hacerlo.Me di la vuelta volviendo hacía la cocina, sentí mis piernas temblar al igual que todo mí cuerpo cuando di unos pasos más. Pero antes de llegar a la cocina mi espalda impactó con fuerza en la pared.
Cerré mis ojos ante el impacto, gimiendo de dolor, la parte baja de mi espalda había impactado contra una pequeña mesita.
—Eres una molestia para el grupo —las voces de mis Hyungs me hicieron abrir mis ojos con asombro. Estaban frente a mi, sin dejar de acorralarme contra la pared.
—Un mocoso intentando llamar la atención.
Mis lagrimas comenzaron a deslizarse por mis mejillas cuando sentí como Taehyung envolvía mi cuello con sus manos y ejercía presión.
—Por favor, TaeTae —rogué con voz temblorosa.
Intenté moverme, buscando alguna salida pero no pude, tan solo me quedó mirar a Taehyung con suplica, pero solo vi como dirigía su puño hacia mí rostro, y cerré mis ojos esperando el golpe.
—¡Jungkook!.
Abrí mis ojos de golpe. Namjoon se encontraba sujetándome de mis hombros, sin dejar de fruncir el ceño, en total confusión.
Me senté en la cama, intentando procesar lo sucedido y tranquilizar mi respiración. Quería alejar lo fantasioso de la realidad, aunque era tan raro que ya no sabia que había sucedido y que no.
—¿Estás bien?, no dejabas de murmurar cosas, realmente parecías asustado.
Lo miré fijamente y suspiré pesadamente negando con la cabeza.
—Fue un sueño, solo eso —murmuré pasando mis manos por mi cabello, desordenandolo aun mas.
Lleve mis manos a mi garganta, incluso si aquello fue un sueño podía sentir la rara sensación de fuerza ejercida en esa parte de mi cuerpo.
—¿Jungkook? —volvió a preguntar colocando una mano en mi hombro mientras se sentaba al borde de la cama
—estoy bien, tranquilo —le sonreí débilmente, aun afligido por aquella pesadilla.
Esté me sonrió de vuelta muy poco convencido, para luego pararse y caminar hacia la puerta.
—Seokjin me pidió que te avisara que iremos a comer fuera de casa. Te estaremos esperando en la sala —dijo y salió cerrando con cuidado la puerta tras él.
Me pase las manos por mi cara con frustración. Aquello no era real y nunca lo seria.
•Tal vez•
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Broken -Jk
Teen FictionJungkook creyó tener el control de todo. Pero, cuando su salud mental decayó, se dio cuenta que nunca tuvo aquel control. -No adaptaciones. -Leer es tu responsabilidad. -Derechos 100% míos. -Depresión/ Ansiedad. -Bangtan.